Imagen de la ribera del Tajo repleta de basura.

Imagen de la ribera del Tajo repleta de basura. Divi San José

Toledo

El caudal del Tajo baja en Toledo y muestra la otra cara de la crecida: kilos de basura esparcidos por la ribera

El río ha abandonado el umbral rojo liberando de agua numerosas zonas que hasta ahora estaban anegadas.

Más información: El Tajo alcanza este martes el caudal máximo a su paso por Toledo desde que empezó a llover: hasta 484 m3/segundo

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Poco a poco el Tajo está recuperando la normalidad en Toledo. Después de una semana en la que los desembalses aguas arriba dejaban la mayor crecida que se recuerda en la capital regional con cifras de hasta 484 metros cúbicos por segundo, el río ha dejado atrás el umbral rojo.

Según los datos ofrecidos por el Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), el medidor situado en la Casa del Diamantista refleja un flujo de 448,3 metros cúbicos por segundo -448.300 litros-, por debajo de los 448,8 que marca el nivel rojo.

De esta manera, el Tajo ha entrado en umbral naranja y se aproxima al amarillo que la CHT cifra en 448,2 metros cúbicos por segundo en este punto de la ciudad.

Zona de recreo que estos días había estado anegada por la crecida.

Zona de recreo que estos días había estado anegada por la crecida. Divi San José

Efectos de la crecida en la ribera del Tajo en Toledo.

Efectos de la crecida en la ribera del Tajo en Toledo. Divi San José

Este paulatino decrecimiento ha provocado que por primera vez en tres semanas el agua empiece a desaparecer de numerosos puntos de la senda ecológica que tuvieron que ser cerrados por inundación. Zonas como las inmediaciones del paseo del Barco de Pasaje, donde parques y zonas de recreo estaban completamente anegadas, han vuelto a quedar libres de agua tras la avenida.

Sin embargo, esta bajada del caudal también ha dejado una triste cara en las riberas del río con kilos de basura amontonados en diferentes puntos del curso del río. Más allá de los sedimentos y la vegetación que el agua ha arrastrado, en varios lugares los plásticos y los desperdicios parecen ser un elemento más del ecosistema fluvial.