El alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, ha mostrado este lunes de nuevo su compromiso de mejorar la salud del río Tajo a su paso por Toledo y recuperar las riberas para que se conviertan en lugar de ocio y esparcimiento para los toledanos. Así lo ha señalado el alcalde en un desayuno informativo organizado por la Cátedra del Tajo UCLM-Soliss donde ha realizado balance de su actividad a lo largo del último año.

En este sentido, Velázquez ha recordado la situación que se encontró el Gobierno municipal al llegar al Ayuntamiento fueron múltiples sanciones por parte de la Confederación Hidrográfica como consecuencia de los vertidos ilegales que se estaban haciendo al río y “años de promesas, eslóganes y buenas intenciones que, lamentablemente, nunca se han plasmado, a pesar de que incluso nos llegaron a prometer que nos bañaríamos en el río Tajo”.

Por ello, “al llegar a la alcaldía, teníamos dos opciones: hacer lo mismo o cambiar de rumbo, y esto último es lo que hemos hecho, ponernos a trabajar y a hacer cosas útiles para las personas, en todos los aspectos, no solo en este”, ha indicado Velázquez.

Plan integral

En materia del río, según el alcalde, han sido dos cuestiones en las que se ha centrado la acción del Gobierno municipal, por un lado, crear una Concejalía con nombre propio, un compromiso adquirido en campaña electoral, y por otro, poner en marcha un plan de recuperación integral de las riberas del Tajo para integrarlo en la ciudad.

Lo primero que se hizo, ha explicado Velázquez, fue contactar con la Cátedra del Tajo y con las diferentes plataformas y asociaciones en defensa del río para poner en marcha el Plan de Vertidos Cero, que tiene como objetivo fundamental mejorar la salud de nuestro río en el ámbito de nuestras competencias, “para lo que fue fundamental un estudio realizado por la propia Cátedra ‘InvesTAJO’, que nos proporcionó los puntos de vertidos existentes en la ciudad”.

Con este estudio sobre la mesa, en tan solo dos meses se cerró el punto de vertido en el recinto ferial de la Peraleda y poco después del Arroyo del Aserradero, “y ya les confirmo que en la zona de los Cigarrales en el Arroyo de La Cañada está terminada la obra de conexión y se está requiriendo a los usuarios que vertían al arroyo que soliciten la acometida a la conexión”, ha anunciado el alcalde de Toledo.

Buscando una solución

El siguiente paso en este Plan de Vertidos Cero, es abordar, de la mano de la Universidad de Castilla-La Mancha, la situación del vertido del campus de la Fábrica de Armas, “que no dispone de autorización de la Confederación Hidrográfica del Tajo, por lo que estamos trabajando en una solución conjunta que pasa por la instalación de un sistema de depuración, reutilizando las aguas una vez depuradas para el riego de las zonas verdes”, una solicitud que ya está en fase de estudio en el Ayuntamiento, tal como afirma el alcalde.

Además, ha continuado Carlos Velázquez, se va a poner en marcha un programa de revisión de puntos de desbordamiento al río de la red de saneamiento a fin de minimizar el impacto en situaciones de lluvias, a través de un Plan Integral de Gestión de los Sistemas de Saneamiento, que incluye también la revisión de los vertidos a la depuradora de Santa María de Benquerencia.

Y es que, ha señalado Velázquez, “se están monitorizando los vertidos en el Polígono Industrial y revisando las autorizaciones, a través de un programa de control de los vertidos de empresas sujetas a autorización ambiental”.

Depuración de aguas

Además, está en licitación un nuevo contrato para el servicio de depuración de las aguas residuales de la EDAR de Santa María de Benquerencia, lo que permitirá mejorar el funcionamiento de la instalación. “Y esto ha sido posible gracias también a la Cátedra del Tajo que trasladó al Ayuntamiento ese informe con los puntos de vertidos detectados”.

Cátedra con la que se sigue trabajando estrechamente y de hecho, ha anunciado el alcalde, “estamos trabajando en un convenio con la Cátedra para elaborar de forma pormenorizada un estudio de las dos masas de agua en cada tramo del Tajo para actuaciones posteriores”.

Se trata de "hechos" en materia de agua en la ciudad de Toledo: “Estamos comprometidos con el río Tajo, y como Ayuntamiento, no vamos a perder el tiempo en cosas que no nos afectan porque es nuestra responsabilidad mirar para adentro y saber cuáles son nuestras competencias para actuar y hacer del río un lugar mejor al que poder ir”, ha concluido Velázquez.