Tradición y renovación tienen que ir de la mano. Esta es la máxima que persiguen los responsables de Venta de Aires, el restaurante más antiguo de Toledo. Si hace un siglo sus paredes eran testigo de la fundación de la Orden de Toledo a la que pertenecían Luis Buñuel, Salvador Dalí, Federico García-Lorca o Rafael Alberti, ahora han dado un paso más para llevar ese espíritu a un nuevo espacio en la Venta de Amando.
"La idea surgió al detectar que podíamos generar un espacio más exclusivo para eventos y que se diferenciara en la amplia oferta que posee Toledo," asegura a EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM Cuca Díaz de la Cuerda, directora de Venta de Aires. Con la idea clara, solo faltaba buscar el lugar idóneo y lo encontraron en la Venta de Amando, un amplio inmueble que se sitúa al lado de la A-42 cuyo último uso había sido albergar las oficinas de Casbega (Compañía Castellana de Bebidas Gaseosas) y que tradicionalmente había sido posada de viajeros.
"Cuando lo vimos nos pareció un lugar distinto con mucho encanto del que se puede sacar mucho partido, sobre todo en la época otoño-invierno," explica Díaz de la Cuerda. No en vano, la parcela de 8.620 metros cuadrados alberga un amplio patio de 800 metros, unos 1.200 metros de naves que eran usados como almacenes y la casa principal donde se alojaban las oficinas.
Parte de ese "encanto" del que habla la directora de Venta de Aires no estaba a la vista cuando adquirieron el inmueble. "Al empezar las obras de rehabilitación, nos encontramos unos restos arqueológicos. Rápidamente hicimos un estudio que dató que se trataba de una antigua bodega de mitades del siglo XIX cuando allí existió un ventorro llamado la Venta de Pinedo", agrega. Esta bodega, que está "intacta," supondrá un atractivo más que estará integrado en el nuevo espacio.
Más allá del plano estético, este emplazamiento también tiene dos grandes ventajas: su situación y su capacidad. Junto a la autovía A-42, que une Toledo con Madrid a la salida de la capital, posee unos accesos inmejorables para turismos y autobuses desde la vía de servicio, lo que permitirá la organización de eventos con hasta 995 personas, que es la capacidad que han solicitado en la licencia municipal.
Apertura
En estos momentos, Venta de Aires está a expensas de cumplir todos los trámites burocráticos para obtener la licencia de apertura. El expediente, que ya ha pasado por la Comisión de Urbanismo de Toledo, también ha llegado a la mesa de la Consejería de Fomento, que será quien tendrá que autorizar el cambio de calificación de un terreno rústico que además cuenta con protección paisajística al situarse en el cono visual de Toledo.
A este respecto, Cuca Díaz de la Cuerda sostiene que "en principio no tiene que haber problema alguno porque la reforma se centra en recuperar un inmueble que ya está construido y que no vamos a alterar con nuevas edificaciones."
Con todo, los plazos que establece la administración hacen prever a los promotores que la apertura de este nuevo espacio se produzca no antes de finales de año o comienzos de 2023.
