Emiliano García-Page
Page alerta desde Bruselas que un "recorte tan bestial" de la PAC "pondrá en juego más cosas de las que pensamos"
Llama a que el PSOE y el PP busquen un consenso en España para garantizar que, "en el peor de los casos", las cosas "queden como están".
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Emiliano García-Page ha participado este miércoles en Bruselas en la reunión de la Delegación Española del Comité Europeo de las Regiones con eurodiputados españoles. Desde allí ha lanzado una de sus críticas más duras a la propuesta de reforma de la Política Agraria Común (PAC). Ha calificado el planteamiento de la Comisión Europea como "muy decepcionante" y ha advertido de que implica "un recorte tan bestial" que "pondrá en juego más cosas de las que pensamos".
La Comisión planteó inicialmente un borrador presupuestario para el periodo 2028-2034 que contempla algo más de 320.000 millones de euros para la PAC. Esto supondría una reducción cercana al 21 % respecto al actual sexenio, un escenario que Page ha considerado incompatible con la cohesión y con la estabilidad del campo europeo.
Page ha subrayado que el escenario que plantea Bruselas resulta "casi contradictorio con lo que votó la gente en las últimas elecciones europeas". Ha indicado que, aunque se hayan introducido algunos ajustes, solo suponen "un parche tibio, tímido" y que, "de no cambiar, de no avanzar", Europa afrontará "una papeleta muy seria".
Crisis de seguridad
Durante su intervención, ha coincidido con las posiciones expresadas por otros presidentes autonómicos como el andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla, la navarra María Chivite y el gallego Alfonso Rueda. Ha insistido en que "este momento es crucial" y ha lamentado que la propuesta presupuestaria siga la misma línea de tensión que, según ha recordado, se viene repitiendo "en las últimas décadas" entre países del norte, tradicionalmente recelosos de los fondos de cohesión y de la política agraria comunitaria.
El presidente castellanomanchego ha denunciado que algunos Estados están utilizando "la efervescencia, la emergencia de la crisis de seguridad" para intentar que el refuerzo del gasto militar se financie recortando la PAC.
"Si Europa tiene que abordar gastos excepcionales para una mayor seguridad, ese es un debate", ha apuntado. Y ha añadido que él mismo cree que "es necesario hacer un mayor esfuerzo", pero que ese incremento presupuestario "no puede ser a costa de los avances que nos han caracterizado como Unión Europea".
Page ha recordado que la UE gestiona "el uno y pico por 100, prácticamente un poquito más que el 1 % del PIB", por lo que considera que cargar sobre ese margen un esfuerzo extraordinario equivale a erosionar las políticas que vertebran Europa. Por eso ha reiterado que el continente necesita "avanzar en cohesión" y evitar que las decisiones se "centralicen cada vez más en los Estados miembros".
También ha alertado sobre la deriva política interna en Europa. Ha señalado que los "vaivenes electorales y sociológicos" país por país están añadiendo inestabilidad, y ha advertido de que "en Europa se han colado caballos de Troya que desde dentro lo que quieren hacer es poco más o menos que reventarla".
"El tamaño importa"
Page ha defendido que Europa sigue siendo "la gran necesidad" tanto para España como para el conjunto del continente, porque "el tamaño importa" en un mundo global y porque la diversidad creciente exige más cohesión. Ha reivindicado además el papel de regiones y ayuntamientos en la construcción de una "idea de ciudadanía" que supere el viejo "club de Naciones".
Ha apoyado la resolución que rechaza los recortes y ha asegurado que es "absurdo que se plantee un recorte tan bestial de la política agraria comunitaria y los fondos de cohesión y de desarrollo rural". "Nos jugamos muchísimo", ha remarcado, reclamando "redoblar esfuerzos".
Y ha añadido un mensaje dirigido a España. Si finalmente la UE se encamina hacia un modelo donde "los Estados mandan más" y se limita el papel de las regiones, ha señalado que el país necesitaría un protocolo claro para gestionar el reparto interno. "Si la solución no nos viene por la Comisión Europea, nos la tendremos que buscar los españoles", ha dicho. Ha planteado un mecanismo consensuado entre autonomías y Estado que reduzca "el margen de discrecionalidad" según la coyuntura política.
Page ha concluido que este acuerdo interno es posible y que, "si las grandes formaciones políticas estamos en el mismo consenso", España podrá garantizar que, "en el peor de los casos", las cosas "queden como están".