Blanca Fernández

Blanca Fernández

Región DECLARACIONES DE LA NUEVA PORTAVOZ Y CONSEJERA

Blanca Fernández y su humilde reconocimiento de que no es experta en Igualdad

8 julio, 2019 07:32

La nueva portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha y consejera de Igualdad, Blanca Fernández, asume sus nuevos cargos "con mucha ilusión y con altas dosis de responsabilidad", ya que en ambas áreas sus antecesores Nacho Hernando y Araceli Martínez "han dejado el pabellón muy alto". Reconoce humildemente que no es experta en Igualdad,aunque es una mujer que desde hace tiempo se dedica a la política y está segura de que su acción ha contribuido a que otras mujeres se hayan animado a formar parte del proyecto político en Castilla-La Mancha.

En declaraciones a Efe, Fernández ha confiado en estar "a la altura de las circunstancias", ya que las gestiones de Nacho Hernando, como portavoz del Ejecutivo autonómico y de Araceli Martínez, como viceconsejera y directora del Instituto de la Mujer "son difícilmente superables".

Ambos "se han puesto a mi entera disposición", ha subrayado Fernández, que ha añadido: "Se lo agradezco en el alma y voy a abusar mucho de su confianza porque me encanta aprender de los mejores, y en ese sentido Nacho y Araceli son dos personas de las que puedo aprender mucho".

Fernández no le da más importancia a una de las áreas que a la otra "porque es muy difícil elegir entre papá y mamá", pero ha admitido que "de alguna manera" para ella es un reto más intenso la Consejería de Igualdad.

Mucho que aprender

Es consciente de que es un ámbito en el que tiene "mucho que aprender" y aunque es una mujer que desde hace mucho tiempo se dedica a la política y está segura que su acción ha contribuido de alguna manera a que otras mujeres se hayan animado a formar parte del proyecto político en Castilla-La Mancha, no es experta en igualdad, y necesita "imbuirse, empaparse y aprender".

Pero si tiene muy claro "que hay tareas pendientes aún en la región y que es necesario acometer, como la corresponsabilidad familiar, la conciliación, una buena ley para la protección de las personas LGTBI en Castilla-La Mancha".

Quedan muchas tareas pendientes, "e indudablemente mantener todo el buen trabajo que ha hecho Araceli Martínez a lo largo de la pasada legislatura", ha comentado Fernández, que ha señalado que el orden de prioridades "lo tendremos que marcar cuando nos pongamos a trabajar de manera efectiva".

No obstante, ha destacado que el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, dejó muy claro en su discurso de investidura "que una de las leyes que había quedado pendientes en la anterior legislatura es lo que hoy es un borrador para la protección de los derechos y de las libertades de las personas LGTBI y yo creo que eso lo podemos retomar bien y pronto".

Además, a ella le gustaría hacerlo "con el máximo consenso posible" de las organizaciones sociales y de todos los partidos políticos.

Adelantados

Según la futura consejera de Igualdad "en un contexto en el que vuelve a haber movimientos reaccionarios, no solo desde la política sino lamentablemente también desde la sociedad, que ponen en cuestión los derechos y las libertades civiles de algunos colectivos y de algunas personas, es importante que Castilla-La Mancha vuelva a demostrar que estamos delante de la justicia, del sentido común y del respeto".

También ha considerado muy importante trabajar en materia de conciliación laboral y familiar, a pesar de que el Gobierno pocas competencias en la materia, porque se puede aportar desde la pedagogía política a afrontar "uno de los grandes retos que tenemos como sociedad, que es procurar esa conciliación laboral y familiar que a veces es prácticamente imposible con el mercado laboral que tenemos".

Ha reiterado que el Gobierno de Castilla-La Mancha no tiene competencias, pero si puede contribuir "a sensibilizar a la sociedad, al mundo de la empresa, al mundo sindical, a la sociedad en sí misma, de que los hombres y las mujeres tienen que compartir en absoluta igualdad las responsabilidades familiares".

Y también es necesario sensibilizar de que "la crianza y la educación de los hijos no le corresponde solamente a la mujer, le corresponde a la familia, y que también en buena medida la sociedad tiene una responsabilidad ahí de facilitar a las familias todo lo posible la conciliación", ha considerado.

En ese sentido, cree que al menos desde la perspectiva de la pedagogía política "podemos hacer mucho" y ha sentenciado: "Y lo vamos a hacer".