El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Manuel González Ramos, opina que el Ejecutivo que ha diseñado el presidente, Pedro Sánchez, "ha caído bien en la ciudadanía", no solo por las personas que lo componen sino también porque "este país necesitaba otro tipo de imagen".

En una entrevista concedida a la Agencia Efe apenas un mes después de tomar posesión del cargo, el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha analiza la llegada de Pedro Sánchez a la Moncloa, tras una moción de censura contra el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy a raíz de la sentencia de la trama Gürtel. A su parecer, "este país necesitaba otro tipo de imagen" y, además, asegura que a través de sus contactos con la ciudadanía, el nuevo Gobierno "ha caído bien" entre los españoles, pues "la gente transmite ilusión en la calle".

Estas expectativas positivas surgen, a su modo de ver, no solo porque se han incorporado "políticos del PSOE de indudable valía profesional y política", como la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, o el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, sino también porque se han sumado otros profesionales "que políticamente no tienen tendencia, pero sí una gran solvencia profesional", como el ministro de Ciencia, Pedro Duque, o el del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

"Le han dado a la gente confianza", recalca González Ramos, que subraya, asimismo, que el Gobierno central busca "recuperar el protagonismo perdido a nivel internacional" y también "la ejemplaridad ética". Un ejemplo de ello es, a juicio, que el exministro de Cultura, Màxim Huerta, fue "cesado inmediatamente" tras hacerse público que había sido multado por Hacienda, seis días después de su toma de posesión.

Sin embargo, afirma que una de las peticiones que ha hecho Pedro Sánchez a todos los cargos que nombra es que no se comprometan "con imposibles, para no frustrar la ilusión de la gente". "Hay que ser realistas y atender a la gente, pero no frustrar las expectativas positivas", reflexiona González Ramos.

Un proyecto que no se llevará a cabo

El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, que recuerda que Sánchez se ha propuesto agotar la legislatura con lo que no se convocarían elecciones generales antes de 2020, también comenta uno de los proyectos que, según ha dicho el propio presidente del Gobierno, no podrá llevar a cabo este mandado, el de la financiación autonómica.

En cualquier caso, afirma que Sánchez "buscará el momento adecuado de abordar ese tema con las comunidades autónomas", pero opina que "primero hay que dar tranquilidad, sosiego y calma a la crisis territorial" con Cataluña.