El campo

Los ganaderos de Castilla-La Mancha sacrifican a sus animales porque no hay agua ni pasto

ASAJA asegura que la situación en el sector es de "desolación" y pide medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad de las explotaciones.

31 agosto, 2022 13:54

"Para reducir gastos, los ganaderos de la región tienen que sacrificar vacas y ovejas que, en circunstancias normales, hubieran seguido en las ganaderías". Así lo ha denunciado este miércoles el secretario general de ASAJA en Castilla-La Mancha, José María Fresneda, que ha explicado que la sequía está provocando que en el campo no haya agua ni pastos. Una dramática situación que obliga a los dueños de las explotaciones a mantener a los animales con más pienso y haciendo uso de cisternas, un sobrecoste que, sumado al desorbitado incremento de la factura energética, en muchas ocasiones no sale a cuenta. 

Así, Fresneda ha alertado de la desolación de los ganaderos castellano-manchegos por tener que enviar prematuramente al matadero a los animales ante la falta de agua y alimento para poder abastecerlos. "Solo en la provincia de Toledo se han sacrificado el 40 % de las cabezas de bovino en menos de dos meses", ha asegurado.

La escasez de agua, además, afecta especialmente al ganado lácteo, que reduce su producción drásticamente cuando los animales no se encuentran bien hidratados. "No podemos dejar morir a nuestros animales porque no nos garantizan el suministro de agua en las explotaciones, mientras nos ponen a pelear por los pastos y descontrolan la fauna silvestre, culpa de una PAC ideológica ajena a la realidad", critica el ganadero conquense Vicente Caja.

Competencia por beber

En la misma línea, Fresneda asegura que "las políticas actuales protegen más a los animales salvajes que al ganado", algo que ha provocado "un descontrol poblacional en la fauna silvestre que, además de competir con el ganado por el agua de los charcos, le transmite enfermedades infecciosas como la tuberculosis o la sarna"-

Por todo ello, Asaja Castilla-La Mancha solicita a las administraciones más protección para el ganado y nuevas medidas que palíen la crítica situación del sector, tales como ayudas para garantizar el suministro de agua a las explotaciones ganaderas, facilitar la compra de cubas y cisternas o la construcción de abrevaderos, entre otras. "Una política hidráulica que asegure el abastecimiento de agua para todos y no solo para los que deciden los ideólogos de despacho", apostilla Fresneda.

Igualmente, la organización agraria ha solicitado ayudas económicas y medidas fiscales, además de agilidad en las tramitaciones de usos de agua, dando prioridad a la resolución de los expedientes pendientes de los ganaderos y los jóvenes que se quieren incorporar a la actividad agropecuaria ya que, según denuncian, el retraso les está dejando en una situación de parálisis total en su actividad económica.