El Socuéllamos sigue adelante en la pelea por el ascenso y jugará la última eliminatoria para subir a Segunda B después de una clara victoria frente a un Móstoles que nunca estuvo a gusto sobre el Paquito Giménez. Los azulones se impusieron por 2-0 ante un rival al que siempre controló y ahora esperan rival para saber contra quién se jugarán su presencia en la categoría de bronce para la próxima campaña.

Ya desde el principio se vio al Socuéllamos convencido de lo que debía hacer para poner la eliminatoria de su lado. Y es que los azulones, conscientes de que un gol les allanaría el camino, metieron presión desde el principio a los madrileños, a los que les costó adaptarse a las condiciones particulares del Paquito Giménez. Así las cosas, no hubo minutos de tanteo y los ciudadrealeños tuvieron una doble ocasión nada más empezar, pero no Kike Domínguez ni Jesús García acertaron.

Con todo, a pesar de no entrar esta primera oportunidad, el partido tuvo un claro color azulón. Más aún cuando se tuvo que retirar en las filas visitantes Álex Alonso al cuarto de hora de juego, tras dolerse por una entrada. Este contratiempo terminó de descentrar a los madrileños, que se vieron de forma inmediata por detrás en el marcador. Kike Domínguez se marchó de su par en la izquierda y puso un centro pasado al área al que acudió con todo Carlos García. El lateral cabeceó a la red con fortaleza y estableció el 1-0 en el minuto 18.

El dominio del Socuéllamos, lejos de aminorar, se intensificó. En especial para controlar los intentos de llegada de un Móstoles inédito en la primera parte. De hecho, bien pudo anotar el segundo el cuadro local, tras un saque de banda de Carlos García que Jacinto no pudo rematar con limpieza. Con un tiro desde lejos de Kike Domínguez en el que quiso sorprender al meta visitante terminó un periodo inicial de claro color azulón.

Control y sentencia

En la segunda parte, el Socuéllamos salió de nuevo con la lección bien aprendida y se esforzó por controlar el juego para evitar las llegadas fáciles de un Móstoles que empezaba a apostar en diferentes momentos por el juego directo. No les salió tampoco esta estrategia a los madrileños, que fueron poco a poco perdiendo las posiciones y facilitando las opciones de contragolpe.

Era cuestión de tiempo que los de Mario Simón sentenciaran el choque y bien pudo hacer Jesús García tras una acción excepcional de Kike Domínguez. Tras un regate y un servicio excelente del extremo, el mediocentro se entretuvo demasiado y Juancar acabó taponando su remate. Fue en el 77 cuando llegó el 2-0, tras un centro al corazón del área de Carlos García que Morato remató contra su propia portería sin que Aitor pudiera hacer nada por evitarlo.

A partir de entonces, el partido fue poco a poco perdiendo intensidad. Pudo ampliar su renta el Socuéllamos en una acción en la que Chupi estuvo a punto de plantarse ante Aitor, pero no era necesario porque el Móstoles no tenía argumentos para poner en apuros a los azulones. Ahora, los ciudadrealeños esperan que el bombo les sea favorable para encarar el duelo clave por el ascenso.