El Real Madrid y el Manchester City se vuelven a ver en una eliminatoria de Champions League por cuarta vez en las últimas cinco ediciones. Desde 2020, sólo se han quedado sin enfrentarse en un cruce en 2021. Hace cuatro años se midieron en octavos de final, con un paréntesis de seis meses entre la ida y la vuelta por la pandemia. Los blancos fueron eliminados y en el recuerdo quedaron los dos errores que protagonizó Raphaël Varane.

A una semana de los cuartos de final, en los que se vuelven a enfrentar Madrid y City, Varane ha querido explicar lo que ocurrió en aquella vuelta disputada en Inglaterra. En el minuto 9 regaló el balón en el área a Gabriel Jesus para provocar el 1-0 de Sterling y en el 70' hizo una mala cesión a Courtois que interceptó el brasileño para marcar el segundo gol.

En una entrevista a L'Équipe, Varane admite haber sufrido diferentes conmociones cerebrales a lo largo de su carrera: "Si repasamos tres de los peores partidos de mi carrera, hay al menos dos en los que había sufrido una conmoción cerebral unos días antes: contra Alemania en los cuartos de final del Mundial de 2014 y con el Real Madrid ante el Manchester City en los octavos de final de la Champions League 2020", admite.

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Varane, que a sus 30 años juega en el Manchester United y está retirado de la selección francesa, quiere con esta entrevista alertar de las consecuencias en su salud y en su rendimiento que han tenido las conmociones. Pide mayor atención y prevención sobre este peligro para los futbolistas.

"En el Manchester United nos recomendaron no hacer más de 10 cabezazos por entrenamiento... Mi hijo de 7 años juega al fútbol y le aconsejo que no dé cabezazos", explicó el jugador francés.

La tragedia contra el City

Varane se detiene a repasar lo sucedido en aquel partido del Madrid contra el City. El francés cuenta que no estaba recuperado de una conmoción cerebral que sufrió en un partido contra el Getafe, tras sufrir un balonazo en un córner: "Seguí un protocolo de recuperación de cinco días sin mucho esfuerzo. Luego tuvimos unos días libres y recuerdo sentir un cansancio intenso, pero pensé que estaba relacionado con la descompresión habitual de final de temporada. Cuando reanudé el entrenamiento, aún no me había recuperado del cansancio ligado al shock que había sufrido".

"Me sentí sin energía preparándome para el partido contra el Manchester City, pero no era consciente de que tuviera relación con el golpe. Quizás si hubiera hecho una prueba para evaluar mis capacidades de recuperación, habría pospuesto mi recuperación y entonces podría haber vuelto a jugar con un nivel de energía normal", explica.

Varane pelea un balón por alto en el duelo ante el Manchester City EFE

En el partido contra el City notó desde el principio que algo no iba bien: "Lo sentí desde el calentamiento, me dije: despierta. Casi quería darme una bofetada. Durante el partido, mis primeros tres balones fueron técnicamente limpios, pero fue demasiado lento. No podía concentrarme en permanecer en mi partido, era como un espectador. El partido me fue mal y, en retrospectiva, me di cuenta de que estaba relacionado con el shock que había sufrido... Me cuestioné mucho y, finalmente, me di cuenta de que estos errores insólitos no habían caído del cielo".