El vigente campeón de la Euroliga no lo tendrá fácil en su cuarta jornada a pesar de recibir en el WiZink Center al colista de la competición. El Real Madrid llega de ganar a un Baskonia que ofreció pelea hasta el último cuarto, mientras que el Buducnost perdió en Tel Aviv y no conoce la victoria en su regreso a la competición europea 17 años después. Su nivel actual y su fortaleza defensiva serán sus mayores peligros para sorprender al equipo de Pablo Laso. 

Al que todos apodan como la 'cenicienta' de la competición, viene de eliminar al Estrella Roja, un dato que otorga respeto al equipo de Montenegro. Además el equipo serbio derrotó al conjunto blanco la temporada pasada en el WiZink Center, algo que hace estar en alerta al equipo local ante los rivales balcánicos. En la Euroliga todos pueden vencer a cualquiera en cualquier cancha. 

El Real Madrid podrá contar con todos sus hombres, a excepción de Trey Thompkins, que sigue recuperándose de unas molestias que lo tienen apartado desde principio de temporada. Otro que tendrá descanso será Gustavo Ayón, que estará presente en el partido, pero disputará menos minutos de los habituales. Otro que vuelve es Sergio Llull, que ya está totalmente recuperado se sus molestias tras el partido del pasado viernes. 

Tavares coloca un tapón a su rival Lavandeira jr Agencia EFE

La defensa, el mejor arma del Buducnost

El punto fuerte del equipo balcánico es la defensa y de ahí que su intento sea el de enfriar el partido y proponer un ritmo lento, algo que no beneficia al equipo local. En sus tres últimos partidos siguieron el patrón de agotar cada posesión y jugar con tranquilidad, algo que parece que no va a cambiar en el choque de este jueves. Los jugadores a tener en cuenta son Edwin Jackson, exjugador del Estudiantes y Barcelona Lassa y Alen Omic, que vistió los colores del Unicaja. 

Los finales de partido, una tortura para los balcánicos

A pesar de las tres derrotas sufridas en sus tres partidos, el conjunto de Dzikic ha llegado con opciones de poder llevárselo a los últimos minutos. Frente al Maccabi un parcial de 6-20 en el último cuarto y frente al Darussafaka un 18-14 le ha impedido poder estrenar su casillero de victorias en la presente competición.