Montaje de Android entre China y Estados Unidos

Montaje de Android entre China y Estados Unidos Álvarez del Vayo El Androide Libre

Noticias y novedades

La amenaza se cierne sobre Android: así puede dejar Google de ser el sistema operativo líder en los teléfonos móviles

Los grandes cambios geopolíticos actuales podrían afectar al mundo de los smartphones si las empresas chinas empiezan a cambiar su estrategia.

Más información: Huawei sigue apostando por Android, al menos en España: así es el nuevo plan de la compañía fuera de China

Publicada

El mundo entero está viendo cómo las decisiones que se toman en la Casa Blanca están sacudiendo los mercados de valores de todos los países, y España no se queda al margen. Las decisiones de la administración Trump con los aranceles parecen aleatorias, pero no son las únicas que podría tomar.

Hasta hace unas semanas parece que Estados Unidos tenía una guerra abierta contra China, en el plano económico, y que podría escalar mucho más rápido de lo que parece. Ahora parece que hay una ligera disminución de la presión, pero eso no garantiza nada. Los cambios rápidos y erráticos generan incertidumbre, y eso no gusta ni a las empresas ni a los mercados. En el sector de las telecomunicaciones esto se podría llevar por delante las últimas décadas de estabilidad en el sector, especialmente en el de la telefonía móvil.

Desde que Apple presentara el iPhone y Google reaccionara con un cambio de última hora con Android para asemejarlo más al sistema iOS y menos al de Blackberry, estas dos empresas se han repartido el mercado de los sistemas operativos móviles. Las apuestas anteriores, como Symbian, palidecieron, y las posteriores, como Windows Phone, nunca llegaron a coger la tracción suficiente.

18 años estables

Esto hizo que, aunque surgieron propuestas en estas casi dos décadas, hayamos visto cómo Google y Apple han podido avanzar y consolidarse sin rivales, peleando entre sí, pero tampoco de forma descarnada. Apple tenía un sistema operativo propio que no iba a licenciar y Google no iba a entrar en el sector del hardware por la puerta grande, sobre todo para no enfadar a socios como Samsung.

Esto hizo que tanto el gigante coreano como el resto de fabricantes chinos optaran por Android, por poder evitar el desarrollo de una plataforma de software propia y, sobre todo, tener que ganarse el favor de los desarrolladores, que es lo más complicado. A lo largo de este tiempo cada marca ha ido intentando diferenciarse de las demás, pero siempre partiendo de la base de Android.

Pero esto llegó a su fin en el caso de Huawei por culpa del veto que le puso Estados Unidos con la primera administración Trump. Según el gobierno estadounidense el caso de Huawei era particular por sus supuestos lazos con el gobierno chino, y eso hizo que se le prohibiera usar tecnologías de Estados Unidos. De hecho, esas prohibiciones se han aumentado recientemente y ahora Huawei tampoco puede vender ordenadores con Windows.

Huawei vira

Esto supuso un golpe fortísimo para Huawei, que ya peleaba por ser la primera en ventas en mercados como España, donde rivalizaba de tú a tú con Samsung, a cualquier nivel. Pero sin las apps de Google no podría hacerlo, al menos no de la misma manera. Actualmente es posible usar las apps de la empresa de Mountain View de forma sencilla, pero no ha logrado recobrar la confianza de los usuarios.

Así pues, Huawei decidió que no iba a cometer el mismo error otra vez y empezó a desarrollar Harmony OS, un sistema operativo propio que estaba basado originalmente en Android pero que en sus últimas versiones se ha independizado por completo. Esto quiere decir que es posiblemente el tercer sistema operativo móvil más usado del mundo dada su base de clientes en China.

Huawei OS Next es un proyecto a largo plazo, en el que Huawei no quiere depender de Google, sino replicar su modelo. Eso implica que ha creado un sistema de código abierto que cualquier empresa puede usar e implementar como propio, con lo que eso supone en ahorro de costes de desarrollo y de compatibilidad con aplicaciones.

Xiaomi, OPPO, VIVO...

Si Estados Unidos siguiera aumentando la presión sobre China no sería extraño que lo hiciera también sobre empresas que no operan directamente sobre suelo estadounidense simplemente para hacer que el gobierno chino tuviera que sentarse a negociar. Cosas más raras hemos visto en las últimas semanas. Y el problema es que el gobierno chino quizás esté ya planteándose ese escenario e incentivando a sus empresas a depender menos de tecnologías extranjeras.

Si la negociación no es una opción para la administración de Xi Jinping en los términos que los Estados Unidos quieren, eso podría implicar que marcas como Xiaomi y OPPO, entre otras, tuvieran que dejar Android de lado. Esto sería catastrófico fuera de las fronteras chinas, pero dentro de su país el uso de las apps y servicios de Google están prohibidos, por lo que no habría un gran cambio.

OpenHarmony

Si eso sucediera sería una oportunidad de oro para OpenHarmony, la versión de código abierto creada por Huawei y actualmente desarrollada en colaboración con otras empresas, como hace Google con Android AOSP. Si todos los grandes jugadores chinos se unieran para usar el mismo sistema operativo, sería cuestión de tiempo que lograran tener una masa crítica lo suficientemente potente como para dar el salto fuera de China. De hecho, Xiaomi ya tiene una app desarrollada para este sistema operativo.

Esto no quiere decir que entraran en Estados Unidos, pero sí en el sudeste asiático, quizás Corea del Sur y Japón (con los que sorprendentemente ahora está cerrando acuerdos) y, por supuesto, en África, Latinoamérica y Europa. Crear un ecosistema así sería un golpe brutal para Android, que se quedaría mayormente en marcas como Samsung, Google y quizás Nothing y otras firmas menores.

El coche eléctrico

Esto también supondría un cambio enorme en otro sector que está en pleno auge, el del coche eléctrico. Actualmente el desarrollo de software es uno de los mayores problemas a los que se enfrentan las marcas occidentales, con la excepción de Tesla. Google tiene en Android Automotive una buena opción, pero en China no están en la misma posición.

El software de muchas de sus marcas está a la altura si no por delante, con propuestas como la de la propia Huawei, que tiene acuerdos con diversos fabricantes para proporcionar su sistema de conducción autónoma, entretenimiento y demás a sus vehículos. Y ahí también se ejecuta HarmonyOS.

Android Automotive en el Polestar 2

Android Automotive en el Polestar 2 Polestar El Androide Libre

Por ahora no hay nada que nos haga pensar que Donald Trump va a acometer ataques económicos contra China que afecten a las empresas de electrónica, pero dada la velocidad a la que se suceden los acontecimientos y la intensidad de la escalada, no es algo que se pueda descartar ni mucho menos. China lo sabe y seguro que ya está estudiando esos escenarios, dado que el gobierno asiático se caracteriza por mirar a décadas vista, no a meses vista.