Image: Marco Antonio de la Ossa: La guerra civil truncó la carrera de muchos músicos

Image: Marco Antonio de la Ossa: "La guerra civil truncó la carrera de muchos músicos"

Letras

Marco Antonio de la Ossa: "La guerra civil truncó la carrera de muchos músicos"

La Universidad de Castilla-La Mancha publica un exhaustivo estudio sobre los ritmos, cultos y populares, de la contienda

19 septiembre, 2011 02:00

Hace dos años el profesor Marco Antonio de la Ossa (Cuenca, 1978) ganaba el premio de Musicología 2009 por su tesis doctoral La música en la guerra civil española, que ahora acaba de editar para el gran público la Universidad de Castilla-La Mancha. Se trata de uno de los más completos y exhaustivos trabajos sobre la banda sonora de la contienda, donde contrasta el silencio que atenazó a su vertiente culta y compositiva y la contraposición con el fervor con que la música popular, los famosos Cancioneros, fue adoptada multitudinariamente y usada como arma esencial de propaganda, desde la retaguardia al frente.

P.- En su libro explica cómo la Guerra fue también un drama para la música y para los músicos, cómo mermó la producción e incluso llevó a la muerte a algunos de ellos. ¿Desaparece la música culta de escena durante el conflicto?

R.- La verdad es que no, especialmente en el caso del bando republicano donde de hecho fue potenciada. Se constituyó, por ejemplo, la Orquesta Nacional de Música, que desarrolló numerosos programas musicales en Madrid, Valencia y en el Liceo de Barcelona. Pero si bien se gastó mucho dinero en política musical, lo cierto es la mayor parte de los compositores de uno u otro bando entraron en una suerte de "silencio compositivo". Y es que sí atendemos a los catálogos previos de estos autores y observamos su actividad creativa durante el conflicto, detectamos un innegable parón.

P.- ¿Qué autores más significativos asumen tal "silencio compositivo"?

R.- Pues es el caso, por ejemplo, de Gustavo Durán, en el lado republicano, quien si implicó sobre todo en la actividad política en una peripecia completamente novelesca, o Manuel de Falla, en el nacional, quién se mantuvo en silencio sólo roto por algún que otro himno. Pero a todos, en general, según demuestran sus resultados, no les apeteció mucho componer durante la contienda. Y a muchos de ellos, En España o en el exilio, tampoco después, la guerra truncó sus carreras.

P.- ¿Cuál fue el grado de implicación política de los músicos españoles en las actividades de los dos bandos contendientes?

R.- Una gran parte de los autores ya se había implicado en el periodo republicano anterior, la mayoría en la política musical de los diferentes gobiernos, sobre todo los músicos más cercanos a los movimientos de vanguardia. Pero no es exacto el paralelismo que establecen algunos estudios entre música de vanguardia / bando republicano y música más clásica / bando nacional, división que niega por ejemplo Manuel de Falla, afín a los nacionales pero de cuyas fuentes bebieron muchos músicos de vanguardia y estirpe republicana. Hubo casos también, tal que el de los hermanos Machado en literatura, de división fratricida entre músicos, como el de los hermanos Halffter.

P.- A diferencia de la música culta, la música popular, a la que dedica la segunda parte de su libro, los famosos cancioneros, sí centró las atenciones de ambos bandos...

R.- Claro, los géneros populares resultaban mucho más sencillos y directos de usar para la propaganda bélica. Para ello reciclaron, especialmente los republicanos, canciones de cariz popular ya existentes, como por ejemplo las de Federico García Lorca. Se mantenía la melodía y se variaba la letra, lo que lo hacía todo mucho más rápido. También se propició masivamente la composición de himnos con concursos de todo tipo. La gente, tanto en el frente como en retaguardia, las aprendía muy rápidamente, por lo que se convirtieron en un instrumento de propaganda de primer orden.

P.- ¿Y cuál es la importancia histórica y cultural que dan hoy los estudiosos al Cancionero popular español que emana de la Guerra Civil?

R.- Además del valor artístico, porque entre tanta propaganda encontramos también momentos de gran belleza, el Cancionero sirve como documento de la época de excepcional valor testimonial: situaciones, momentos de vida y sufrimiento, personajes, el hambre, los miedos, la vida de las mujeres...