Vivir para ver. Ver para creer. Con Rafa Nadal prácticamente en la ducha aquejado de una lesión abdominal, con todo en contra, sin poder sacar en condiciones, sin poder competir al 100%, con su padre desde la grada haciéndole gestos para que se retirara… Rafa Nadal ha vuelto a tirar de pundonor para lograr una victoria épica.
Dolía ver a un Rafa Nadal encogido, incapaz de conectar un golpe de servicio a cierta velocidad. Era encomiable ver el esfuerzo del mallorquín intentando encontrar soluciones para conseguir acabar su partido, sin poder sacar, y posiblemente con dolor también en algunos gestos de derecha. Pero todo ese dolor se torna en absoluta incredulidad después de ver cómo ha solventado su partido.
Dudo que nadie más se hubiese expuesto a lo que se ha expuesto hoy Rafa Nadal: exponerse a lesionarse de más gravedad, exponerse a perder sin poder competir en condiciones. Máximo respeto por el deporte. Máximo respeto por la competición. Máximo respeto por el público. Máximo respeto por sí mismo.
Después de ser testigo de algo tan excepcional, sabe a poco esta profundización en la lesión muscular abdominal, pero allá va.
Y es que la lesión muscular aguda en el recto abdominal, sin ser una lesión muy grave ni peligrosa, sí que es extremadamente limitante para la práctica del tenis. Llevamos desde el principio del torneo viendo a Nadal con un vendaje en forma de cruz en su recto abdominal derecho. Un vendaje realizado con kinesio tape, una venda elástica adhesiva, utilizada en su caso para ofrecer algo de soporte a ese músculo.
Eso nos demuestra que Nadal lleva sufriendo molestias en esa zona desde que empezara a competir en Wimbledon. Pero ¿qué es una lesión muscular, y por qué se produce en el recto abdominal en los tenistas?
Los músculos tienen diferentes tipos de contracción. Isométrica, cuando se contrae sin que sus extremos insercionales se muevan. Concéntrica, cuando sus extremos se acercan durante la contracción. Y excéntrica, cuando al músculo se le exige contracción mientras está en estiramiento.
Nadal, durante el partido de cuartos de final de Wimbledon. REUTERS
Si pensamos en la biomecánica del saque de un tenista, después del lanzamiento se produce una posición de extensión y rotación de tronco (con el músculo recto abdominal en elongación), a partir de la cual se produce una contracción agresiva, flexionando el tronco y forzando una contracción excéntrica del recto abdominal contralateral al hombro dominante (Nadal es zurdo, por lo que es su recto abdominal derecho el que más trabaja en la biomecánica del saque).
En ocasiones, ya sea por un aumento en el volumen de trabajo muscular (realizar más saques), o por un cambio en la biomecánica que genere más aceleración (sacar más rápido, activando más la musculatura abdominal), la cantidad de carga es mayor que la tolerancia muscular, y se produce un daño en el tejido.
Este daño muscular puede categorizarse de diferentes maneras, en base a su gravedad. Hablaremos de una distensión muscular si ha habido daño en el tejido pero sin discontinuidad de las fibras. Es decir, el músculo se elonga por encima de su tolerancia pero no llega a romperse. Se produce una reacción inflamatoria, el músculo es doloroso a la contracción activa, tolera menos carga (se puede sacar menos veces, o más despacio), pero aún puede ser bastante funcional.
Si se da discontinuidad en las fibras musculares, estamos entonces hablando de una lesión muscular aguda, de diferente gravedad en función, entre otras cosas, de cuántos centímetros de músculo se vean afectados. En este caso, la incapacidad funcional aumenta, haciendo dolorosa la práctica deportiva, especialmente los gestos en los que más participe el músculo afectado.
Desconocemos la gravedad de la lesión muscular de Rafa Nadal, pero las limitaciones mostradas en su juego durante el partido de cuartos de final contra Fritz no auguran nada bueno. El período normal de recuperación de una lesión muscular son aproximadamente tres semanas hasta que el músculo puede volver a un entrenamiento normal, tiempo a partir del cual conviene retomar poco a poco los gestos biomecánicos más lesivos.
Rafa Nadal. Ver para creer.
*** Blanca Bernal es fisioterapeuta, trabajó varios años para la WTA y el World Padel Tour, y la actualidad lo hace en su clínica Mobility.
