Novak Djokovic, que fue deportado de Australia en enero por no estar vacunado contra la Covid, dijo este martes que estaría dispuesto a sacrificar su participación en grandes torneos antes que ser obligado a vacunarse. Sin embargo, las consecuencias para el serbio podrían ser aún peores y afectar de lleno a su legado histórico.

Dos beneficiados directos puede dejar la decisión de Djokovic de no vacunarse: Rafa Nadal y Daniil Medvedev. El calendario del tenista serbia se verá reducido por el veto en aquellos países/torneos que exigen la pauta completa de vacunación, que no son pocos. La primera puerta que se le cierra es el Masters 1.000 de Indian Wells, aunque para entonces ya podría haber perdido su número 1.

Difícilmente vaya a tener Medvedev una mejor opción que la que se le presenta en las próximas semanas de alcanzar el top del ranking ATP. Djokovic cumple esta semana un total de 360 al frente de la clasificación y aventaja al tenista ruso en 1.240 puntos. Daniil desaprovechó una oportunidad de oro al perder en la final del Abierto de Australia, pero el próximo 21 de febrero se le pondrá otra vez a tiro al restarle a Nole, precisamente, los 2.000 puntos que sumó el año pasado en el Grand Slam celebrado en Melbourne.

Si Medvedev quiere ser número 1 antes de que acabe el mes, lo que tiene que hacer es ganar el siguiente torneo en el que está inscrito: ATP 500 de Acapulco. Se celebra del 21 al 26 de febrero, fechas que coincidrán con el torneo en el que reaparecerá un Djokovic que lleva sin jugar desde comienzos de diciembre. Nole regresará en el ATP 500 de Dubai, aunque su victoria en el campeonato no evitaría el sorpasso de Medvedev si este se lleva el título en México.

Daniil Medvedev, durante el Open de Australia 2022 Reuters

Lo que tiene que hacer Medvedev en Acapulco es, como mínimo, igualar el resultado de Djokovic. Si lo consigue, será número 1. De no hacerlo, tendrá que calcular sus opciones en un calendario en el que contará una obvia ventaja contra un Nole que lo tiene complicado en los primeros Masters 1.000 -el segundo escalafón de torneos ATP- del año.

Quizás a estas alturas, a Djokovic ya no le preocupe tanto el número 1. Nadie en la historia lo ha sido más semanas que él y, por ahora, la cuenta va 360 semanas. De lo que se despediría sería de su intento de dar caza a Roger Federer como jugador con más semanas consecutivas siendo número 1 de la ATP (237), aunque el serbio todavía se encuentra bastante lejos sumando, de momento, 82 semanas seguidas en su actual 'mandato'.

Lo que sí le dolerá más a Djokovic será perderse más Grand Slam, tal y como le ocurrió en Australia. Novak ya perdonó en la final de la edición de 2021 del US Open, pero aquel día pudo conquistar su 21 Grand Slam y desempatar con Federer y Nadal en el ranking masculino. No lo hizo, pero aún así se mantenía como el favorito para lograrlo por su línea de rendimiento y un físico menos castigado que el de sus rivales.

Lo ocurrido en Australia sacó a Djokovic de la batalla y eso lo aprovechó Nadal para, contra todo pronóstico, lograr su segunda corona en Australia. El tenista español se convirtió en el mejor tenista de la historia y dejó atrás a Nole, lo cual hizo que incluso hubiera rumores de que se vacunaría para así no perderse más Grand Slam.

Detrás de los 21 de Nadal

Pero Djokovic va hasta el final con sus principios y habrá que ver cómo evoluciona la pandemia y si se encontrará alguna barrera en alguno de los tres 'grandes' que quedan de 2022. De momento, el serbio puede tener ciertas esperanzas para Roland Garros o Wimbledon. Otra cosa será con el rodaje que pueda llegar en comparación a sus grandes rivales, entre ellos Nadal.

Francia tiene previsto aprobar una modificación en los requisitos de entrada al país que contempla la no vacunación si se ha pasado la Covid en los seis meses anteriores. El 'grande' de París arranca el 22 de mayo, por lo que Novak llegaría con casi un mes de margen tras dar positivo el 16 de diciembre.

Djokovic, campeón de Roland Garros 2021 Reuters

En cuanto a Wimbledon, ocurrió algo parecido que beneficia a Djokovic. El pasado 11 de febrero se retocaron las medidas de entrada al Reino Unido, informando Grant Shapps, Secretario de Estado de Transportes del país, que aquellas personas que no estén vacunadas podrán entrar al país realizándose un test antes del vuelo. Luego, una vez pongan pie en territorio británico, solo deben completar un formulario de localización y hacerse una PCR a los dos días.

El que queda es el US Open, que no podrá jugar si la situación se mantiene como está ahora. La política de Estados Unidos es estricta y no se permite entrar en el país a nadie que no esté vacunado. Para Nole significa eso que no podrá jugar la gira de pista dura de marzo ni el último Grand Slam del año, del que ha sido campeón tres veces y finalista en 2021. Lo positivo para él es que se juega del 29 de agosto al 11 de septiembre y, para entonces, la evolución de la pandemia podría ser más favorable para su condición.

[Más información: El calendario que le queda a Djokovic sin vacunarse: el 'sacrificio' de los Grand Slam y adiós al número 1]

Noticias relacionadas