El golf español se frota los ojos: Sergio García, líder del Masters y Jon Rahm, sexto

El castellonense realizó una jornada extraordinaria de tee a green para colocarse en lo más alto de la clasificación, mientras que el vasco hizo 17 hoyos perfectos en un día donde el viento fue un problema.

7 abril, 2017 22:31

Mario Díaz @MDiazCamacho

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Pensar en la Chaqueta Verde está muy lejos aún, lejísimos. Soñar con ella... No siempre hay motivos, pero cuando los hay mejor dejarse llevar, disfrutar del momento, dar rienda suelta a la imaginación y paladear la que sería primera victoria española en un grande en el siglo XXI. Mucho que imaginar en realidad, aunque ganas no faltan, ni tampoco motivos, porque tanto Sergio García como Jon Rahm dan alas a nuestra imaginación.

Sergio García, líder junto a Charley Hoffman, Thomas Pieters y Rickie Fowler, fue todo concentración, todo fluidez. De tee a green, especialmente certero en los segundos golpes, especialmente acertado con el putt. De hecho, en sus 19 participaciones en Augusta -71 grandes seguidos ha disputado hasta la fecha- nunca había comenzado una segunda ronda con tres birdies consecutivos. Y qué tres birdies.

De repente, de la nada, el castellonense era líder en todos los tableros. Si bien William McGirt se desinfló un poquito, Charley Hoffman se desinfló bastante, abriendo la puerta a todo. Incluso con el viento jugando una mala pasada detrás de otra, Sergio García respondió al bogey del 4 con un birdie en el 9, a los errores del 10 y el 13 con aciertos en el 15 y el 17.

Y eso que el de Borriol se fue a la casa club con un golpe de más. Su tirazo a green en el 18 no encontró premio. "Simplemente leímos mal el green", dijo al final de su vuelta. Y tanto, porque era un putt corto y asequible que giró en la última vuelta para dejarle con un menos cuatro total (69 golpes en el día) que, en ningún caso, quedó empañado: "No pienso preocuparme por ello. He jugado bien, he pateado bien...".

García no quiere lastres en su cabeza, ni mucho menos elucubraciones. El domingo Severiano Ballesteros habría cumplido 60 años y los yanquis ya hablan de un 'ambiente cósmico'. ¿Qué significaría para ti? "No quiero ponerme en esa situación. No quiero ponerme sensible, porque hay que jugar de la forma correcta, aunque sería un bendito problema", bromeó ante los micrófonos de la organización.

Jon Rahm, junto a Rory McIlroy, durante la segunda jornada del Masters. Efe

En cualquier caso, no es el único que tiene ganas de risas. La entrevista con Jon Rahm (-1 en el total, 70 golpes en el día y sexto clasificado a sólo tres golpes del cuarteto de líderes) fue más corta, pero al vasco le dio tiempo de sobra para repasar su carrera. De hecho, la velocidad con la que suceden las cosas podría darle algo de vértigo. Podría... "Estoy tremendamente satisfecho. Ayer no terminé como me hubiera gustado (bogey al 17, boguey al 18), no jugué como sé, pero hoy sí".

El de Barrika se refería a sus cuatro birdies y 13 pares en la segunda jornada con un sólo borrón. "El fallo del 10 son cosas que pasan, pero hoy he jugado 17 hoyos muy buenos", afirmó. Tan buenos que amenaza con sorpresas, quien sabe quizá si incluso con una victoria soñada. La suya o la de Sergio García, que a nosotros casi nos da igual porque por ahora ya se han encargado de dar alas a nuestra imaginación.