Simone Inzaghi
Un Inter en crisis, pero con una construcción ejemplar: el Barça mide el alcance del proyecto de Simone Inzaghi
El conjunto neroazzurro llega a Montjuïc para la ida de las semifinales de la Champions League en una racha de tres derrotas seguidas.
Más información: Lamine Yamal, listo para ser centenario con el Barça: "El miedo lo dejé en el parque de Mataró hace tiempo"
El Inter de Milán llega a las semifinales de la Champions League en uno de sus peores momentos de la temporada: tres derrotas seguidas, algo que no sucedía desde 2017. Sin embargo, tras la aparente crisis, subsiste un equipo muy trabajado que encara el duelo definitivo ante el FC Barcelona.
Aunque los tropiezos recientes en la liga —los 'pinchazos' contra el Bolonia (1-0) y la Roma (0-1)— y el abultado 0-3 frente al Milan en la semifinal de la Coppa Italia pueden despistar, la realidad es que el proyecto del club lombardo está asentado. Fueron cuartos en la fase liga de Champions, luego eliminaron al Feyenoord y al Bayern de Múnich, y todavía mantienen invicto su recorrido continental.
Si hoy se valora el equipo de Hansi Flick en Barcelona, la construcción azulgrana merece elogios. Pero la del Inter, guiada por Giuseppe Marotta, no le va a la zaga: su plantilla ha incrementado su valor en +253 millones de euros desde el debut de sus integrantes en la primera plantilla, con piezas clave como Lautaro Martínez, Nicolò Barella o Alessandro Bastoni como parte de un plan colectivo que se ha desarrollado de forma ejemplar.
El éxito de la reconstrucción se cimenta en la filosofía de Marotta: inversión muy medida y un crecimento óptimo. Marotta ha sabido aunar el hambre de jóvenes promesas con la experiencia de veteranos curtidos, devolviendo al club su identidad. Ese 'sello Marotta' se refleja en cada refuerzo que encaja perfectamente en el sistema.
El segundo pilar de esta transformación es el propio Simone Inzaghi, que aterrizó en el banquillo en el verano de 2021. Casi cuatro años después, su dirección no solo ha devuelto al Inter al protagonismo italiano, sino que ejemplifica cómo trazar una estrategia deportiva sólida y coherente.
En el mercado, el Inter no teme tomar decisiones drásticas: vende cuando considera que un ciclo concluye o llega una oferta irrechazable, busca jugadores que encajen táctica y mentalmente, y persigue rendimiento inmediato. Además, rastrea constantemente oportunidades a coste cero o gangas en el mercado, lo que permite reforzar el plantel sin desestabilizar las cuentas.
Un ejemplo es el guardameta Yann Sommer, fichado por 7 millones tras la venta de Onana por 50, o el trío defensivo (Bastoni, Francesco Acerbi y Benjamin Pavard) por menos de 70 millones. Rápidos, polivalentes y letales al romper líneas, forman una zaga de primer nivel. En los carriles, Federico Dimarco y Matteo Darmian costaron menos de 10 millones juntos y cumplen a la perfección las instrucciones de Inzaghi.
Lautaro Martínez, en el césped del estadio de Montjuïc EFE
El centro del campo luce con la calidad de Barella, Hakan Çalhanoğlu y Henrikh Mkhitaryan. Los dos últimos llegaron libres y, bajo las órdenes de Inzaghi, han aportado un rendimiento inesperado. En ataque, la ’dupla’ Lautaro-Marcus Thuram —25 millones por el argentino y gratis el francés— se ha convertido en una de las más letales de Europa.
A un paso de la final y con la ambición renovada tras perder la gran cita de 2023 ante el Manchester City, el Inter vuelve a imponer respeto. Marotta y Inzaghi han resucitado a un club que parecía atrapado en la sombra de la Juventus, reencontrando la identidad perdida con fichajes de largo plazo, apuestas asequibles y veteranos que aportan temple.
Choque generacional
El ‘Dream Teen’ del Barça, por su juventud, se enfrenta al veterano Inter de Milán El equipo azulgrana, con una edad media de 23,7 años, es el cuarto más joven del torneo, mientras que el Inter presenta una media de 26,9 años, aunque su once titular habitual roza los 30 años. Esta diferencia refleja un choque generacional entre la frescura azulgrana y la experiencia neroazzurra.
El equipo dirigido por Hansi Flick ha alineado formaciones con una media de 25,28 años en Champions, destacando por la presencia de jóvenes como Lamine Yamal (17 años) y Pau Cubarsí (18), además de otros veinteañeros como Pedri y el lesionado Balde. Sin embargo, la veteranía de jugadores como Szczesny (35), Iñigo Martínez (33) y Lewandowski (36) equilibra la juventud del plantel.
Por su parte, el Inter de Simone Inzaghi cuenta con un bloque muy experimentado. Mkhitaryan, de 36 años, Acerbi (37), Sommer (36) y Darmian (35) forman parte de una plantilla con varios jugadores por encima de los 30. Bastoni, con 26 años, es el más joven del once tipo. Junto a veteranos, también destacan futbolistas en su mejor momento como Lautaro Martínez, Barella o Dimarco, todos entre los 27 y 29 años.
A pesar de su buen rendimiento y de estar invicto en Champions, el Inter llega desgastado por la alta carga de partidos, algo que podría afectar su rendimiento frente al Barça. El equipo lombardo ha oscilado entre alineaciones de 28,3 a 30,8 años de media, demostrando experiencia, pero también el paso del tiempo en su estructura.
En vísperas del choque con el 'Dream Teen' del Barça, el Inter demuestra que, a pesar de su crisis de resultados, su construcción es un modelo de planificación y ejecución. El sistema funciona, el proyecto es sólido y, sin duda, este equipo teñido de azul y negro pondrá a prueba la ambición y el talento de los de Flick.
