Así se escuchará, por fin, a los árbitros y al VAR en España: no será en directo y sigue el ejemplo de Italia

"Es un momento histórico". Así presentó Luis Medina Cantalejo, presidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), la novedad que pretende cambiar el fútbol español tal y como hasta ahora se conocía. Desde el 10 de enero de 2024, las conversaciones entre el árbitro de campo y el árbitro de VAR serán públicas. 

Esta medida era demandada por prácticamente todos los actores del fútbol nacional. Las dudas estaban en el sector arbitral, donde algunos creen que propuestas así solo les exponen más. La RFEF y LaLiga, en su comunicado conjunto, aseguran que esto nace "con el objetivo de dotar al arbitraje en el fútbol profesional y a las propias competiciones de una mayor transparencia".

Aún así, hay muchos matices en torno a la manera en la que se escucharán las conversaciones árbitro-VAR que marcan la medida como tal. Lo más importante de todo es que los audios y las imágenes procedentes de la sala VOR no se emitirán en directo durante las jugadas. 

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El audio se activará en el momento en el que se produzca una revisión de jugada en el monitor situado a pie de campo. Se escuchará a partir de que el VAR llame al árbitro y le transmita por qué le llama. Al colegiado se le oirá dar sus explicaciones acerca de la decisión tomada y si la revoca o no.

Como no se escuchará todo esto en directo, todo el material se entregará a los operadores oficiales de la competición y serán estos quienes lo ofrezcan al público. Según lo explicado, las televisiones con derechos compartirán el audio y las imágenes una vez finalizado cada día de competición de la jornada. 

Medina Cantalejo explicó que hay que "empezar a dar pasos hacia adelante". "Y uno de ellos es exponer en público las grabaciones del momento de las revisiones en el monitor en cada partido. Una jornada tendrá 5, otra jornada tendrá 2... Será una buena señal cuantas menos haya. Todo el público podrá ver una conversación entre el árbitro de campo y el árbitro de VAR, qué protocolo se sigue y cómo se toma la decisión final por parte del árbitro de campo".

Esta novedad no supondrá cambios en el VAR a nivel de material o instalaciones, pero sí variará la manera de comunicarse de los propios árbitros. Es de esperar que adopten un lenguaje más formal cuando se abra el diálogo respecto a la libertad con la que podían comunicarse entre sí sin que les escucharan desde fuera.

El ejemplo de la Serie A

España sigue el ejemplo de Italia, que desde comienzos de temporada también se enseñan las conversaciones entre el árbitro de campo y el árbitro de VAR en la Serie A. Igual que pasará en nuestro fútbol desde la próxima Supercopa de España y la jornada 20 de Liga, se muestran los audios e imágenes cuando una jugada ha de ser revisada en el monitor a pie de campo.

El material se entrega igualmente a los operadores oficiales. Uno de ellos, DAZN Italia, tomó la iniciativa de desarrollar cada jornada un espacio llamado OPEN VAR en el que analizan las jugadas polémicas respaldándolas con las conversaciones árbitro-VAR. Lo que ha sorprendido a los aficionados es el lenguaje técnico que muchas veces utilizan, especialmente el árbitro VAR, y hasta ahora el resultado de esta medida ha sido positivo.

"Todo OK, José Luis"

Aún así, es difícil imaginar que esto acabe con las polémicas. Es más, en España quedó enterrada hasta ahora la idea de abrir al público las conversaciones entre los árbitros y el VAR tras la polémica ocurrida por el famoso "Todo OK, José Luis". Ocurrió en enero de 2019, durante un partido en el Santiago Bernabéu que enfrentó a Real Madrid y Real Sociedad.

Vinicius cayó en el área fruto de una estirada en el suelo de Rulli, portero realista, y el brasileño reclamó penalti. El árbitro, José Luis Munuera Montero, no señaló la pena máxima, pero la acción parecía clara como para que se rectificara desde el VAR. Allí se encontraba Melero López, que dejó seguir el juego. Días después se publicó el audio de la conversación y lo que se escuchó desde el VAR -"Todo OK, José Luis"- provocó una marea de críticas hacia el sistema de videoarbitraje y el papel de los colegiados.

En otros países tampoco se salvan de la polémica. En Inglaterra llevan también tiempo experimentando con publicar las conversaciones entre árbitros y la sala del VAR. Esta temporada, durante un Liverpool - Tottenham se armó el lío tras anular por fuera de juego un gol de Luis Díaz que era legal. Fue fruto de un malentendido por el pinganillo, como se comprobó tras salir a la luz el diálogo.

Desde el VAR dijeron "está bien, perfecto", lo cual el árbitro de campo tomó como que habían acertado al señalar la posición ilegal. Jürgen Klopp, entrenador red, estallaría hasta el punto de pedir que se repitiera el partido.

Árbitros en rugby y otros deportes

El fútbol también llega tarde a esto de exponer la figura del árbitro si se compara con otros deportes. El rugby, desde hace más de una década, es el mejor ejemplo en estos casos. En este deporte, la figura del colegiado se ve con otros ojos: solo los capitanes pueden hablar con él y, además, se les trata de 'usted'. También están invitados al tradicional 'tercer tiempo' que une en un gesto deportivo a los jugadores y cuerpos técnicos de un equipo y otro tras medirse en el campo.

Más allá de eso, en el rugby es costumbre la publicación en directo de los audios y las imágenes de las jugadas que están siendo revisadas por los árbitros. Estos van microfonados y se escucha, incluso, el diálogo entre asistentes y linieres.

En más deportes a nivel mundial se ve normal escuchar a los árbitros en los partidos. En Estados Unidos, reyes del espectáculo, ocurre ya en todas sus principales ligas (NBA, NFL, MLB y NHL).

El episodio más polémico en el deporte americano ocurrió en un partido de hockey sobre hielo de la NFL. El árbitro Tim Peel fue sancionado de por vida por algo que dijo durante un partido estando microfonado. En 2021, en un partido entre Nashville Predators y Detroit Red Wings, pitó un penalti y seguidamente dijo: "No ha sido gran cosa, pero quería señalar pronto una puta falta contra Nashville". En ese momento se acabó su carrera arbitral en la gran liga de hockey.

La ACB también marca el camino

En España, el fútbol también ha tenido ejemplos. El más cercano, por ser el otro deporte de equipo más popular en el país, es el de la Liga Endesa de baloncesto. Los árbitros tienen un papel muy diferente y desde hace tiempo conviven con el uso de micrófonos y otras tecnologías que les acercan a los aficionados.

Principalmente, sus conversaciones se escuchan cuando acudan a revisar las jugadas en las pantallas de repetición. El micrófono está abierto y así el aficionado puede entender qué están discutiendo y cómo llegan a su decisión final. Se escucha por televisión y por la misma megafonía del pabellón. 

Los propios árbitros de la ACB se han mostrado más abiertos a este tipo de exposición. Se ve normal que participen hablando con la prensa en el comienzo de la temporada y también se han visto propuestas más extravagantes, como la vez en enero de 2021 en la que el árbitro Fernando Calatrava estuvo microfonado durante un BAXI Manresa - Barça. Aquella especie de prueba se hizo viral, pero no se volvió a repetir.

El VAR... de Mediapro

Ahora le llega el turno al fútbol nacional, el escenario donde lo mediático y lo polémico está a la orden del día. Habrá que ver cómo se adaptan los distintos agentes partícipes en esto: árbitros, operadores oficiales y hasta los aficionados.

El anuncio de la RFEF y LaLiga sobre las conversaciones que serán publicadas también llega en un momento áspero. Hace solo unos días, se supo que a Mediapro se le concedió el servicio de asistencia al arbitraje mediante vídeo hasta 2028. Mediapro también se encarga de la gestión de derechos deportivos y en la comercialización internacional de LaLiga.

Pero el problema está en el conflicto de intereses que hay con un club de Primera División, el FC Barcelona. El CEO del grupo audiovisual es Tatxo Benet que, a la vez, es miembro del consejo de administración de la filial de Barça Studios. El VAR está en el punto de mira por un posible 'caso Negreira 2.0'.