Montse Tomé, en un entrenamiento de la Selección

Montse Tomé, en un entrenamiento de la Selección EFE

Fútbol

Montse Tomé, en el punto de mira por más que un error inexplicable: lo que tiene que cambiar España

La seleccionadora, señalada por una escena con Aitana Bonmatí sin resolver, está en la picota para la pelea por la Nations League y el billete a París 2024.

3 diciembre, 2023 02:15

España cumplió con su objetivo de meterse en la Final Four de la Nations League. En febrero, a partir del día 21, la Selección volverá a jugar las semifinales de un torneo continental y, además, peleará por obtener el billete para los Juegos Olímpicos de París 2024. El equipo está en la situación que quería estar, pero algunos de los acontecimientos más recientes -y no tienen que ver con el 'caso Rubiales'- arrojan importantes dudas sobre la campeona del mundo.

El foco se pone Montse Tomé. La seleccionadora sustituyó en el cargo a Jorge Vilda -de quien fuera su asistente- y, tras sobrevivir a su primera crisis en el vestuario tras dar su primera lista, vuelve a estar en el foco. El principal motivo es el nuevo capítulo bochornoso en el que se ha visto envuelta la Selección, pero desde el plano deportivo hay también cosas que analizar.

España perdió este viernes contra Italia, concediendo así su primera derrota desde que ganara el Mundial, pero lo peor fue el cómo. Tras ir ganando 1-0 en la primera mitad, un error inexplicable provocó que el equipo saltara a la segunda mitad con una jugadora menos y hasta que fueron 11, pasados dos minutos, la Azzurra metió el gol del empate. El fallo noqueó a la Selección, que encajaría el 1-2 y el 1-3 más tarde y solo logró maquillar el marcador con un tanto de Esther González hacia el final.

[La reacción de Athenea al conocer que la Selección arrancó la segunda parte con una jugadora menos]

Es la última chapuza de la Selección. Y decimos última porque todavía está muy reciente lo que ocurrió en el anterior partido de la Nations League, en Zúrich, ante Suiza, cuando Irene Paredes no pudo formar parte del once titular por un error -que jamás se aclaró si fue humano o no- al incluirla en la convocatoria desde la aplicación oficial de la UEFA.

Este viernes, lo que ocurrió es que Tomé decidió en el descanso cambiar a Athenea del Castillo -que metió el 1-0- por Lucía García pero también Aitana Bonmatí se quedó en el vestuario. Quien sustituyó a la flamante Balón de Oro fue Esther, pero no lo hizo hasta pasados unos minutos de la segunda parte. Es decir, España jugó un tiempo con diez jugadoras y en esas llegó el empate de Italia.

Incidente entre Tomé y Aitana

Se trató de una situación que no va acorde a la profesionalidad que se le exige a un equipo campeón del mundo. Además, cuando los protagonistas explicaron lo ocurrido hubo un cruce de versiones que lo empaña todo aún más. "Hicimos el cambio de Athenea por Lucía y cuando íbamos a entrar en la segunda parte Aitana nos avisa de que no está bien y no nos da tiempo a que [Esther] pueda calentar y por eso iniciamos la segunda parte con una jugadora menos. El cambio de Lucía por Athenea estaba planeado, lo íbamos a hacer", dijo Tomé responsabilizando, en parte, a Aitana.

Pero una de las jugadoras, Athenea, que se enteró de la situación cuando hablaba ante los medios tras el partido, desmintió sin querer a la seleccionadora: "Son cosas que lógicamente no se pueden repetir. Ha sido un error de todo el mundo y yo me acabo de enterar. Los cambios los ha dicho [Montse Tomé] nada más empezar casi la charla. Habrá sido un error de cálculos porque nosotras sabíamos que nos quedábamos en el banquillo", dijo.

Aitana Bonmatí, contra Italia

Aitana Bonmatí, contra Italia Europa Press

Según COPE, el caos se generó tras una discusión entre Tomé y Aitana Bonmatí tras exigirle más la seleccionadora a su jugadora. La reacción de la futbolista del Barça había sido pedir no salir tras el descanso y, por eso, Montse mandó la entrada de Esther sin calentar.

Oficialmente, queda sin resolver si el cambio de Aitana estaba decidido desde el inicio del descanso o, en cambio, y como defiende Tomé -coincidiendo parcialmente con la información de COPE-, fue un imprevisto de última hora que dejó al banquillo sin margen de maniobra.

Caída deportiva del equipo

Pero hay más situaciones, ya deportivas, que exigen un profundo análisis en los próximos 80 días, que es el tiempo que tendrá España hasta la vital Final Four de la Nations League. Antes, el próximo martes, jugará contra Suecia un partido sin emoción ya, pero clave para ver si la Selección es capaz de levantarse.

Contra Italia, el único problema no fue ese fallo de comunicación entre el staff y las jugadoras. España, en lugar de reponerse tras el 1-1 y volver a ser once sobre el campo, se desmoronó en todas las líneas. La defensa quedó retratada por encajar tres goles en menos de 20 minutos, el centro del campo no colaboró tras quedarse sin fluidez con la salida de Aitana y arriba, también sin Athenea, la delantera quedó descolgada.

No había tampoco soluciones desde el banquillo. Tomé solo hizo un cambio más, en el minuto 68, y fue para dar entrada a Ivana Andrés por Paredes -central por central- cuando el equipo estaba descosido de medio campo para arriba. España no se quedó lejos de empatar, pero fue más por la capacidad de lucha que por la pizarra.

España ahora debe cumplir con el trámite contra Suecia y, a partir de ahí, coger oxígeno y recomponerse. Tiene tiempo, dos meses y medio, y por tanto margen. Sin embargo, Tomé estará casi en una posición de vida o muerte, técnicamente hablando, cuando afronte con la Selección las semifinales de la Nations League. Solo hay dos caminos: billete a París 2024 y el pase a una nueva final o el desastre.