La gran victoria de Dani Alves: la importancia de la prueba psicológica y cuál es el miedo de la víctima

Dani Alves se encuentra atravesando por uno de los momentos más complicados de los últimos meses. En la cárcel de Brians 2 de Barcelona desde el pasado 20 de enero, tras unas primeras semanas en lo que todo era cordialidad, ahora vive su situación más tensa. Muchos presos han empezado a tomarla con él, a amenazarle y a insultarle de manera frecuente, llamándole "violador" o "maricón". 

Mientras esta situación se agrava, el brasileño y su equipo de defensa intentan obtener alguna victoria con la que coger algo de aire ahora que los malos momentos aprietan y ahogan de verdad. Para evitar esa sensación de persecución que ahora mismo siente el brasileño en prisión, su defensa ha intentado pedir en varias ocasiones la libertad provisional hasta la celebración del juicio. Sin embargo, esta ha sido denegada todas las veces que ha sido solicitada. La última negativa se ha conocido este martes. 

A la par que avanza el caso, Dani Alves también ha ido modificando las versiones de lo que supuestamente sucedió aquella noche. Lo que no ha cambiado el brasileño es que todo lo que sucedió fue consentido en aquella noche del 30 de diciembre en la discoteca Sutton de Barcelona. Una táctica que ha provocado que pierda buena parte de la poca credibilidad con la que comenzó el caso.

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Ahora, el que fuera uno de los mejores laterales del mundo sí ha conseguido una gran victoria junto a su equipo. La Audiencia de Barcelona ha aceptado una de las peticiones realizadas por la formación que defiende los intereses del futbolista brasileño con la que pretenden desmontar la versión de la presunta víctima. 

¿Qué victoria legal ha conseguido Dani Alves?

Cristóbal Martell, reputado penalista y líder de la defensa de Dani Alves, venía manteniendo desde hacía unas semanas una intensa batalla legal en relación a un asunto concreto: se trataba de la realización de una prueba psicológica a la víctima para intentar demostrar que su estado es óptimo y que no es el propio de una persona que ha sido agredida sexualmente como ella denuncia. 

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Desde la llegada del nuevo abogado al equipo de defensa de Alves, la táctica siempre ha sido intentar demostrar que la denuncia es fruto de una "distorsión narrativa". En un primer momento, el equipo del jugador brasileño ya solicitó que fuera un médico designado por ellos quien examinara a la joven y que esta prueba fuera grabada. Una petición que tuvo una primera negativa. 

La víctima presentó un recurso ante la jueza instructora para rechazar ser examinada por el psicólogo particular a través de su abogada Ester García ya que la magistrada decidió dar luz verde a la pericial de parte que proponía la defensa. La Fiscalía también procedió de la misma forma. Hay que recordar que la joven ya fue examinada por el forense del caso. 

Dani Alves tras un acto Europa Press

Sin embargo, estos recursos no han evitado la primera gran victoria de Dani Alves en el caso. La sección tercera de la Audiencia de Barcelona ha aceptado el recurso de apelación presentado la semana pasada por el abogado de Dani Alves, Cristobal Martell, quien solicitó la presencia de un médico de su parte en los exámenes forenses a la joven de 23 años. Ahora, las dos partes ya conocen que se ha aceptado la petición. 

La jueza del caso ya había solicitado una inspección médica para examinar el estado de la presunta víctima para evaluar su estado psicológico. El objetivo era determinar si las posibles secuelas que pudiera sufrir eran compatibles o no con los hechos que denunció ante las autoridades. El Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Cataluña ya emitió hace unos días un informe que derivaba a la joven a la unidad de psicología del mismo centro. Esa revisión no se ha producido y ahora contará con un profesional médico elegido por la defensa de Dani Alves, hallando así su primera gran victoria. 

¿Cómo está la presunta víctima de Dani Alves?

Desde que estallara el caso de la presunta violación de Dani Alves a una joven de 23 años en la discoteca Sutton de Barcelona, mucho se ha escrito y se ha dicho sobre cómo se encuentra el brasileño, quien va camino de cumplir su cuarto mes en la prisión de Brians 2. Desde cómo son sus compañeros, cómo le tratan y hasta los negocios que han realizado estando él como protagonista. 

Sin embargo, poco se conoce de cómo se encuentra la chica que denunció al futbolista con más títulos de la historia del fútbol solo unos días después de lo que sucedió en los baños de uno de los reservados del local de ocio nocturno de la Ciudad Condal. La chica se encuentra todavía de baja laboral y acude dos veces al mes a una asociación especializada en atender a víctimas de violencia sexual. 

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Una vez ya había visitado por primera vez a la forense, acto que realizó en compañía de su madre, declaró sentir "rabia, tristeza y asco" al recordar lo que había vivido aquella noche. Además, ha confesado sentir miedo de salir a la calle por si su presunto agresor, dada su posición económica, contrata a algún tipo de detective que siga sus pasos para conocer su intimidad. Siempre ha defendido que quiere estar en el anonimato para así mantener su credibilidad. 

¿Qué sucedió en los casos de La Manada y de Santi Mina?

El mayor miedo que tiene la denunciante de Dani Alves es que no crean sus palabras, a pesar de que ha mantenido su anonimato para eso y de que ha rechazado incluso una compensación económica. Su defensa teme que le suceda lo mismo que a la víctima de La Manada, de quien se publicó su imagen y datos personales en redes sociales. 

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Un usuario publicó el siguiente mensaje acompañado de una foto: "La chica supuestamente violada por La Manada ha pedido que no se difunda esta imagen porque quizá pensemos que solo era una golfa borracha". Este acto le llevó a ser condenado con dos años de cárcel. Sin embargo, la chica afirmó que los daños para ella fueron irreparables. 

En aquel caso, la víctima sufrió la persecución de un detective privado que realizó un informe que intentaba demostrar que su día a día y su actividad en redes no eran la propia de una persona víctima de una agresión sexual. Una situación que se produjo, casi en idénticas circunstancias, en el caso del exfutbolista del Celta de Vigo, Santi Mina. El equipo del jugador espió a la víctima en 2019 mediante investigadores privados para saber qué tipo de vida llevaba. 

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Sus trabajos concluyeron que la joven vestía con ropa demasiado ajustada y que salía demasiado a tomar copas. Además, los psiquiatras contratados por el delantero cuestionaron que el estrés postraumático que decía sufrir la víctima fuera cierto. Ester García ya ha asegurado que se está intentando dar la vuelta al caso, culpando a la víctima, como ya sucedió con la joven del caso de La Manada. Ahora, a pesar de esta victoria, la defensa de Alves ha conocido como al jugador brasileño se le denegaba una nueva petición de puesta en libertad hasta la convocatoria del juicio.