El Arco del Triunfo de Palmira, en 1880.

El Arco del Triunfo de Palmira, en 1880. Spencer Arnold/Hulton Archive/Getty Images

Patrimonio patrimonio histórico y guerra

La ciudad de Palmira ante su futuro: ¿ruina o réplica?

Las autoridades sirias aseguran que en cinco años podrían reconstruir todos los monumentos. Los expertos alertan de una falsa recreación de la historia sin las piezas originales.

29 marzo, 2016 01:21
Peio H. Riaño Javier Zurro

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Las fuerzas del Estado Islámico han sido expulsadas de la ciudad histórica de Palmira, tras 11 meses dedicadas a la destrucción del patrimonio mundial, ¿qué paso debe dar ahora la comunidad internacional para su reconstrucción? El gobierno sirio acaba de anunciar que todo está listo para su recuperación.

El responsable de Patrimonio sirio, Maamoun Abdulkarin, ha hecho una primera valoración pública sobre el estado de conservación de los monumentos en ruinas. Asegura que su departamento técnico necesitaría un lustro para restaurarlas. “Tenemos personal cualificado, los conocimientos y la investigación. En cuanto tengamos la aprobación de la UNESCO se necesitarán cinco años para restaurar las estructuras dañadas y destruidas por el Estado Islámico”, ha contado a la agencia AFP.

Si las piezas se han desintegrado no hay nada que hacer, si sólo se han desplazado pueden recuperarse

Explica, optimista, que en menos de un año podrían realizarse las primeras acciones. Sin embargo, no será tan sencillo como pretende Abdlkarin. Obviamente, no se puede restaurar lo destruido. Y ese será el gran escollo a resolver: la UNESCO establece que la anastilosis -técnica de reconstrucción de un monumento en ruinas- sólo es posible cuando se conserva la práctica totalidad de las piezas originales derruidas. Si no es así, sólo se consolidan las ruinas para evitar “falsear” un monumento histórico al recrearlo en un decorado.

El arqueólogo Ignacio Arce cuenta a EL ESPAÑOL que la política será decisiva a la hora de decidir si reconstruir o consolidar las ruinas en el estado en el que el ISIS las ha dejado. Ha habido excepciones, recuerda, como la recuperación exacta de Varsovia por el pueblo polaco, tras la destrucción absoluta de la ciudad en la II Guerra Mundial. “En Palmira hay que documentar el estado en el que han quedado las partes tras las explosiones. Si las piezas se han desintegrado no hay nada que hacer, si sólo se han desplazado pueden recuperarse”, añade.

La UNESCO debería jugar un papel esencial de coordinación de los equipos técnicos internacionales

Arce, especializado en patrimonio islámico y romano, se ha dedicado a la restauración y reconstrucción de monumentos arquitectónicos en Jordania durante 20 años, aclara que la UNESCO dictará consejo, pero será Siria quien tenga la última palabra. “Ellos quieren recuperar cuando más sea posible, mejor. El Estado Islámico dinamitó para acabar y cancelar la memoria preislámica, por eso es una cuestión de valor histórico y simbólico. Anular el valor histórico del conjunto es un asunto peliagudo”, dice.

Patrimonio vivo

Precisamente, Abdulkarim se ha adelantado a las investigaciones de la UNESCO y ha declarado que “el 80% de las ruinas están en buen estado”, para forzar la reconstrucción. “Los expertos han llegado hoy a Palmira y les he pedido que evalúen las ruinas y la ciudad antigua. Están tomando fotografías de los daños y documentando todo, tras eso la restauración podría comenzar”, ha declarado a AFP.

El especialista español señala, en ese sentido, que la labor de las misiones internacionales será decisiva. “La UNESCO debería jugar un papel esencial de coordinación de los equipos técnicos internacionales. Por eso hay que recuperar al personal técnico que quede y formar nuevos equipos locales”. Lo primero que hará el organismo será documentar la pérdida y evaluar los daños, para verificar el estado de conservación de los edificios.

Lo que queda de Palmira tras el paso del Estado Islámico

Lo que queda de Palmira tras el paso del Estado Islámico Youssef Badawi Efe

En este tiempo los yihaidistas han usado el antiguo teatro de Palmira como local para las ejecuciones públicas, así como para el asesinato del anterior Responsable de Patrimonio, Khaled al-Assaad, de 82 años. También destruyeron el santuario de Baal Shamin. En septiembre derribaron el Templo de Bel, una joya de la arquitectura clásica de 2.000 años de antigüedad. Un mes después volaron por los aires el Arco del Triunfo, que data del año 200 después de Cristo. A continuación las víctimas fueron una docena de las torres mejor conservadas de la ciudad.

Rusia no es tan optimista

El jefe del Centro de Pacificación ruso en Siria, el general Serguéi Kuralenko, ha declarado, tras la ofensiva militar, que el Estado Islámico ha dejado importantes destrozos en la parte monumental de la ciudad. "Los consejeros militares rusos que cooperaron en la operación para liberar Palmira han valorado la situación actual de la ciudad. Los monumentos arquitectónicos de valor mundial han quedado en buena medida destruidos por la acción criminal de los terroristas del EI", dijo a los periodistas el general ruso.

Además, ha avanzado que las milicias yihadistas han minado durante su retirada el resto de las ruinas de la ciudad, por lo que Moscú enviará unidades de zapadores para limpiar la ciudad. Por su parte el ejército ha asegurado que los monumentos ya están libres de minas. Arranca un polémico proceso de reconstrucción de Palmira, que acabará con la ciudad antigua como decorado trucado o como ruina restaurada.