El cuadro del maestro impresionista Camille Pissarro ‘La cosecha de guisantes’ (1887).

El cuadro del maestro impresionista Camille Pissarro ‘La cosecha de guisantes’ (1887).

Cultura

El Pissarro robado por los nazis que deberá ser devuelto a una familia judía

Los Toll, dueños de la obra, consideran que es un agravio quitársela porque no sabían que había sido expoliada por los nazis.

2 octubre, 2018 21:20

La Corte de Apelación de París confirmó este martes que una pareja estadounidense tendrá que devolver un cuadro del maestro impresionista Camille Pissarro a los descendientes de Simón Bauer, coleccionista judío al que los nazis robaron esa obra durante la Segunda Guerra mundial (1939-1945).

Esta decisión respalda la publicada en primera instancia, que despojaba a la pareja estadounidense Bruce y Robbi Toll de La cueillette des pois (La cosecha de guisantes, 1887), que la habían adquirido en 1995 por 800.000 dólares en una subasta celebrada en la casa Christie's de Nueva York.

Los Toll, que consideraron que era un agravio quitarles esa obra porque no sabían que había sido expoliada por los nazis, habían recurrido a esa primera decisión dictada en noviembre de 2017.

Jean-Jacques Bauer, nieto de Bauer y representante de los descendientes en el litigio, vio respaldada su demanda con esta sentencia, que aún es objeto de un último recurso en la Corte de Casación francesa.

La cueillette des pois fue localizada por los Bauer a mediados de 2017, cuando la detectaron en una exposición en el Museo Marmottan Monet en París, al que los Toll se la habían prestado. Bauer (1862-1947) está considerado como uno de los descubridores de Pissarro, de quien poseía una docena de telas.

Pero el 10 de octubre de 1943, los 93 cuadros de su colección fueron confiscados por un conocido marchante parisino nombrado por el gobierno colaboracionista con los nazis de Vichy, que expoliaba los bienes de la población judía.

Bauer se salvó por los pelos de acabar en una cámara de gas, a pesar de que en 1944 estuvo recluido en el campo francés de Drancy, paso previo a la deportación a un campo de exterminio alemán.

De vuelta a París, dedicó sus últimos años de su vida a intentar recuperar lo robado, tarea que continúa aún su nieto, quien ha conseguido ya seis Pissarro y un Degas.

Antes de que fuese vendido a los Toll en 1995, la última pista que se tenía de "La cueillette des pois" databa de 1965, cuando el Gobierno francés otorgó al galerista neoyorquino Findlay permiso para exportarlo a Estados Unidos.