Comenzó en la radio y será recordada como la reina de la televisión. Pero lo cierto es que María Teresa Campos era mucho más que una comunicadora estrella. A lo largo de su trayectoria se atrevió con un sinfín de proyectos y, sin miedo al fracaso, probó suerte en otras facetas.

En la mitad de sus 30, antes de convertirse en la gran figura de la pequeña pantalla, María Teresa incursionó en el mundo de la política. En las elecciones de 1977, 'Mary Tere Campos' -como se hacía llamar en los carteles electorales- se propuso como la número tres por Málaga, representando al partido Reforma Social Española (RSE). Un proyecto sin éxito pero que no acabó con su interés por los temas políticos. 

Entre otras cosas, Teresa será recordada por haber sido pionera de las tertulias políticas. Llevó los debates políticos y sociales a los magacines que conducía y buscó que las mujeres aprendieran y discutieran sobre ello. 

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María Teresa Campos durante la presentación 'Una bella historia'. Gtres

También fue mujer de negocios. Coincidiendo con el fin de su etapa en Qué tiempo tan feliz, lanzó al mercado un ambicioso proyecto dirigido a todas aquellas que buscaban "la originalidad y la diferencia". A sus 74 años, guiada por su pasión por la moda y tras hacerse con el premio a 'la mejor calzada de España', por el Museo del Calzado de Elda, presentó su propia marca de zapatos, M.T.C María Teresa Campos, con modelos estampados y coloridos que encajaban con su sello personal. "Era moderna y con estilo", recordaba Alejandro de Miguel en sus redes sociales tras conocerse la noticia de su muerte, este pasado martes, 5 de septiembre.

Su línea estilística la marcaban los colores y los tacones infinitos, dos características que se convirtieron en la base de su armario y en la línea de partida de la colección de zapatos que diseñó hasta la temporada 2017-2018. 

Sus diseños lo llevaron conocidas figuras de la pequeña pantalla, como María Casado (45), y se vendieron en tiendas multimarcas. Sin embargo, no alcanzaron el éxito esperado y en 2018 llegó al mercado su última colección. Desde entonces no se tuvieron noticias de la firma y poco a poco fue desapareciendo de las tiendas. 

Ese mismo año María Teresa Campos incursionó en otra faceta, más artística pero diferente a sus proyectos habituales. En mayo de 2018 junto al que fue su última pareja, Edmundo Arrocet (73), la comunicadora lanzó un disco de duetos titulado Una bella historia. 

Teresa llevaba varios años alejada de la televisión y aquello prometía ser su regreso al mundo del espectáculo, aunque fuera en otro registro. Para Edmundo, por su parte, significaba su vuelta a la profesión que lo hizo saltar al estrellato. Sin embargo, no se cumplieron las expectativas. Días después de que saliera al mercado, la expareja organizó una firma de discos en El Corte Inglés de Castellana, Madrid, que fue un fracaso. Sólo dos días más tarde cancelaron toda la promoción y evitaron responder a las preguntas relacionadas con el álbum, de la productora Cargo Music Entertainment. 

La compañía publicó en torno a "1.000 o 2.000 discos, lo mínimo para poder colocarlo en determinadas tiendas", explicaron entonces a EL ESPAÑOL. Pero "no se vendió mucho" ni hubo apoyo en las plataformas de streaming. Casi un año después de que saliera a la venta, la mayoría de las canciones no superaban las 1.000 reproducciones en Spotify. 

Después de aquello María Teresa Campos innovó menos. Terminó su relación con Edmundo, en 2021 volvió a probar suerte en la pequeña pantalla con La Campos móvil -con sólo una entrega- y apareció por un última vez en televisión en marzo de 2022 en el programa de Bertín Osborne Mi casa es la tuya. 

María Teresa Campos y Edmundo Arrocet en la firma de su disco 'Una bella historia'. Gtres

Sus últimos tiempos los vivió alejada del foco mediático. Apenas salía de su domicilio y era poco lo que se conocía de su rutina. Sufría un severo problema cognitivo que la obligó a llevar una vida tranquila en su domicilio de Madrid, situado en la zona de Aravaca, hasta el pasado domingo, 3 de septiembre, cuando ingresó de urgencia en el Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz a causa de una insuficiencia respiratoria. Dos días más tarde, María Teresa perdió a la vida a los 82 años de edad.