La Navidad es tiempo paz, excepto para los Windsor. El terremoto desatado por la emisión de Harry & Meghan no tiene visos de parar. Los duques de Sussex siguen con su particular guerra, que se ha trasladado incluso a su tradicional felicitación de las fiestas. La foto que este año protagoniza su Christmas esconde un claro mensaje oculto con el que reafirman la principal acusación que hacen en el documental sobre el trato recibido tanto por la prensa como por la Corona.

El príncipe Harry (38) y Meghan Markle (41) han elegido una instantánea muy significativa: corresponde los premios Ripple of Hope, celebrados a principios de diciembre en Nueva York, donde ambos recogieron un galardón por su lucha contra el racismo institucional en el seno de la Familia Real británica. Fue una de las grandes noches para la exactriz en este 2002 y brilló especialmente con un vestido blanco de escote Bardot firmado por Nicolas Ghesquière para Vuitton.

Una de las organizadoras del evento, Kerry Kennedy (63) justificaba de esta manera el reconocimiento a los Sussex en una reciente entrevista realizada por el periodista Gustavo Egusquiza: "Pocos tendrían el coraje de cuestionar a sus familiares sobre la estructura de poder que mantiene y esto es lo que han hecho Meghan Markle y el príncipe Harry. Fueron a la institución más antigua de la historia del Reino Unido y les dijeron que lo estaban haciendo mal. Algo heroico que ha abierto una brecha". La imagen, por tanto, es un dardo envenenado para los Windsor.

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La felicitación de Navidad de los duques de Sussex. Redes sociales

Aparecen sonrientes, cogidos de la mano refrendando su unión indestructible, y felicitan en su nombre y en el de su fundación, Archwell, deseando un Año Nuevo feliz con "salud y paz". Sin embargo, paz es precisamente lo que no hay en el seno de la Corona británica en estos momentos. Además del texto, el hecho de que nuevamente opten por una foto en blanco y negro también tiene su importancia.

Se trata de otra manera de protestar contra el racismo, prescindiendo de colores. Hay que recordar que Meghan es la primera mujer de origen afroamericano en formar parte de la monarquía británica, lo que, según su testimonio, ha sido clave para su no aceptación. Ya contó en su primera entrevista con Oprah Winfrey (68) la preocupación que existía en su primer embarazo por el color de piel que pudiera tener Archie (4), aunque nunca quiso decir quién fue la persona que hizo esa apreciación.

Precisamente para evitar comentarios sobre su bebé, en 2019 los duques de Sussex ya utilizaron una imagen en blanco y negro para presentar oficialmente a su primogénito, con un posado en el que estaban acompañados por la reina Isabel II, el duque de Edimburgo y la madre de Markle, Doria (66). Esta Navidad 2022 repiten fórmula. El racismo vuelve a estar implícito.

La presentación de Archie, también en blanco y negro, en 2019. Redes sociales

Harry y su esposa no irán a pasar las fiestas con Carlos III (74) y el resto de la familia, se quedarán en su mansión de Montecito. Mientras, tanto el Rey como los Príncipes de Gales siguen con su actividad oficial sin hacer comentarios sobre la docuserie de Netflix y todo lo que en ella se dice. Cuentan con el apoyo mayoritario de la opinión pública de su país y de sus súbditos, que les aplaudieron sin fisuras en el reciente concierto de Navidad celebrado en la abadía de Westminster, donde los Windsor dieron una imagen de total unidad.