Cómo influye el vino en tu nivel de colesterol

Algunos estudios han demostrado los efectos positivos para la salud cardiovascular de una ingesta moderada de vino tinto. Hoy contestamos a la pregunta de cómo influye esta bebida alcohólica en el colesterol.

19 marzo, 2022 11:47

Ada Funes

Entre un 50 y un 55% de la población adulta en España tiene unos niveles de colesterol bastante elevados. Y lo peor de todo es que, según datos registrados por la Fundación Española del Corazón (FEC), la mayoría de ellos no lo saben. Pero, ¿cuál es la relación entre vino y colesterol?

El colesterol elevado no presenta síntomas, por eso sus consecuencias pueden ser mortales si da la cara demasiado tarde. Para prevenirlo, es conveniente mantener hábitos de vida saludables, como una alimentación equilibrada y realizar actividad física de forma regular. También puedes aprovechar las propiedades del resveratrol. ¡Sigue leyendo!

Relación vino y colesterol

Además de introducir estos cambios en tu estilo de vida, puedes recurrir a ciertos alimentos cuyos beneficios te ayudarán a reducir el colesterol. Por ejemplo, siempre se ha hablado de los efectos positivos que una ingesta moderada de vino tinto supone para nuestra salud cardiovascular.

De hecho, algunos estudios han demostrado que podría ser beneficioso para obtener cierta protección. No obstante, al tratarse de una bebida alcohólica, nos encontramos con opiniones confrontadas sobre su efectividad.

Algunos expertos de la FEC aseguran que el vino tinto contiene antioxidantes que podrían contribuir a prevenir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Así pues, un consumo moderado de vino tinto podría incrementar los niveles de colesterol bueno (HDL), el cual tiene una función protectora sobre las arterias, pues impide que se acumule la grasa que acaba afectando al sistema circulatorio.

Pero también advierten de que un consumo excesivo de vino tinto, así como de cualquier otra bebida alcohólica, puede tener consecuencias muy perjudiciales para nuestra salud.

Entonces, ¿una copa al día sí o no?

Después de los datos aportados, te estarás preguntando si es bueno tomar una copa de vino tinto al día o es mejor abstenerse.

Pues bien, esta duda ha sido planteada por muchos pacientes a cardiólogos, médicos de cabecera y nutricionistas. Incluso la Asociación Americana del Corazón ha elaborado diversos estudios sobre ello, analizando durante varias décadas la vinculación del consumo moderado de alcohol con la reducción de mortalidad provocada por enfermedades cardiovasculares.

Las conclusiones de estas investigaciones señalan que los beneficios del consumo de alcohol de forma moderada se centran, sobre todo, en el vino tinto. La razón es porque esta bebida elaborada con uva fermentada es rica en flavonoides, una sustancia con efecto vasodilatador sobre las arterias.

Además, el vino tinto también posee una elevada cantidad de polifenoles y taninos presentes en la piel y semillas de la uva. Estas sustancias también actúan como potentes antioxidantes para luchar contra los radicales libres tan dañinos para las células.

Propiedades del resveratrol

Los estudios realizados sobre la relación entre vino y colesterol también indican que el vino tinto contribuye a aumentar los niveles de colesterol bueno, como hemos comentado antes. Sin embargo, es fundamental que se consuma con moderación para conseguir estos efectos beneficiosos.

Otra sustancia muy beneficiosa presente en el vino tinto es el resveratrol. Entre las propiedades del resveratrol podemos destacar la reducción del riesgo de coagulación de la sangre y de la inflamación. Pero, ¿qué cantidad está considerada como un consumo moderado?

Según los expertos, un consumo moderado quiere decir, como máximo, una copa de vino tinto al día. Además, recomiendan tomarla con el estómago lleno para retardar la absorción de etanol y evitar que suban los niveles de alcoholemia en el organismo.

A pesar de las numerosas propiedades saludables de tomar una copa de vino tinto al día, al ser una bebida alcohólica, su consumo no está indicado para cualquier persona. Por ejemplo, los pacientes con diabetes, enfermedades hepáticas o cardiopatías deben abstenerse de tomarlo, así como los niños, embarazadas, adolescentes y personas que tomen ciertos medicamentos.

Lo mejor es que un especialista valore cada caso de forma particular para considerar los riesgos y posibles beneficios. También puedes incluir alimentos en tu dieta que contribuyan a reducir los niveles de colesterol en sangre, es decir, aquellos con una elevada cantidad de peptina y fibra soluble.

Incorpora en tus menús frutos secos, aguacates, verduras, legumbres y cereales integrales para mantener el colesterol a raya. Realiza también actividad física a diario y, si lo deseas y no está contraindicado en tu caso, toma una copa de vino diaria o una ración de uvas negras.

¿Qué cantidades de vino tinto son las adecuadas?

Pese a los posibles beneficios del vino tinto para el corazón, es preciso realizar más investigaciones para saber si realmente el vino tinto es más beneficioso para el sistema cardiovascular que otras bebidas alcohólicas, como la cerveza y los licores.

Por su parte, la Asociación Estadounidense del Corazón y el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre, no recomiendan beber alcohol solo para prevenir ciertas enfermedades cardíacas. Y es que el alcohol puede llegar a ser muy adictivo, hasta el punto de provocar o empeorar otros problemas en nuestro organismo.

De hecho, beber alcohol en demasía aumenta el riesgo de padecer los siguientes problemas:

Violencia, accidentes y suicidio
Insuficiencia cardíaca
Enfermedades pancreáticas y hepáticas
Casos de cáncer
Aumento de peso y obesidad
Presión arterial alta
Accidentes cerebrovasculares

Debes evitar el consumo de alcohol en los siguientes casos:

Embarazo
Antecedentes de alcoholismo familiares o personales
Enfermedad hepáticas y pancreáticas
Insuficiencia cardíaca o corazón débil
Si tomas medicamentos

Si ya consumes vino tinto, recuerda hacerlo con moderación, que para un adulto sano sería de hasta una copa al día para mujeres de cualquier edad y hombres mayores de 65 años. Los hombres menores de 65 años pueden tomar hasta dos copas al día, pues suelen pesar más que las mujeres y poseen más cantidad de la enzima encargada de metabolizar el alcohol.