El proyecto pionero en Madrid para pacientes con VIH: recoger la medicación en su farmacia más cercana

El Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) es una de las enfermedades de transmisión sexual más comunes a nivel mundial. Se calcula que a finales de 2021 había 38,4 millones de personas que vivían con el VIH, según las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En España se han notificado un total de 63.515 nuevos diagnósticos desde 2003, según el registro del Ministerio de Ciencia e Innovación.

El VIH es una patología que puede evitarse en la actualidad siguiendo una serie de pautas que empiezan por la concienciación de los pacientes para que conozcan todo lo necesario sobre esta infección, métodos de prevención y consecuencias. En los primeros momentos del diagnóstico la infección por VIH se aborda como un proceso de atención urgente.

"Por este motivo, la Fundación Jiménez Díaz ha establecido un circuito de atención preferente para que se active el sistema desde el momento en que se detecta un test positivo", destaca el doctor Miguel de Górgolas Hernández Mora, jefe del Departamento de Enfermedades Infecciosas de Medicina Interna del hospital madrileño y responsable de su Unidad VIH.

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El hospital ha establecido un circuito de atención preferente, para que en el momento que se detecta un test positivo, se active el sistema y sea atendido por un especialista en menos de 48 horas. "Para realizar el estudio completo de su situación y así poder iniciar el tratamiento de forma inmediata", prosigue Górgolas.

El futuro del VIH

El seguimiento del VIH se realiza a través de una vía clínica común que facilita a los pacientes saber cuándo deben realizarse los controles, así como sus citas previstas a cinco años vista, de forma automática. Esta consulta puede efectuarse desde el teléfono, a través del Portal del Paciente (aplicación de desarrollo propio del hospital), resultando ágil y útil para los pacientes.

En este escenario, y con el objetivo de actualizar las novedades en el abordaje del VIH y de compartir conocimientos y experiencias entre los profesionales, la Fundación Jiménez Díaz ha organizado recientemente una nueva edición de su "Curso de actualización en infección por VIH".

El doctor Górgolas explica que el objetivo de estas sesiones, dirigidas a todo el personal sanitario implicado en la atención de las personas que conviven con el VIH, es actualizar el estado de la enfermedad en el mundo y, sobre todo, los avances más relevantes en sus diferentes campos, como la epidemiología, los tratamientos y su prevención, entre otros.

"En la actualidad, un significativo número de personas lleva años viviendo con la infección por VIH", señala el doctor Alfonso Cabello, jefe asociado del Servicio de Medicina Interna del hospital madrileño y miembro también de su Unidad VIH. Cabello también asegura que, gracias al tratamiento antirretroviral, los pacientes tienen una vida similar al resto de la población.

"En este colectivo, el objetivo es abordar la prevención de eventos de salud que puedan estar relacionados directa o indirectamente con la infección, y facilitar su seguimiento y atención en el centro, manteniendo el control virológico e implementando medidas que mejoren su calidad de vida", explica Cabello.

Durante la sesión se abordaron, asimismo, los retos en VIH para los próximos años. En este sentido, el Dr. Górgolas destaca, en primer lugar, que se debe conseguir que el número de nuevas infecciones disminuya de manera drástica. "A falta de una vacuna eficaz, el empleo de la profilaxis pre-exposición, el tratamiento universal y las medidas clásicas de prevención son esenciales", aseveró el especialista.

El objetivo principal de esta estrategia es, según Górgolas, disminuir el número de nuevas infecciones. Además, "se ha incorporado recientemente la administración parenteral intramuscular del tratamiento antirretroviral, con una eficacia similar a la de la forma oral y una reducción considerable del estigma para los pacientes, con el objetivo de mejorar su calidad de vida", destacó el responsable de la Unidad VIH de la Fundación Jiménez Díaz. Górgolas considera imprescindible perseverar en el desarrollo de una vacuna eficaz y conseguir una cura. "Si no definitiva, al menos funcional de la infección".

La medicación en farmacias

La Fundación Jiménez Díaz colabora en un proyecto madrileño que permitirá que unas 70 personas que viven con VIH puedan recoger su medicación de dispensación hospitalaria en sus farmacias más próximas, y no en el hospital como hasta ahora, lo que les evitará desplazamientos innecesarios. Se trata de una actuación que se enmarca en la nueva Ley de Ordenación y Atención Farmacéutica del Gobierno regional.

La Comunidad de Madrid ha iniciado este proyecto piloto, en colaboración con el hospital madrileño y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid. La iniciativa se desarrollará durante un año en 14 oficinas de farmacia ubicadas en el distrito de La Latina.

Los fármacos antirretrovirales son de diagnóstico hospitalario y su dispensación está restringida al propio centro que sigue a estas personas. "En el caso del tratamiento incluido en este proyecto pionero en Madrid —dolutegravir y lamivudina 50/300 MG COMP—, los pacientes deben recogerlo de la Farmacia Hospitalaria de su centro de referencia con una periodicidad bimestral", tal y como explica la doctora Ana Cordero, especialista de este servicio en la Fundación Jiménez Díaz y responsable de la iniciativa en este centro.

Para estos pacientes, que tienen una vida social, laboral y familiar activa, tener que desplazarse al hospital para recoger la medicación, afecta a menudo a estos ámbitos de su día a día, además del consabido estigma que aún rodea esta enfermedad. Por ello, "este proyecto facilitará su conciliación y, sobre todo, ayudará a mejorar su calidad de vida", añade Cordero, en la misma línea que la Comunidad de Madrid explica que la iniciativa pretende "evaluar en qué medida acercar este tipo de tratamientos al enfermo es eficaz y mejora la accesibilidad".

En la Fundación Jiménez Díaz, que ha modificado su circuito de dispensación para adaptarlo al proyecto, éste se vehiculizará a través de su aplicación de desarrollo propio y vía de comunicación con el usuario, el Portal del Paciente, a través del cual éste recibirá un aviso dos semanas antes de la cita con el Servicio de Farmacia Hospitalaria en el que se le solicitará que confirme si desea recibir su medicación directamente en la farmacia elegida por él entre las participantes en la iniciativa.

Si el paciente lo confirma en los siguientes siete días, el citado servicio preparará la dispensación de la medicación y la entregará en la farmacia correspondiente a través de una distribuidora, garantizando en todo momento su trazabilidad. El farmacéutico, por su parte, será el responsable de la recepción, verificación, custodia y entrega, siguiendo el protocolo establecido.

La Subdirección General de Farmacia y Productos Sanitarios de la Comunidad de Madrid realizará periódicamente el seguimiento de los resultados, lo que permitirá valorar el grado de satisfacción de los pacientes y si se extiende esta experiencia a otras patologías, medicaciones o áreas.