Castilla y León ha sido una de las comunidades más afectadas por el coronavirus. Ha sido, de hecho, durante mucho tiempo la zona de España donde más incidencia acumulada había, aunque ha habido zonas más afectadas que otras. 

Los datos oficiales hablan de 26.182 casos y una mortalidad que supera las 2.000 personas solo en hospitales. Sumando las residencias, esta última cifra suma otras 1.486 personas, que podrían ser 2.500 añadiendo también las que fallecieron con síntomas del virus. 

Con estos datos parece imposible que haya zonas donde no se haya producido ningún caso de manera oficial por PCR en toda la región pero son cinco, uno en Salamanca, otro en Zamora y tres en Burgos. 

En Salamanca es Fuentes de Oñoro, donde se han realizado hasta 44 pruebas con cero positivos. Allí, en cambio, sí ha habido 13 personas sospechosas de tenerlo que han sido seguidas por atención primaria aunque ya ninguna es un caso activo. 

En Zamora, por su parte, Alta Sanabria apenas ha sufrido siquiera casos sospechosos. Se han realizado tres pruebas PCR, todas ellas negativas, y ha habido dos personas solo en seguimiento. 

La provincia con más zonas rurales alejadas del virus, por su parte, ha sido Burgos. Hasta tres zonas del norte de la provincia no cuentan con positivos PCR. Se trata de Sedano, donde solo se ha realizado una prueba; Espinosa Monteros, con doce pruebas realizadas y 42 sospechosos, tres en activo; y Valle de Mena, con 33 pruebas PCR con 51 personas atendidas en atención primaria y ningún caso activo.