Asociación de Integración Sensorial Neurológico Motórico de Zamora

Asociación de Integración Sensorial Neurológico Motórico de Zamora

Zamora

Zamora impulsa un 'gimnasio' para el cerebro con terapias auditivas, motóricas y neurofeedback

Un proyecto pionero que busca mejorar la memoria, la atención y la coordinación de niños, adultos y mayores con autismo, daño cerebral o Parkinson, combinando estimulación sensorial y cognitiva.

Más información: Los futuros cuidadores robóticos se entrenan en Castilla y León: "La idea es que atiendan a mayores en casa"

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El cerebro también puede entrenarse y hay un proyecto en Zamora que da buena cuenta de ello. Se trata de una iniciativa pionera de integración sensorial neurológico motórico que combina terapias auditivas, ejercicios motóricos y neurofeedback para mejorar la memoria, la atención, el lenguaje y la calidad de vida de niños, adultos y mayores con diferentes patologías neurológicas.

El proyecto ha conseguido ya resultados que sus impulsores califican de "éxito social y sanitario". La iniciativa busca estimular el cerebro mediante terapias que combinan trabajo cognitivo y motórico, con el fin de mejorar la calidad de vida de niños, adultos y mayores con diferentes patologías neurológicas.

La propuesta está dirigida a personas con autismo, daño cerebral, Parkinson, esclerosis múltiple, demencias jóvenes o dificultades de aprendizaje.

El proyecto de integración sensorial neurológico motórico en Zamora

El proyecto de integración sensorial neurológico motórico en Zamora

También se aplica en casos más leves, como otitis de repetición en niños que afectan a su audición o problemas de atención en el aula. El objetivo, según explica su promotor, Óscar Torres, es "construir un gimnasio del cerebro" que permita a los usuarios entrenar sus capacidades y mantenerlas activas.

Las terapias se realizan de manera individualizada, uno a uno, con técnicas basadas en la evidencia científica.

Se utilizan herramientas de neurofeedback, mapeo cerebral, terapias auditivas y la tecnología Tomatis, que combina música y ejercicios motores para estimular la corteza cerebral.

Cada sesión recoge datos que permiten ajustar los planes de intervención, lo que supone un avance frente al trabajo "con el ojímetro", como describe el propio Torres.

El equipo está formado por psicólogos, neuropsicólogos, pedagogos, terapeutas de audición y lenguaje, especialistas en motricidad y voluntarios. También colaboran estudiantes universitarios en prácticas procedentes de Psicología, Pedagogía o Ciencias de la Actividad Física.

En tres años, el proyecto ha tratado a 327 personas en Salamanca y Zamora. Solo en la capital zamorana, desde febrero, han pasado 52 usuarios y ya se contabilizan 107 pacientes en total.

Los casos de éxito incluyen desde niños que tras terapias auditivas han logrado comunicarse por primera vez, hasta adultos con migrañas que han aprendido a controlar su dolor.

"No curamos discapacidades, pero conseguimos que las personas sean más funcionales y tengan un rol social más activo", subraya Torres.

El proyecto, insiste, no sustituye la atención médica, sino que la complementa desde el enfoque neurológico, motórico y cognitivo.

Centro de integración sensorial neurológico motórico de Zamora

Centro de integración sensorial neurológico motórico de Zamora

La financiación privada inicial llegó de empresas como Tecozam y Aenus, además del apoyo puntual de entidades como Caja Rural de Zamora.

El modelo, asegura Torres, se inspira en experiencias internacionales como las de Suiza y se está extendiendo a centros educativos en Valladolid y otros puntos de Castilla y León. El objetivo es incorporar estas terapias también en la etapa escolar, con programas de estimulación temprana desde los 2 a los 7 años.

El proyecto funciona en la actualidad como asociación sin ánimo de lucro, sin coste para las familias. La sostenibilidad económica depende de la colaboración institucional.

Desde sus inicios, el Ayuntamiento de Zamora y la Diputación Provincial han contribuido a garantizar la continuidad de las sesiones, lo que ha evitado que las familias tengan que desplazarse hasta Salamanca para acceder a estos tratamientos.

El alcalde de Zamora, Francisco Guarido; y el presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez, visitan el centro

El alcalde de Zamora, Francisco Guarido; y el presidente de la Diputación de Zamora, Javier Faúndez, visitan el centro

Durante una visita a este centro, el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, señaló que "más de 50 familias" ya utilizan este recurso en la ciudad, lo que demuestra su utilidad.

Guarido ha destacado que se trata de un proyecto "con una repercusión social y sanitaria muy importante", y reclamó la implicación futura de la Junta de Castilla y León. "Es un dinero muy bien invertido por parte del Ayuntamiento y de la Diputación", ha afirmado.

En la misma línea, el presidente de la Diputación, Javier Faúndez, ha recordado que este servicio responde a una demanda real de familias de la capital y de la provincia.

"Era una carencia que había en Zamora y ahora hemos logrado resolverla. Nos sentimos cómodos en este proyecto porque es un ejemplo claro de cómo dos instituciones se ponen al servicio de los ciudadanos", ha subrayado.

El compromiso de ambas administraciones locales es mantener el apoyo mediante convenios estables y explorar nuevas fórmulas de colaboración. Para sus responsables, el reto es que este recurso pionero en Castilla y León siga creciendo y consolidándose, con la participación de más organismos públicos.