El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, ha abordado la escasa acogida que han tenido los presupuestos participativos en la ciudad y ha desvelado la posibilidad de realizar ajustes en el modelo actual.

"Seguiremos adelante con los presupuestos participativos", afirmó Guarido, reafirmando el compromiso del equipo de gobierno con esta forma de participación ciudadana. Sin embargo, reconoció que la experiencia de los últimos años ha evidenciado ciertas limitaciones en la ejecución de los presupuestos planificados.

El alcalde explicó que, a pesar de planificar asignar alrededor de 400.000 euros para el año 2024, actualmente se encuentran en la fase de votaciones después de las elecciones. Este proceso ha llevado a una ejecución limitada de los presupuestos, llegando al verano del año siguiente con proyectos aún por concretar.

"Tendremos que cambiar el modelo de financiación, pero no el concepto, que lo vamos a mantener siempre en este equipo de gobierno", advirtió. La propuesta consiste en incorporar cuestiones de presupuestos participativos de los años 22 y 23 en el presupuesto real del 24. Posteriormente, mediante el remanente, se financiarán las necesidades adicionales surgidas de los presupuestos participativos actuales, aplicando las correspondientes modificaciones presupuestarias en una modificación de créditos del año 24.

"Lo que logramos es una eficacia presupuestaria", subrayó el alcalde. En este sentido, señaló que si se asignan 400.000 euros que no se podrán gastar en el mismo año, es preferible ajustar la planificación, retirarlos y destinarlos a proyectos de años anteriores. Con esta reorganización y el uso de remanentes en el siguiente año, se busca mantener el ritmo temporal pero con un modelo más eficaz en términos presupuestarios.

Estos posibles cambios buscan abordar las dificultades identificadas en la ejecución de los presupuestos participativos, asegurando una gestión más efectiva de los recursos y una mayor alineación con las necesidades reales de los zamoranos. También admitió que el Ayuntamiento de Zamora debe involucrarse más en la propuesta de iniciativas que puedan incluirse en estos presupuestos y que sea el propio Consistorio quien proponga algunos proyectos a vecinos y asociaciones. 

Las dudas sobre esto fueron planteadas durante la reunión de la Comisión del Barrios, Servicios Sociales e Igualdad, donde las concejales del grupo municipal del Partido Popular, Eva Ariza y Beatriz Lozano, abordaron lo que consideran "un fracaso" de los presupuestos participativos de 2023 en Zamora. La preocupación se centra en la falta de respaldo ciudadano, ya que ningún proyecto presentado logró superar los 12 votos necesarios para su aprobación.

"La baja participación para sacar adelante proyectos y la ausencia de propuestas en algunos barrios de la ciudad nos lleva a cuestionar la eficacia de esta fórmula de gestión del gasto", expresó el Partido Popular en un comunicado. Consideran que los ciudadanos han dado la espalda a esta iniciativa, por lo que los populares piden la supresión de los presupuestos participativos.

El Partido Popular critica no solo la escasa participación, sino también el aparente desequilibrio entre el costo de algunos proyectos y los recursos invertidos en la plataforma de votación. Según el comunicado, "algunos de los proyectos a ejecutar suponen un coste menor de lo que seguramente ha costado la propia página web que gestiona las votaciones de la docena de personas que la han usado".

Esto es calificado como un "sinsentido y un despilfarro del dinero público", recordando episodios previos, como la imposición de la tasa de perros, que resultó en una pérdida de 25.000 euros para el Ayuntamiento.

Desde el Partido Popular, argumentan que el alcalde, Francisco Guarido, y los siete concejales liberados del equipo de gobierno son "más que suficientes" para identificar y abordar las necesidades de los diversos sectores de la ciudad. Consideran innecesario cargar a los ciudadanos con la responsabilidad de proponer y votar proyectos. Además, recuerdan que las Asociaciones de Vecinos, en muchas ocasiones, transmiten de manera constante las necesidades de los barrios al equipo de gobierno, pero lamentablemente son mayormente ignoradas.

El comunicado subraya que estas asociaciones, que encarnan la participación  ciudadana, son "marginadas" por el equipo de Gobierno. El PP critica la escasez de subvenciones, la falta de atención a sus demandas e, incluso, "el cierre de algunas de sus sedes por peligro de derrumbe", sin que el Ayuntamiento valore "el servicio altruista" que brindan a sus vecinos y a la ciudad.