El número reproductivo básico instantáneo es el promedio de personas que cada persona contagiada puede llegar a infectar a otros. Un indicador muy útil para la Consejería de Sanidad de la Junta y que se tiene muy en cuenta a la hora de valorar la situación epidemiológica en las nueve provincias de Castilla y León.

Hoy mismo, la consejera de Sanidad de la Junta, Verónica Casado, ha alertado del elevado número de este índice de reproducción en Zamora, que alcanza el 1,81. De hecho, Zamora es la segunda provincia que tiene una velocidad de contagio mayor que en el resto de la Comunidad, solo superada por Soria con 1,86. Es decir, que actualmente, un zamorano contagiado de coronavirus es capaz de infectar, casi a dos ciudadanos.

La provincia tenía una de las mejores tasas de contagio de la Comunidad y había ido controlando esa reproducción de contagios, es decir, que había conseguido poner en cuarentena a un mayor número de infectados reduciendo así sus posibilidades de contagiar a otros. Pero hoy Zamora vuelve a elevar a casi dos ese reproductivo básico, aumentando esa capacidad de propagación del virus. Un número bastante elevado que provoca una expansión del virus por la provincia y que regista una importante subida de la curva de contagios de toda la Comunidad.

Y es que en nuestra provincia se da la extraña circunstancia de que, por el nivel poblacional, aunque no sea el territorio con más contagios, cuando se detecta un positivo, este suele contagiar a más personas que en el resto de las provincias. Bien porque sus contactos estrechos sean mayores o porque se tarde más tiempo en detectar el positivo e imponer una cuarentena.