Leoncia Pérez, la mujer que cumple 100 años

Leoncia Pérez, la mujer que cumple 100 años Cedidas a EL ESPAÑOL- Noticias de Castilla y León

Valladolid

Leoncia, 100 años de alegría, trabajando en el campo desde pequeña y un consejo para los jóvenes: "Hay que divertirse"

La cumpleañera asegura que se encuentra "bien, con la cabeza estupenda" y ha recordado algunas de sus mejores anécdotas en su fiesta de celebración.

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100 años significan muchos deseos cumplidos. Muchas velas apagadas. Muchos recuerdos e historias que contar. Y muchas vivencias reflejadas en tres velas.

Leoncia Pérez puede decir que lo ha logrado este viernes 12 de septiembre. Y lo más importante de llegar a esta cifra no ha sido el soplar las velas, sino el poder hacerlo rodeada de sus seres queridos en una preciosa fiesta organizada por el Centro de Día San Juan Villa Saluten, en Valladolid.

Lugar al que acude varios días a la semana para poder distraerse y mantener la mente activa. Uno de los aspectos más importantes cuando los años van pasando.

La fiesta de cumpleaños de Leoncia junto a las trabajadoras del Centro de Día San Juan

La fiesta de cumpleaños de Leoncia junto a las trabajadoras del Centro de Día San Juan Cedida a EL ESPAÑOL- Noticias de Castilla y León

"Me encuentro bien. Tengo la cabeza estupenda, aunque me siento un poco mayor sabiendo que cumplo 100 años, pero estoy muy alegre de llegar a esta cifra", afirma con una sonrisa la cumpleañera en declaraciones a este medio.

La vallisoletana reconoce que no hay ningún secreto para que en la tarta aparezca un 100. Sin embargo, sí que da algunos consejos: "No hay que tener excesos".

Ella se define como una persona "habladora y directa" con ganas de "aprender y ayudar" a sus compañeros de mesa. Y asegura que le encanta acudir a este centro de día para estar rodeada de amigos y "aprender cada día cosas nuevas".

Leoncia ha trabajado desde pequeña. La vida antes no era tan sencilla como puede parecer ahora. Las facilidades no estaban al alcance de todos y muchos tenían que dedicar su vida a trabajar.

Su vida en el campo le ha acompañado siempre, y es uno de los momentos que recuerda con más cariño y nostalgia. "He ido a cortar cardos, vendimiar, espigar o coger legumbres desde pequeña. Lo hacía para poder comprarme zapatos porque éramos seis hermanos", explica.

De su juventud aún atesora momentos inolvidables. Con nostalgia y cariño habla de la época en la que salía a divertirse al baile o cuando jugaba a las cartas con sus amigas. "Lo pasaba muy bien en el pueblo, me encantaba estar allí", afirma.

Sin embargo, también tiene alguna espina clavada a sus 100 años. Por ejemplo, el no haber podido viajar. Leoncia ha ayudado siempre en su casa y ha tenido que sacrificarse desde joven para poder colaborar económicamente.

Eso no le ha permitido conocer el mundo, ni siquiera su ciudad: Valladolid. Por este motivo, agradece al Centro de Día San Juan que organice excursiones con las que puede "aprender" y visitar lugares nuevos, descubriendo cada rincón y adentrándose en los tesoros ocultos de la ciudad del Pisuerga.

Trabajar desde la tierna infancia no solo no le ha permitido viajar sino que tampoco le ha dejado aprender en la escuela el tiempo que le gustaría. La cumpleañera habla con orgullo de sus cuadernos y de los problemas que ponían en la pizarra y tenía que resolver.

"Siempre he querido aprender, pero por las circunstancias vitales se necesitaba trabajar", añade Leoncia.

Ahora, a sus 100 años, manda un mensaje para los jóvenes y el mejor consejo que les puede dar: "Hay que divertirse, portarse bien y ojalá todos tengan salud y trabajo, que es lo más importante".

Una mujer centenaria que ha celebrado las tres cifras rodeada de familiares, entre globos, ramos de flores y cánticos de cumpleaños feliz que nunca olvidará.

Una mente inquieta, viva, con ganas de seguir explorando y con unas velas que se apagan para que la cumpleañera pueda seguir cumpliendo muchos más deseos.