Imagen del Santo Cristo de la Esperanza
Una reconocida cofradía vallisoletana estrena un paso: el Santo Cristo de la Esperanza que será portado por 24 personas
Contaban ya con cuatro y el Jueves Santo saldrá en procesión este último. Una de las grandes novedades de la Semana Santa de Valladolid de este año.
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La Semana Santa de Valladolid va a afrontar, en las próximas horas, los días grandes con el Jueves Santo y, sobre todo, con un Viernes Santo en el que las calles de la ciudad se convierten en un gran museo al aire libre con todas las tallas y cofradías saliendo en procesión.
La Cofradía de la Orden Franciscana Seglar de Valladolid, que cuenta en la actualidad con un total de 508 cofrades, estrenará un nuevo paso. El Santo Cristo de la Esperanza que saldrá a las calles este jueves.
Charlamos con Miguel Santos Romón, hermano-ministro de la Cofradía de la Orden Franciscana Seglar de Valladolid, quien nos cuenta todos los detalles de esta nueva talla y la ilusión de sacarla en procesión.
La historia de la cofradía
“Los primeros terciarios, a buen seguro, cohabitaron con la orden primera en el desaparecido Convento de San Francisco, desde su asentamiento en el siglo XIII en Valladolid, al igual que en otros asentamientos franciscanos por toda Castilla. No se conocen datos concretos de la primera fraternidad, aunque a finales del siglo XV es la fecha que hemos heredado de nuestros antepasados”, asegura, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Miguel Santos Romón.
Él es el hermano-ministro de la Cofradía de la Orden Franciscana Seglar de Valladolid, desde hace 19 años y que tiene la sede en la Parroquia de la Inmaculada Concepción y en el Convento de Santa Isabel de Hungría.
“La historia de nuestra cofradía es muy extensa ya con datos según avanzan los siglos”, apunta nuestro entrevistado que habla de la “capilla propia en San Francisco durante los siglos XVI y XVII, que se desamortiza y se unen después a la capilla Real de San Diego desde finales del XVIII y después en la Sagrada Familia en el siglo XX, todos conventos desaparecidos”.
En la actualidad, al albur de los franciscanos de la primera orden en la Parroquia de la Inmaculada Concepción y el Convento de Santa Isabel de Hungría que siguieron su regla ya que fue de terciarias franciscanas desde 1450-1455 hasta 1933 y hoy son Clarisas de la Segunda Orden.
Un nuevo paso para esta Semana Santa
La cofradía contaba con cuatro pasos. El Santísimo Cristo Yacente, Nuestra Señora de la Soledad, La Santa Cruz y La Santa Cruz Desnuda a la que ahora se le va a sumar, durante esta semana de pasión pucelana, el Santo Cristo de la Esperanza.
“Alumbrar en procesión al Santo Cristo de la Esperanza ha supuesto un gran reto para nosotros dentro de un proyecto a largo plazo en el que trabajamos en común desde hace años, la configuración de nuestro particular y seráfico Entierro de Cristo de Jueves Santo. Se ha ido configurando a lo largo de los años con la inclusión de imágenes basado en nuestra historia e identidad. En 2011 La Soledad, en 2015 el Yacente y en 2025 el Santo Cristo de La Esperanza”, explica nuestro protagonista.
El Santo Cristo de la Esperanza
La imagen ha sido restaurada, aunque se encontraba en un buen estado de conservación, por el hermano de la cofradía, Pedro Escudero. Es de estilo gótico tardío, anónimo, de escuela castellana y datado entre 1510 y 1520.
“Un aporte único y singular a nuestra Semana Santa. De gran devoción histórica por nuestros antepasados, pues participaba en la procesión del cordón cada segundo domingo de mes por la Plaza de Los Leones, hoy las Brígidas, y se le realizaban dos triduos en mayo y septiembre”, explica Miguel Santos Romón.
En la actualidad recibe culto en una capilla interior del convento del Paseo Zorrilla, tanto por parte de la comunidad de frailes como por los seglares.
24 personas cargarán con la imagen
“Se va a portar a hombros por parte de la Comisaría de San Diego, sección que se encarga de cargar los pasos en Semana Santa y del culto y cuidado de las imágenes todo el año. Formada por 144 hermanos y hermanas de los cuales contamos para salir este año con 126. En concreto, el Santo Cristo de la Esperanza llevará a sus pies 24 personas”, añade el hermano-ministro de la Cofradía de la Orden Franciscana Seglar de Valladolid
La talla, que se podrá contemplar el Jueves Santo, “enriquece la procesión de la cofradía” y es “un aporte singular y de especial relevancia para la Semana Santa de Valladolid en beneficio de todos” porque “supone preservar y mostrar el patrimonio emocional e histórico públicamente”, añade nuestro entrevistado.
“Nos hace mucha ilusión. Este es un año jubilar de la esperanza histórico y que quedará en la retina de todos los cofrades. Somos unos privilegiados por vivir estos momentos únicos. Tenemos gran responsabilidad, pero la afrontamos con ilusión y entusiasmo.
Aunque el día grande para la cofradía siempre ha sido el de la Cruz, su imagen principal el Viernes Santo, Humildad y Penitencia, la del Jueves Santo, “ha tomado una gran importancia hasta ser la de mayor participación y la que todos esperan con emoción cada año”.
Una cofradía que vive su devoción todo el año
La cofradía vive, a lo largo de todo el año, su vocación, la franciscana, del evangelio a la vida y de la vida al evangelio. Basan en la espiritualidad franciscana con la Cruz el centro y se apoyan en la fraternidad, la formación, la oración, el culto y la caridad.
“La Semana Santa es un momento que marca un antes y un después en el año. Donde nos encontramos con los hermanos, vivimos nuestra fe compartida y retomamos fuerzas para el resto del año y hasta la próxima. Cada una diferente pero siempre una misma historia, la de Jesús.
Nuestro entrevistado asegura que ve el futuro “con esperanza” porque es tiempo de “reconocer lo que tenemos en nuestro entorno volátil e impredecible” y apuesta por “seguir avanzando en las nuevas formas de comunicación y de presencia en la sociedad” pero “siempre con el mensaje claro del evangelio como máxima”.
“Queremos que las semillas sigan dando fruto y que el proyecto de vida se siga manteniendo como un fin común basado en la fraternidad a la manera de Francisco de Asís”, finaliza.
