Víctor Morgan, copropietario del Bar Morgan, junto a la pizarra

Víctor Morgan, copropietario del Bar Morgan, junto a la pizarra

Valladolid

Cuando coches y autobuses te rozan la oreja mientras te tomas una caña

Un bar vallisoletano instala una pizarra con un curioso mensaje

1 mayo, 2022 07:00

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“Ojo en la terraza (y no es una amenaza). El bus urbano pasa muy cercano”. Este es el mensaje que se puede leer en la calle Solanilla número 7 de Valladolid. Ahí está ubicado uno de los bares más conocidos de la ciudad del Pisuerga: el Morgan. El autor del mensaje que está escrito en la pizarra del establecimiento hostelero es Víctor Morgan, copropietario, junto a otros tres socios.

La Ordenanza de Terrazas del Ayuntamiento de Valladolid se flexibilizó en marzo de 2020 con motivo de la pandemia COVID-19, para dar un respiro a los hosteleros, con dos decretos que posibilitaban a este bar instalar la terraza cruzando la calle, en una plaza próxima a la Iglesia de La Antigua. Tras la retirada de estos decretos, en enero de este año, no puede hacerlo.

Víctor ha mantenido reuniones, para valorar la situación, con el concejal de Movilidad y Espacio Urbano del Ayuntamiento de Valladolid, Luis Vélez, pero de momento, la ordenanza no se va a modificar y tendrá que continuar instalando su terraza en la estrecha vía pucelana.

“Queríamos pedir precaución, pero aportando un poco de humor”

Pongo la pizarra con el mensaje de “Ojo en la terraza (y no es una amenaza). El bus urbano pasa muy cercano” por lo cerca que pasan tanto los autobuses como los coches de la terraza. Con este cartel queríamos pedir a nuestros clientes precaución, pero aportando un poco de humor a la situación”, confiesa en declaraciones a EL ESPAÑOL – Noticias de Castilla y León, Víctor Morgan, copropietario del Bar Morgan desde el año 2002.

A sus 46 años, este vallisoletano suma 26 en el mundo de la hostelería. Amante del cine, de los comics, de las motos, de viajar y de disfrutar con los amigos de una buena cerveza, él es copropietario de este establecimiento hostelero ubicado en la calle Solanilla 7 de la ciudad del Pisuerga. Una estrecha vía en la que posiciona un par de mesas en su terraza. Detrás de la imponente Iglesia de La Antigua.

“El bus pasa bastante cerca, al igual que en todas las terrazas de nuestra zona, pero mientras la gente siga respetando la colocación de las mesas y los conductores de autobús continúen haciendo gala de su profesionalidad no hay problema”, nos cuenta nuestro entrevistado.

Víctor nos confiesa que, en estos años, ninguna persona ha resultado herida: “No, no es tan peligroso como para llegar a ese extremo. Todo gracias al respeto de la gente de Valladolid”.

Valladolid Bar Morgan Terraza

Valladolid Bar Morgan Terraza

¿Cuál es la solución?

“La solución es, sin duda, ubicar las mesas en el gran espacio del que disponemos frente a nuestro bar, en la Plaza de La Antigua. La pega es que hay que cruzar la carretera. Durante la pandemia se nos permitió y demostramos que no suponía ningún inconveniente, todo lo contrario. Nuestros clientes estaban mejor y los peatones ganaban toda la acera para transitar”, apunta Víctor.

Añade que “ha mantenido reuniones para solicitar un cambio de ubicación de la terraza” con el Ayuntamiento y que “expusieron todas las razones por las que solicitaban dicha modificación” y añade que “la respuesta fue que ahora mismo no es posible por la Ordenanza de Terrazas”.

Nuestro entrevistado apunta que en ciudades “con alta densidad de tráfico como Madrid o Barcelona, lo permiten” siempre que “se cumplan ciertos parámetros” como que “las terrazas tienen que ser atendidas por un camarero” y “tanto los empleados como los clientes deben de estar seguros”.

Creo que es necesario modificar la ordenanza. Tras la pandemia han cambiado muchas cosas y hay que adaptarse a la nueva realidad. Las terrazas han tomado una importancia muy relevante para los negocios de hostelería”, afirma.  

“La ordenanza no se va a modificar, por ahora”

“Nos hemos reunido tanto con los propietarios del Bar La Solana como con el Bar Morgan. Nos presentaron una propuesta, pero la ordenanza no se va a modificar, por ahora”, asegura el concejal de Movilidad y Espacio Urbano en el Ayuntamiento de Valladolid, Luis Vélez, en declaraciones a este periódico.

Vélez asegura que la Ordenanza de Terrazas en la ciudad “no es muy antigua y está bastante bien” aunque añade que antes de la pandemia “tenían un documento prácticamente cerrado para publicar en 2020 con alguna modificación para mejorar” pero finalmente “no se pudo aprobar” por la llegada del coronavirus.

La vigente, la de 2015, no permitía a los camareros de estos dos bares cruzar la calle para servir en la terraza al otro lado de la vía, pero en marzo de 2020, con la pandemia, se crearon dos decretos para “hacer una interpretación más flexible” que permitía colocar las terrazas al otro lado de la carretera, en la plaza cercana a La Antigua. Ahora no lo pueden hacer, al decaer esos decretos en enero de 2022.

En estos dos años las cosas han funcionado razonablemente bien. Ellos estaban contentos porque han podido trabajar con la terraza al otro lado de la calle. Ahora se vuelve a lo anterior a la espera de que la nueva Ordenanza pueda mejorar la situación y matizarla de cara a que determinados locales, como estos, puedan solventar determinadas situaciones especiales como las que tienen e instalarla, siempre que las condiciones lo permitan”, añade Vélez, que no quiere poner fecha a la publicación de esa nueva normativa.

“Hemos salido adelante gracias a nuestros clientes”

Creo que no hemos sido de los más perjudicados. Conocemos la situación de otros hosteleros y hosteleras que han tenido que echar el cierre. Nosotros nos salvamos gracias a poder colocar nuestra terraza en la plaza cuando en los interiores no se podía estar”, confiesa Víctor, hablando de la situación de la hostelería tras dos años de pandemia, de cierres y de restricciones.

El copropietario del Bar Morgan añade que han conseguido salir adelante “con mucho esfuerzo y pidiendo favores” pero, sobre todo, “gracias al apoyo de sus clientes” que “ha sido impresionante” y por el que “está muy agradecido”.

La Semana Santa ha ido bastante bien. El clima y la gran afluencia de turistas que vinieron ayudaron en gran medida”, afirma, aunque añade que “no solo se puede vivir de una semana”.

La hostelería busca resurgir de sus cenizas tras dos años francamente malos por la pandemia y el Bar Morgan que la ordenanza, que está en el horno, le permita volver a instalar la terraza al otro lado de la calle.