
El arzobispo de Burgos y comisario pontificio de los monasterios de Belorado, Orduña y Derio, Mario Iceta, a su llegada al juzgado de Briviesca ICAL
El arzobispo de Burgos niega los tres delitos que le imputan las exreligiosas de Belorado: "Ojalá abran franquicias"
Iceta, ante un revuelo mediático, responde de forma "serena" y "tranquila" a su abogado y evita no hacerlo al de la acusación Final del formulario: "Estoy teniendo mucha paciencia", afirma.
Más información: Ya hay fecha para el juicio y el desahucio de las monjas de Belorado
Noticias relacionadas
El arzobispo de Burgos, Mario Iceta, ha negado este miércoles ante una jueza de Briviesca las acusaciones presentadas por un grupo de exmonjas del monasterio de Belorado. Lo acusan de coacciones, mala gestión económica y de revelar información confidencial, en una denuncia que fue archivada en un primer momento, pero que ha sido reabierta por orden de la Audiencia Provincial.
Iceta explicó tras declarar que la Federación de Clarisas ha destinado 360.000 euros para cubrir las deudas del monasterio y aseguró que las acusaciones forman parte de una estrategia por parte de las exmonjas, quienes también han presentado otras denuncias contra los ministerios del Interior y de Justicia.
El arzobispo dijo haber respondido con tranquilidad a las preguntas de su abogado, pero se negó a responder a la acusación, ya que considera que el proceso no se ajusta a la legalidad. También defendió que no ha cometido ningún delito porque actúa como responsable legal del monasterio por orden directa del Vaticano.
Aportó documentos y vídeos que, según él, demuestran que su gestión ha sido transparente y adecuada. Dijo tener “paciencia infinita” y aseguró que llegará hasta el final del proceso para demostrar la verdad. Además, afirmó que no tiene nada en contra de las exmonjas y les deseó lo mejor en su nueva vida, en la que han abierto un restaurante y un criadero de perros.
“Ojalá tengan éxito en sus iniciativas”, dijo Iceta, quien recordó que tienen un “medio de vida”, pues recordó que han abierto un restaurante monacal, que además es un alojamiento, junto a un criadero de perros. “Ojalá abran franquicias y el Vips se quede a los pies”, señaló en tono irónico, para añadir también referencias al equipo de fútbol. “No tengo nada contra ellas y les deseo lo mejor en su nueva andadura”, sentenció.
Gastos excesivos
Por su parte, Carmen Ruiz, secretaria de la Federación de Clarisas, consideró excesivos los gastos mensuales del monasterio, que alcanzan los 20.000 euros, y señaló que el número de trabajadores también es muy elevado.
Iceta negó haber gestionado mal los fondos, señalando que han pagado todos los gastos y deudas pendientes, aunque al principio solo encontraron 6.000 euros en las cuentas. También negó haber revelado secretos personales de las exmonjas, afirmando que solo se ha informado sobre cuestiones legales y económicas de las comunidades religiosas, como exige la transparencia de la Iglesia.
Además, indicó que el Estado defiende que las exmonjas quieren cambiar la titularidad de bienes que pertenecen a la Iglesia, lo cual no es legal.
Respecto al juicio, Iceta criticó el ambiente generado, al que se refirió como un “festival”, y señaló que no se cruzó con las denunciantes porque ellas acudieron antes de la hora prevista.
Por último, el abogado de las exmonjas, Enrique Molina, explicó que intentarán apartar a la jueza que lleva el caso de desahucio del monasterio, previsto para la próxima semana, porque consideran que conoce demasiado el entorno local, lo que podría influir en su decisión.