Vecinos y vecinas de El Barraco, durante una de las manifestaciones
“Nos vetan por ser mujeres”: denuncian discriminación en la fiesta de Las Candelas de El Barraco
FADEMUR denuncia que se impide cantar a las mujeres en Las Candelas de El Barraco, una fiesta que aspira a ser declarada de Interés Turístico Regional.
Más información: Detienen a tres hombres por tráfico de drogas con nueve escopetas y dos subfusiles en Ávila
Noticias relacionadas
El 2 de febrero, como cada año, los jóvenes abulenses de El Barraco, se preparan para una de las citas más sentidas del calendario local: la fiesta de Las Candelas.
Una tradición de largo recorrido en la que los mozos del pueblo, vestidos con trajes típicos, entonan coplas en honor a la Virgen de la Piedad.
Hasta ahí, todo parecería dentro de la normalidad. Pero hay un detalle que ha encendido las alarmas: las mujeres, denuncian, siguen vetadas. No pueden cantar y tampoco participar.
La situación ha provocado un revuelo cada vez mayor en la localidad. Tanto, que FADEMUR, la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales, ha alzado la voz para denunciar lo que considera “un nuevo caso de machismo y discriminación en una fiesta popular”.
Y lo hace justo cuando el evento aspira a ser declarado Fiesta de Interés Turístico Regional.
La concejala Raquel Sánchez Estévez lo tiene claro: “La tradición debe adaptarse a los tiempos”.
Y avisa de que la exclusión no solo es injusta, sino absurda. “No hay jóvenes suficientes para mantener viva la fiesta. Han tenido que ir a buscarlos a pueblos vecinos, pero a las chicas del propio pueblo se las deja fuera”, lamenta.
Algunas mujeres de El Barraco ya han empezado a recoger firmas. Otras han solicitado amparo al alcalde, José María Manso González, y al Obispado de Ávila.
Pero, según denuncian, ambos han optado por mirar hacia otro lado. “Se han lavado las manos ante esta injusticia”, afirma la concejala.
Por si fuera poco, la Cofradía organizó una votación entre sus miembros para decidir si se permitía o no a las mujeres participar. La respuesta, negativa.
“Es completamente ilegal, señala Sánchez. No se puede votar sobre algo que va en contra de derechos fundamentales. Las mujeres no pueden ser excluidas de actos públicos”.
Desde FADEMUR recuerdan que este no es un caso aislado. Hay otros festejos en distintas partes del país que arrastran lastres similares: la Vijanera en Silió, el Cipotegato en Tarazona, los Alardes de Irún, el Misterio de Elche o incluso el Descenso del Sella. Tradiciones que, aunque forman parte del patrimonio cultural, perpetúan roles y barreras que muchas generaciones ya no están dispuestas a tolerar.
“El futuro de los pueblos será en igualdad, o no será”, termina FADEMUR.
