La expresión para referirse a Ávila que muchos abulenses odian y que media España no entiende

Es una batalla que muchos libran durante sus vidas con el objetivo de que su lugar de procedencia (ciudad, municipio o provincia) reciba el trato y referencia que merece. Cosas que desde fuera pueden parecer insignificantes o mundanas, pero que por los autóctonos puede significar un ataque directo a su identidad.

Expresiones populares, dichos o refranes que sientan como una puñalada en el pecho cuando son escuchados y que, para los referidos, en ocasiones pueden incluso a ser tomados como una ofensa.

También los gentilicios. Una cuestión que muchas veces va más allá de lo meramente etimológico y que, aunque pueda haber más de uno aceptado, únicamente se concibe una posibilidad por los aludidos o, en su caso, te precisan que el más preciso es un gentilicio en concreto.

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Y esto es algo que ocurre en Ávila, donde son muchos los que se ofenden si no se refieren a los originarios de esta provincia con el popular 'abulense'. Así les gusta a muchos que les llamen y una gran parte del resto de España no entiende muy bien el porqué de esa ofensa.

La Real Academia Española (RAE) concibe que al originario de Ávila se le pueda llamar abulense, pero también avilés. Sin embargo, este último no está tan arraigado e incluso hace unos años suscitó polémica en redes sociales al dar este gentilicio como bueno en un programa de televisión.

La razón principal es la de diferenciarse de Avilés, un municipio de Asturias. También hay quien se refiere a los abulenses como avileños. Y esto es algo totalmente rechazado por los autóctonos porque "avileñas son las vacas", en referencia a una raza.

Además, éste es también un gentilicio, sí, pero del que es perteneciente a Ciego de Ávila, una ciudad de Cuba. Por lo que de esta manera habría también una duplicidad del gentilicio que puede llevar a equivocaciones.

Pero esto no es todo, ya que también existen otras expresiones o estereotipos que molestan a los abulenses. Una de ellas es cuando se hace referencia a la 'sierra madrileña de Gredos', más si cabe cuando este complejo natural abarca cuatro comunidades autónomas distintas y es principalmente característico de Ávila.

La Sierra de Gredos, que es un área protegida como parque regional en la provincia de Ávila, se extiende por Castilla y León, Extremadura, Castilla-La Mancha y la Comunidad de Madrid. Pasa por las provincias de Ávila, Cáceres, Toledo, Madrid y Salamanca y es uno de los enclaves naturales más relevantes de España.

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Asociarlo al centralismo de Madrid no es algo que siente muy bien en tierras abulenses y más al tener en cuenta que muchos de los municipios más importantes, conocidos y característicos de la Sierra de Gredos se encuentran en la provincia abulense.

Una provincia abulense que combate también con otros estereotipos de los que intenta despojarse, como que deje de hablarse de ella únicamente cuando hace frío o nieva. Y es que Ávila se caracteriza por mucho más, ya que cuenta con un gran patrimonio, tanto natural como histórico.

Su riqueza patrimonial llega hasta el punto de que su muralla, las iglesias extramuros de San Pedro, San Vicente, San Andrés y San Segundo son Patrimonio de la Humanidad para la Unesco. Una mezcla que conjuga con la diversidad natural en la Sierra de Gredos y que hacen que Ávila, tal y como defienden los abulenses, sea más que nieve y frío.

Por convicción o no, son muchas las provincias a las que se las ata a expresiones, dichos o estereotipos para referirse a ellas que son detestadas por los oriundos, que por amor a su tierra muchas veces muestran su malestar públicamente al objeto de desterrar todas ellas.