El consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, comparece en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.

El consejero de Economía y Hacienda y portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, comparece en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno. Rubén Cacho ICAL

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Castilla y León moviliza 6,5 millones contra la gripe aviar: 2,1 millones de aves sacrificadas pero sin cierres ni más focos

Carriedo asegura que la Junta está actuando con “agilidad y rapidez para facilitar la vuelta a la actividad, sin perjuicio de las ayudas que puedan llegar desde el Estado o la Unión Europea”.

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La Junta de Castilla y León ha destinado ya 6,5 millones de euros a la aplicación de medidas urgentes frente a la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) durante 2025, con el objetivo prioritario de proteger al sector avícola y garantizar su rápida vuelta a la normalidad productiva.

Estos fondos se han tramitado por vía de urgencia para asegurar una respuesta inmediata y abarcan actuaciones esenciales como el sacrificio sanitario de aves, la destrucción de materiales de producción y la limpieza y desinfección de las instalaciones.

Estas medidas, contempladas en la normativa comunitaria y nacional, buscan tanto evitar la propagación del virus como minimizar su impacto económico.

El portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, ha destacado que estas actuaciones son la base del proceso que permitirá a las explotaciones adquirir nuevas aves y retomar la producción lo antes posible.

Ha subrayado además que el Ejecutivo autonómico está actuando con “agilidad y rapidez para facilitar la vuelta a la actividad, sin perjuicio de las ayudas que puedan llegar desde el Estado o la Unión Europea”.

En el marco de estas actuaciones, la Junta confirmó que han sido 2.114.000 las aves sacrificadas para garantizar el control de la enfermedad. Sin embargo, subrayó que ninguna explotación ha tenido que cerrar, gracias al apoyo económico y técnico desplegado para asegurar su continuidad y futura reposición de animales.

Fernández Carriedo recordó que el impacto económico de esta enfermedad es “doble”: afecta tanto al tejido productivo y al empleo como a los consumidores. Por ello, la Junta considera esencial este esfuerzo económico para mantener la estabilidad del mercado, especialmente en una Comunidad que es una de las grandes productoras de huevos a nivel nacional.

Las consejerías de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Sanidad y Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio trabajan conjuntamente en un grupo de coordinación que realiza el seguimiento continuo de la situación. A ello se suma el contacto permanente con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, con el fin de adoptar de manera conjunta todas las medidas necesarias para minimizar riesgos.

La Junta insiste en la importancia de reforzar las medidas de bioseguridad y mantener una vigilancia activa, al tiempo que recuerda que el virus no se transmite al ser humano a través del consumo de carne de ave adecuadamente cocinada, huevos o productos derivados.

El portavoz resaltó que, gracias a las actuaciones ya emprendidas, la Comunidad lleva un mes sin nuevos focos, aunque advirtió de la necesidad de mantener la prudencia y no relajar los controles. “Este esfuerzo es lo que permitirá que muchas actividades continúen y que el sector avance hacia la recuperación plena”, señaló