Varios pensionistas juegan al dominó en un parque.

Varios pensionistas juegan al dominó en un parque.

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Los jubilados de Castilla y León ya cobran 200 euros más al mes que los jóvenes trabajadores: "Es insostenible"

Sandra Ámez, presidenta del Comité de la Juventud de CyL, alerta: “Los salarios de la juventud en Castilla y León no permiten construir una vida autónoma y digna”.

Más información: Solo el 14% de los jóvenes de CyL logra acceder a una vivienda: la mayoría alquila y el 39% gana menos de 1.000 euros

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Es cierto que cuando se habla de sueldos y de medias, hay uno que sale ganando y otro perdiendo. Sin embargo, está claro que los datos suelen matar a los relatos. En este caso, el de cuánto gana un pensionista en Castilla y León y un joven menor de 30 años da para mucho análisis.

Esta brecha generacional entre jubilados y jóvenes trabajadores se hace cada vez más evidente. EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León ha querido hacer un análisis de la situación, preguntando a los jóvenes de la Comunidad cuál es la situación que se está viviendo.

En Castilla y León, la diferencia entre las pensiones de los jubilados y los salarios de los jóvenes se ha hecho cada vez más evidente. Los datos de 2025 muestran que la pensión media de los mayores de la comunidad autónoma supera, en muchos casos, lo que perciben los trabajadores menores de 30 años en casi 300 euros como máximo, y en un mínimo de 100.

Según las cifras oficiales, los jubilados en Castilla y León cobran una pensión media de 1.313,7 euros mensuales en agosto de 2025, según los datos hechos públicos esta pasada semana por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

Si se considera únicamente la pensión de jubilación, sin incluir otras modalidades, el importe asciende a 1.501,7 euros mensuales.

Y es que el número de pensiones en la Comunidad no deja de subir. En este caso un 1,2% en tasa interanual, hasta las 633.948. Del total, casi dos terceras partes (412.871) fueron de jubilación, con una pensión media que ascendió a esos 1.501,7 euros.

Por incapacidad permanente, fueron 50.324 pensiones (1.201,8 euros); por viudedad, 147.951 (935,6 euros); por orfandad, 18.883 (569 euros); y en favor de otros familiares, 3.919 (803,1 euros).

En un análisis provincializado, se observa que la pensión media más alta se registra en Valladolid, con 1.435,2 euros; seguida de Burgos, con 1.410,9 euros. Le siguen Palencia (1.344,8 euros); León (1.309,8 euros); Soria (1.272,9euros) y Segovia (1.253,3 euros). Cierran Salamanca (1.228,7 euros), Ávila (1.159,2 euros) y Zamora (1.130,1 euros).

Estas cifras se mantienen cercanas a la media nacional y reflejan un incremento interanual significativo, mostrando la relativa estabilidad de las pensiones en la comunidad. Ahora bien, hay que ponerse en el otro lado de la balanza, en el de los jóvenes de Castilla y León.

Sueldo medio de los jóvenes hasta 30 años

Por otro lado, el salario medio de los jóvenes en Castilla y León ascendió a 13.683,40 euros netos anuales (1.140,28 euros netos mensuales), una cifra superior al salario mediano juvenil nacional, que se sitúa en 12.062,59 euros anuales (unos 1.005 euros mensuales), según los datos del Observatorio de Emancipación correspondientes al primer semestre de 2024.

Es decir, 1.140,28 euros netos mensuales frente a esa pensión media en Castilla y León de 1.313,7 euros, pero que se va hasta los 1.501 en la general. Una horquilla de entre los 173 euros a los 361.

En Castilla y León, el sueldo medio general, el de todas las edades, ronda los 25.227 euros anuales, aunque para los menores de 30 años esta cifra suele ser inferior debido a la precariedad laboral y a los contratos de menor duración.

De manera mensual, los jóvenes hasta 30 años perciben generalmente entre 1.200 y 1.400 euros brutos, situándose en muchos casos por debajo de la pensión media de los jubilados de la comunidad, que como hemos visto es de 1.501 euros.

De esta manera, el encarecimiento de la vivienda y la precariedad de los sueldos provocan la peor tasa de emancipación juvenil en Castilla y León con un 14,4% en el primer semestre de 2024, según los datos ofrecidos por el Consejo de la Juventud de Castilla y León.

Estos datos son preocupantes. En Castilla y León, tan dañada por la falta de natalidad, la pensión de los jubilados puede superar el sueldo de los trabajadores más jóvenes, un indicador claro de la situación.

Mientras que los jubilados disfrutan de una estabilidad económica consolidada tras décadas de contribuciones, muchos jóvenes se enfrentan a empleos temporales o con salarios ajustados a sus expectativas de vida y desarrollo profesional.

Ámez: "Así no se puede hacer futuro"

La presidenta del Consejo de la Juventud de Castilla y León, Sandra Ámez Sáez, ha advertido de la situación “insostenible” que atraviesan los y las jóvenes de la Comunidad tras conocerse que las pensiones ya superan en casi 300 euros el sueldo medio de la juventud.

Ámez subraya que “el problema no está en si las pensiones están altas o bajas, sino en que los salarios que percibimos muchas personas jóvenes en Castilla y León no nos permiten construir una vida autónoma con estabilidad y con dignidad”.

Según recuerda, la mediana salarial se sitúa en los 1.140 euros brutos mensuales, mientras que el precio medio del alquiler supera los 650 euros, lo que obliga a destinar cerca del 70% del sueldo únicamente a la vivienda.

Esta realidad, señala, reduce drásticamente el margen para cubrir otros gastos básicos como alimentación, transporte, suministros, salud mental o formación.

La consecuencia directa es el retraso en la emancipación: “La media en España ya supera los 30 años; nos emancipamos cuando dejamos de ser jóvenes, y no es por falta de ganas ni de esfuerzo, sino porque no nos salen las cuentas”.

Ámez Sáez advierte a EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León de que esta situación no afecta solo a la juventud, sino a toda la sociedad: “Una juventud que no puede vivir con independencia, no puede consumir, no puede formar una familia si lo desea, ni contribuir plenamente al desarrollo de nuestra comunidad. Estamos dejando atrás a toda una generación”.

Por ello, reclama un compromiso firme con la mejora de los salarios y la calidad del empleo juvenil. “Apostar por salarios justos para la juventud no es un capricho, sino una necesidad social y económica. El talento, la formación y el trabajo deben tener un valor real desde el inicio de la carrera profesional, sin encadenar becas, prácticas y contratos precarios”.

La presidenta del Consejo de la Juventud concluye que garantizar sueldos dignos es también invertir en el futuro: “La juventud no es solo el futuro, es el presente. Y cuidando el presente, aseguramos el futuro de una comunidad fuerte, consolidada y en la que nadie quede atrás”.