Los accionistas de Parque Empresarial de Portillo aseguraron hoy que la dilación en la recalificación de los terrenos, unido a la crisis financiera del 2008, fueron los motivos que llevaron a la sociedad a desistir de su proyecto de promoción de venta de suelo y naves industriales, para aceptar el ofrecimiento de compra de los terrenos por parte de Gesturcal.

Tanto Francisco Esgueva como Luis Ángel Rodríguez Herrero, socios fundadores de Parque Empresarial de Portillo, para los que el Ministerio Fiscal pide una pena de seis años de cárcel por un delito de violación de secretos en concurso con un delito de tráfico de influencias, declararon hoy en el juicio que se sigue en la Audiencia Provincia del Valladolid por el denominado ‘caso Perla Negra’ y donde también se juzga la compra de las parcelas del malogrado polígono de Portillo, que el interés por las parcelas adquiridas por la sociedad procedió de la Consejería de Economía y Empleo y que el primer contacto se mantuvo con el entonces director general de Industria, Carlos Martín Tobalina.

Además, otro socio de Parque Empresarial de Portillo que declaró hoy fue Luis Antonio Recio, fundador de Cementos la Bureba, que reconoció haber escuchado a sus socios comentar que “debían hablar con el jefe”, en referencia al entonces consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, y con el “vidrios”, para referirse al viceconsejero Rafael Delgado.

En su declaración, Francisco Esgueva justificó el abono por parte de Gesturcal de 1,2 millones de euros a la empresa San Cayetano una vez firmada la compra venta de las parcelas con Gesturcal, debido a que él, a título personal, tuvo que hacer un préstamo de 4,5 millones de euros a Parque Empresarial de Portilllo, al igual que Luis Antonio Recio, que aportó 1,8 millones de euros. Además, preguntado por el pago desde Gesturcal a Urban Proyecta de 4,7 millones de euros, una vez que esta empresa se había desvinculado de Parque Empresarial de Portillo en el año 2006, Esgueva explicó que aún se mantenía vigente la hipoteca que Urban mantenía con Caja España por la compra de parcelas.

Por su parte, a preguntas del fiscal, Rodríguez Herrero explicó que después de la operación con Euronit, cuyas obras acabaron en 2008, Parque Empresarial Portillo contaba con muchas empresas interesadas en instalarse a corto plazo. No obstante, junto a la crisis, indicó que el principal hándicap para cerrar las operaciones era que el plazo para la recalificación de los terrenos era de dos años, cuando la intención de la mayor parte de empresas era instalarse en meses.

A su vez, también confirmó que todas las parcelas que compró Parque Empresarial de Portillo estaban en manos de propietarios con una antigüedad por encima de los 20 años.

En la jornada de hoy también declaró Carlos González Maestro, gerente de Parque Empresarial de Portillo, que además de recalcar que en sus cuarenta años de trayectoria profesional como asesor económico y laboral jamás había tenido una relación con ningún cargo político, aseveró que solo conoció a Rafael Delgado meses después de que se cerrara la operación de venta cuando alguien se lo presentó en un bar. “Maldito fue el día que acepte el cargo”, sentenció González Maestro. En su declaración también explicó que no se cometió ninguna irregularidad por el hecho de la venta de las parcelas a Gesturcal la hiciera Cementos La Bureba y no Parque Empresarial de Portillo, dado que eran los mismos socios.

El juicio continuará el próximo lunes, día 29, cuando es previsible que comience la exposición de conclusiones definitivas.