Ya está aquí la Campaña de la Renta 2018 que comenzará el próximo 4 de abril y que incluye como novedad la posibilidad de que los contribuyentes puedan acceder a sus datos fiscales y al número de referencia desde este 22 de marzo.

EFPA España ha elaborado un documento, como hace cada año, que nos ayuda a responder a algunas preguntas habituales incluyendo consejos básicos que nos ayudan a evitar errores comunes y a sacar partido a nuestro dinero.

1. Plazos para realizar la declaración de la renta

La campaña arranca el próximo miércoles 4 de abril y como novedad, los contribuyentes pueden acceder a sus datos fiscales. Este año se ha incorporado además una nueva aplicación para smartphones que permitirá realizar la declaración al contribuyente sin tener que meterse en el ordenador, desde su teléfono móvil.

2. Novedades. Transmisión de derechos de suscripción preferente. Se añade un nuevo apartado para consignar las ganancias y pérdidas que se derivan de la transmisión de derechos de suscripción. Nueva información adicional a consignar en la declaración. Se incluye el nuevo anexo “C” en el que el contribuyente debe recopilar la información de trascendencia fiscal en ejercicios futuros.

3. Quién tiene que realizar la declaración. En términos generales, los contribuyentes que tengan ingresos inferiores a 22.000 euros cuando procedan de un solo pagador están exentos de presentar la Declaración. Merece la pena, eso sí que repases el borrador ya que te puede salir a devolver, sobre todo, si te aplicaron retenciones altas.

4. ¿Y la deducción por alquiler de vivienda? No afecta a todos aquellos contribuyentes que firmaron sus contratos antes del 1 de enero de 2015.

5. Al realizar el borrador de la renta debemos tener muy en cuenta los cambios personales que se hayan producido en nuestras vidas y que puedan afectar a la declaración como un cambio de domicilio, de estado civil, o algún nacimiento de hijos, entre otras cosas.

Ten muy presentes estos aspectos para realizar correctamente tu declaración de la renta y no tener sustos de última hora.