El mensaje al que estamos acostumbrados de trabajar no dice nada. Este fin de semana que si por delante o por detrás. Debemos hacer más estudios sobre las prácticas sexuales de este país. El teatro de la niña del exorcista continua. Un pasito más de la política de medio pelo a la que estamos acostumbrados... O cambia el panorama político o muy mal va evolucionando la sociedad española, si es que queda algo de española. Parece que sólo podemos hablar de psicología vulnerable, mezcolanzas sociales sin ninguna raíz que las sostenga en el suelo con dignidad humana. Las garantías jurídicas para los ciudadanos cada día están más en cuestión frente a los delincuentes y demás farándulas.
El rearme generalizado en todas partes del mundo no barrunta nada bueno. Francia que quiere aparecer como una de las hermanas de la caridad continua explotando en África a 14 países para los que imprime la moneda, forzando a trabajar a niños y demás en las minas para fabricar aparatos tecnológicos y baterías. ¿Cómo explicar a los ciudadanos que tienen que gastarse cuarenta mil euros en un coche eléctrico, si la mayoría de los mismos no sobre pasan los mil euros mensuales? En caso de necesitar dos coches ochenta mil. Tengamos sentido común. Aunque cada vez escasea más. China va por los mil setecientos millones de habitantes. Imaginemos los bocadillos de grillos que habrá que comer para contrarrestar la huella de carbono que producen porque nosotros debemos de ser ecosostenibles y resilentes. De momento China dispara la apertura de centrales de carbón y echa por tierra la lucha de Europa contra el dióxido de carbono. En Europa vamos haciendo el tonto del bote, encareciendo y complicando la vida de los europeos. Alemania hace tiempo que ha perdido el rumbo y detrás vamos todos camino del abismo.
Los fines de semana parece que ya no son para descansar pues abres el televisor y te encuentras lo que no quieres oír como el que las pensiones hay que subirlas para que los jubilados puedan pagarle la comida o el agua o la luz a sus hijos y nietos. Los abuelos ya no quieren las pensiones para ellos. Economía de pagas y miseria y siguen aplaudiendo. Sería muchas veces mejor que se callarán para no quedar en evidencia. En Cataluña una región donde se va camino de la autodestrucción se fomenta y normaliza el salafismo, es la transición de la democracia y el orden constitucional hacia el islamismo, que se va introduciendo en las instituciones y controla cada día más los barrios. En Corea del norte se empieza a respirar más libertad que en Cataluña donde se va a empezar a multar a los niños por disentir de la verdad o memoria oficial. La democracia la hay que defender desde la educación, en España es desde donde se empezó a degradarla. La educación es de todos, no de una ideología y debería tener un rango constitucional en su ley marco, consensuada y ratificada por profesionales y técnicos, no por políticos.
La duración de un conflicto bélico va en función del cumplimiento de la misión, sin embargo, un comandante no debe esperar que sus soldados den su vida indefinidamente. Ucrania sin duda va a caer, es un callejón sin salida. Los moldavos se manifiestan contra la UE y la OTAN. China anuncia que actuará con determinación para reunificar su país con Taiwán. Letonia pide expresamente a los países miembros de la OTAN que envíe aviones de combate para intervenir en Ucrania. La escalada empieza a ser preocupante. Cuando la OTAN con la aquiescencia de la UE nos metan de lleno en el conflicto, nos acordaremos de todo el santoral. Todavía hay gente que se cree que las guerras se empiezan porque alguien se levanta por la mañana con mal pie.
En las próximas elecciones tocará elegir entre la olla podrida y el cocido madrileño. Algunos se comprometieron a no cobrar más de tres salarios mínimos, ahora ya es historia. Filosofía de mindundi de charco. La mayor parte de los ciudadanos seguramente que agobiados por el día a día, parece que no son muy inteligentes, temen a la responsabilidad y lo único que desean es que no les digan mucho lo que tienen que hacer, con tal de que nadie interfiera en su modus vivendi. Pan para hoy y hambre para mañana. Cada día vendemos más nuestra parcela de libertad para que nos dejen mirar para otro lado. ¿Qué más nos da? De momento trescientas cincuenta y cinco empresas españolas establecidas en Marruecos, de momento quieren que miremos hacia Ferrovial. Cada vez más estupidez, prohibiciones y menos libertad. Los aires que vienen no parecen muy saludables así que tocará seguir yendo a por churros para sentirnos libres, hasta que los prohíban...