La fábrica de Nissan en Ávila, que cuenta con una plantilla de 300 trabajadores, continúa los hitos marcados en el plan industrial suscrito en 2017 que prevé transformar la planta en una de recambios.

Así lo ha asegurado hoy el director de la planta, Fernando González, tras la reunión que ha mantenido con el comité de empresa y representantes de la Junta de Castilla y León.

Una reunión que se ha mantenido a petición de los trabajadores y en la que se ha revisado la situación del plan industrial de la factoría abulense.

Tal y como ha explicado la delegación de Nissan en este encuentro, con los trabajos de introducción de las nuevas piezas, Nissan ha mantenido el compromiso de recuperación del empleo que adquirió en el Plan Industrial. Actualmente hay 300 personas trabajando en esta planta de Ávila, en línea con el objetivo previsto en el acuerdo social de 2017.

El proyecto de transformación de la fábrica en un centro de recambios se encuentra en plena fase de despliegue. La compañía ha introducido ya la fabricación de recambios para varios modelos de Renault y Nissan.

Asimismo, Nissan Ávila ha arrancado con otros proyectos no incluidos en el plan original, con el objetivo de dotar de mayor carga de trabajo a la planta; como por ejemplo, el proyecto con Renault Retail Group (RRG), filial comercial de Renault, para la adecuación de vehículos de ocasión multimarca o la preparación de paragolpes para la postventa.

Esta transformación se acelerará este año una vez que se concluyan dos infraestructuras clave: el almacén logístico y la nave de estampación. En cuanto a la primera, el pasado mes de noviembre comenzaron en el enclave CyLoG de la Junta de Castilla y León en Ávila las obras de construcción del almacén, que contará con 21.000 m2 de superficie.

Si bien sus dimensiones serán menores a las planificadas inicialmente en el polígono de Vicolozano, este cambio no supone una rebaja de los objetivos de industrialización de la planta, tal y como el equipo directivo de la misma ha explicado en varias ocasiones a la representación de los trabajadores y a la plantilla del centro.

Por otra parte, la nueva planta de estampación contará con 23.000 metros cuadrados (12.000 m2 más respecto a los inicialmente previstos)-, lo que permitirá instalar más prensas, si en el futuro se requieren, para seguir aumentando la capacidad productiva de la planta. 

Además, Nissan ya ha invertido los 40 millones de euros comprometidos en el plan industrial inicial, cantidad a la que la compañía prevé sumar otros 15 millones de euros adicionales (un 35% más) hasta llegar a un total de 55 millones de euros invertidos entre 2018 y 2022.

Así las cosas, la compañía entiende que "es hora de llegar a un acuerdo sobre el convenio colectivo que permita mantener a la planta en los márgenes de competitividad para atraer proyectos y nuevas actividades que permitan completar con éxito el plan de transformación del centro", según han informado fuentes de la dirección de Nissan Ávila a este periódico.

El comité de empresa disiente

Durante la reunión que han mantenido hoy a tres, el comité de empresa ha vuelto a insistir en los "numerosos incumplimientos en los que está incurriendo la empresa, así como las lagunas que observamos para el desarrollo futuro del plan industrial", tal y como recoge un comunicado al que ha tenido acceso este periódico.

Los representantes de los trabajadores consideran que Nissan lo que ha hecho hoy es "intentar justificarse ante un Gobierno regional que ha manifestado que para ellos lo más importante es el cumplimiento con los niveles de empleo marcados en los acuerdos y de cara a futuro".

Una reunión en la que, según fuentes sindicales, la Junta "ha querido dejar muy claro que la ampliación en dos años del plan industrial prioritario de Nissan en Ávila es algo oficial y cerrado, y recordando que esta ampliación tiene también efectos sobre la obligación por parte de la empresa de mantener, en al menos, cinco años más el nivel de empleo desde el año 2026".

El comité de empresa considera que "finalmente y como consecuencia de esta reunión y la mediación de la Junta de Castilla y León, la empresa ha mostrado su voluntad de volver a sentarse en la mesa de negociación del convenio una vez haya pasado la Semana Santa".