Se ha propuesto hacer de la economía social uno de los motores que dinamicen Castilla y León. Esas empresas que llevan en su ADN el objetivo de mejorar la vida de los ciudadanos poniendo a las personas en el centro y el fin social por encima del capital, además de una rentabilidad que les haga fuertes y les permita crecer empresarialmente para seguir generando riqueza.

Un nicho de empleo que permite impulsar la economía desde empresas estratégicas y hacer frente al reto sociodemográfico de comunidades especialmente castigadas por la despoblación, como es el caso de Castilla y León.

Este tejido productivo es una de las fortalezas con que cuenta la Comunidad para hacer frente al desafío de fijar población en el entorno rural (muchas de ellas se sitúan en pequeños municipios), y contrarrestar las consecuencias de una recesión prevista para el primer trimestre de 2023 en España y en buena parte de los países de la zona euro.

Precisamente en un momento en el que todo apunta a que el próximo invierno será especialmente duro para las familias y las economías europeas, la economía social se presenta como un activo al alza, estructurado en cuatro principales familias: cooperativas, sociedades laborales, centros especiales de empleo con un especial compromiso con la empleabilidad de colectivos vulnerables, y empresas de inserción laboral.

Mariano Veganzones, consejero de Industria, Comercio y Turismo de la Junta, entregará mañana viernes en la localidad vallisoletana de Arroyo de la Encomienda los Premios de Economía Social y al Cooperativismo que reconoce las mejores empresas de este ámbito en la Comunidad que destacan por su capacidad innovadora, su apuesta tecnológica y su facilidad para consolidar empleo.

Unos galardones que en esta ocasión han recaído en la cooperativa de vacuno y ovino salmantina Dehesa Grande, en la bodega burgalesa Tierra Aranda, en la palentina Ingemov Soluciones Industriales SLL y en el Ayuntamiento de Salamanca, este último por su destacada contribución al desarrollo de este modelo de economía en la capital charra.

EL ESPAÑOL-Noticias de Castilla y León habla con el consejero para conocer de primera mano cuáles son las líneas que permitirán impulsar esta economía 'solidaria' que da empleo en Castilla y León a cerca de 3.744 personas, según datos de la Confederación Empresarial Española de Economía Social (Cepes), y que factura casi 2.000 millones de euros en la Comunidad.

Consejero, ¿en qué medida se materializará ese especial apoyo a las empresas de economía social y al cooperativismo?

Vamos a aprobar una estrategia específica de economía social y cooperativismo en Castilla y León. Será la primera que va a tener Castilla y León para impulsar este modelo productivo desde un punto de vista también político, porque el impulso hasta ahora no había ido más allá de estructurar ayudas.

Con la entrada de Vox en esta Consejería se va a apostar de verdad por la economía social. Para nosotros es la economía del futuro y más aún en los territorios con problemas de despoblación, porque suponen un anclaje de la población en torno a estas empresas que se asientan en Castilla y León.

Pero ¿en qué sentido se va a ir más allá del apoyo en subvenciones?

Hasta ahora esas políticas han estado muy centradas en centros especiales de empleo y en cooperativismo. Ahora estamos trabajando en una estrategia transversal a toda la Junta de Castilla y León y a toda la sociedad.

Tenemos muy buena relación con todas las organizaciones de la economía social, con las que nos estamos reuniendo y que nos están aportando muchas propuestas de gran calidad.

Se está trabajando para crear a través de la UVA una cátedra de economía social y cooperativismo. Es un hecho que el cooperativismo es la parte más importante de economía social por el volumen económico y de trabajadores que aporta.

El 75% de este modelo productivo en Castilla y León son cooperativas. Queremos unir esto con la universidad para que académicamente se ayude a elaborar los estudios necesarios para saber después qué políticas son las más eficientes.

De hecho, hemos apostado por incrementar la inversión de la Dirección de Economía Social que pasará de disponer de 34 millones de euros a casi 50 millones para el próximo ejercicio. Estas empresas son vertebradoras de la economía rural

De hecho, este viernes 4 de noviembre se entregan los Premios a la Economía Social y al Cooperativismo en Arroyo de la Encomienda...

Sí, se entregan a empresas que han destacado por su trayectoria y labor. Son empresas que en muchos casos vertebran la economía rural y que tendrán un peso mucho más importante a partir de ahora en Castilla y León.

La economía social ha de tener una mayor penetración en la sociedad. Lo está en la zona del noreste, como en Cataluña, y queremos que estas figuras de la economía social se desarrollen precisamente en comunidades con mayores problemas de despoblación. Ése es uno de nuestros retos y por lo que estamos trabajando.

Hay que apostar por impulsarla en las zonas de interior y noroeste de España también, que es donde no han tenido esa ayuda, y son fundamentales para crear riqueza y asentar población. Sin embargo, la configuración de las comunidades autónomas ha implicado a una descompensación social y económica.

Se trata de un tejido productivo que hay que impulsar, proteger y potenciar, además de por el empleo de calidad que generan, por su labor en muchas ocasiones de inclusión social. 

En este aspecto, me gustaría adelantar que estamos preparando alegaciones al anteproyecto de Ley de ayudas al Empleo del Ministerio de Trabajo que se ha presentado sin consultar con nadie y que atenta gravemente contra las personas con discapacidad en la economía social.

En este anteproyecto de ley las ayudas al empleo temporal desaparecen, así que nos hemos reunido con las asociaciones que defienden los intereses de este colectivo para presentar estas alegaciones en la conferencia sectorial del Ministerio de Trabajo que tendrá lugar la semana que viene, porque no es de recibo que les hagan esto.

El panorama económico es complicado, consejero. Ya se habla sin tapujos de recesión. Sin embargo, los datos del último trimestre del paro en Castilla y León son muy positivos y se siguen creando empresas...

Así es. Castilla y León ha bajado por primera vez del 9% de tasa de desempleo desde 2008 (por debajo de los 100.000 desempleados) mientras en el resto de España subía un 2% en el último trimestre. 

Son datos que reflejan que la economía se mueve por dinero, pero el dinero se mueve por la confianza. La conformación del Gobierno de Castilla y León con Vox ha creado la confianza de que aquí apostamos por ser eficientes en el gasto y dedicar el dinero público a lo que se debe dedicar, además de poner en duda toda inversión que no sea rentable y que no vaya a los pilares de educación, sanidad, servicios sociales y empleo.

La entrada de Vox ha creado esa seguridad jurídica y confianza dentro de los agentes económicos, que se ve reflejada en los datos. Es verdad que llevamos poco tiempo, tan sólo seis meses, pero en España, los datos son diferentes: una tasa de paro casi cuatro puntos superior a la de Castilla y León.

La economía se mueve más por esa confianza. Tenemos el mismo ejemplo en Educación: Castilla y León es líder según el Informe Pisa, pero gastando menos. Las cosas no pasan por casualidad. Y esa confianza que genera un gobierno conservador, de centro derecha, que aporta seguridad jurídica, que es fundamental para que un empresario decida abrir su negocio, se refleja directamente en las empresas que invierten allí donde hay confianza y estabilidad.