Este jueves, Míriam Saavedra visitó Sálvame para contar lo mal que lo está pasando. Su familia, en Perú, se ha contagiado de COVID-19, y explicó que su padre está “muy grave”. “No hay oxígeno, no hay oxímetros… por favor, copiad lo que se está haciendo aquí, la gente se está muriendo” relataba la autoproclamada Princesa Inca.

“Nos están tomando el pelo, los hospitales están saturados, la gente se está muriendo, mi padre se está muriendo”, seguía explicando la ganadora de Gran Hermano VIP. “No puede respirar, no hay atención. Por favor, no nos tomemos a broma esto” seguía pidiendo Saavedra, mientras narraba cómo ha fallecido un tío de 50 años. “El coronavirus no es un juego, señores”, lanzaba ante la cámara.

“¿Te han llegado a decir que tu padre está a punto de fallecer?” le preguntó Kiko Hernández, a lo que ella respondía afirmativamente. Justo después, Víctor Sandoval le enseñaba un teléfono móvil a Míriam con un mensaje, y Kiko le decía a la invitada “Que dice que acaba de fallecer tu padre, lo dice tu representante. Llama por teléfono”.

Miriam se descompuso y salió del plató buscando su móvil. La cámara la seguía, mientras un rótulo señalaba que “El padre de Míriam Saavedra podría haber muerto y ella está tratando de confirmarlo desesperadamente”. Víctor Sandoval por un lado, y ella por otro, intentaban contrastar la información. Finalmente, todo fue un malentendido, y aunque el hombre sigue grave, no había muerto.

El reproche a Makoke y Marta López

En otro bloque del programa se ofreció una pieza en la que se narraba cómo Makoke junto a amigas como Marta López han acudido a una fiesta en Marbella, en un Festival, e ilustraron la información con un vídeo subido a las redes sociales. En la imágenes un grupo de amigos aparecía juntos, sin respetar la distancia de seguridad ni usando mascarilla, abrazándose, con las caras juntas.

En ese sentido, Kiko Hernández, que ejercía de presentador, lanzó un mensaje de reproche. “No es fiscalidad, ya tendremos tiempo de salir de fiesta, de reírnos, pero no volvamos a mes de marzo, por favor”, aseveró. “Me parece de vergüenza que cuando están diciendo que cada vez hay más infectados, que se van a saturar los hospitales… irnos de fiesta a pegar la carita el uno con el otro y luego publicarlo en redes sociales, me parece no estar en este mundo”, criticó, para añadir que “no queremos ser ejemplo de nada ni queremos decirle a nadie cómo hacer las cosas pero aquí hay que decir las cosas como son”.