Imagen de 'Poco Ortodoxa' (Netflix)

Imagen de 'Poco Ortodoxa' (Netflix)

Televisión

La historia real de 'Poco Ortodoxa', la serie de la que todos hablan

La ficción está basada en la vida de la escritora de la novela, Deborah Feldman

23 abril, 2020 09:27

“Dios esperaba demasiado de mi”, así es como Esther Shapiro, la protagonista de Poco Ortodoxa justifica el por qué de sus decisiones. La serie sigue los pasos de Esty, una joven de 19 años que escapa de su vida en una comunidad judía ultraortodoxa de Brooklyn, en la que se encuentra presa de un matrimonio concertado, para volver a empezar en Berlín.

Serie del momento en Netflix, la ficción está basada en el best seller de Deborah Feldman, Unorthodox: the scandalous rejection of my hasidic roots, traducido como “El escandaloso rechazo de mis raíces jasídicas”.

La trama de ambas historias se separa en Berlín

En esta novela, la autora relata una experiencia similar a la que la protagonista vive en la serie. De hecho, el retrato de la comunidad religiosa judía ultraortodoxa de Williamsburgh, del pueblo Satmar (Nueva York), está basado en las memorias de Feldman, quien creció allí.

Las costumbres, el estilo de vida y la ideología de esta comunidad, tal y como se muestra en los episodios, es un reflejo de la infancia y la adolescencia de Feldman. La trama de ambas historias se separa en Berlín. Las dos se mudaron allí, pero a partir de ese momento el recorrido de Esty es inventado, aunque siguiendo las claves del libro.

Fieldman, como Esty, fue criada por sus abuelos, ambos supervivientes del Holocausto, ya que su madre había sido desterrada por la comunidad y su padre sufría de una discapacidad mental. Como todas las mujeres de la comunidad, le fue prohibida una educación típica estadounidense, hablaba en yidis y se le crío para ser esposa.

Tenía prohibido visitar la Biblioteca Pública, pero escondía libros bajo su cama por temor a que su familia sospechara de su creciente curiosidad por el mundo, de la misma manera que Esty ocultaba su amor por la música. Siguiendo la educación que le había dado su abuela, la joven también se vio atrapada en un matrimonio concertado cuando tenia 17 años.

El enfrentamiento a un Moishe

Además, en la realidad, Feldman también tuvo que enfrentarse a un Moishe, al que también expulsaron. Pero en este caso, en vez de ser un primo matón que va en su busca, intento violarla en un sótano. Sin embargo, poco después, la alemana logró vengarse al impedir que volviera a casarse. Y es que, cuando la llamaron para pedirle referencias acerca del primo, y así cerrar el casamiento, no dijo precisamente cosas positivas.

Tal y como se ve en la serie, la autora también tuvo dificultades para consumar el matrimonio y sufrió presiones sociales como consecuencia de lo que le diferenciaba del resto, tanto de su marido como de su familia. Esto se debe a que la mayor desgracia social en esta comunidad es la infertilidad hasta el punto de ser vistas como completamente inútiles, sin propósito y sin valor.

En Poco Ortodoxa, la protagonista descubre que está embarazada el mismo día que su marido le pide el divorcio, lo que se convierte en el detonante que hace que la joven tome la decisión de huir hacia Alemania, donde vive su madre. También es el momento cuando se encuentran diferencias entre la vida de ambas, aunque guardando ciertas similitudes.

El arte, el nexo en común

Feldman dio a luz a su hijo en 2006, lo que significó un punto de inflexión con respecto a su permanencia en la comunidad. Dando un paso hacia la libertad, la escritora mintió a su marido diciéndole que quería estudiar empresariales con la intención de controlar mejor sus ingresos. Es por eso por lo que se trasladaron de Williamsburg a Yonkers, donde estudió literatura en Sarah Lawrence College. Eligió este título universitario con la intención de buscar una conexión con el mundo exterior.

El arte ayuda a ambas a abrir la mente y querer adentrarse en otro tipo de vida

A través de los estudios del arte se mantiene la conexión entre Feldman y su personaje ficticio. Gracias a la literatura, y Esty gracias a la música, ambas consiguen ir reconstruyendo su camino y ampliar su circulo social, lo que les ayuda a abrir la mente y saber que quieren adentrarse en otro tipo de vida, dejando la suya atrás.

El gran paso que indicó hacia donde quería orientar su vida se vio reflejado cuando comenzó a vestir con vaqueros y tacones altos, rompiendo así, el estricto código de vestimenta jasídico, y a la vez con la comunidad.

Incluso creó un blog anónimo, por temor a que su marido la descubriera, bajo el nombre Hasidic feminist. Este nombre indicaba su voluntad hacia el cambio, ya que ser jasídica y feminista es completamente contradictorio e imposible. Gracias a que sus publicaciones llamaron la atención, una editorial le ofreció un contrato del que salió el libro en el que se basa Poco Ortodoxa.

Tras tres años descubriendo lo que Sarah Lawrence le ofrecía, la joven quiso divorciarse y mudarse junto a su hijo a Manhattan, y luego a Alemania. Después de tomar la decisión que cambió su vida por completo, a sus 33 años, la escritora sigue haciendo su vida en Berlín.

Una posible continuación

Al hacer oficial su marcha, la autora vivió de casa en casa durante unos meses y consultó con abogados para asegurarse de que no podía perder la custodia de su hijo. Desde ese momento, Feldman cortó toda relación con su familia, a excepción de su exmarido, cuando años después también abandonó la comunidad.

Debido a esto, miembros de la comunidad ortodoxa han arremetido contra ella con la publicación de un blog titulado Deborah Feldman Expuesta, en el que se dedican a “exponer las mentiras y las invenciones” de su historia.

Además, tras la publicación de su novela, recibió amenazas por parte de quién fue su comunidad. Incluso recibió una carta en la que su familia le decía que habían preparado su tumba, impacientes de bailar sobre ella, a la vez que le aconsejaban que se suicidara.

La mejor manera de contestar a estas críticas fue publicando en 2015 una segunda parte de su novela bajo el nombre de Exodus: A Memoir. En ella, Fieldman da un salto de cuatro años para relatar cómo vivió nuevas experiencias alejada de Williamsburg: criar a su hijo en un mundo "real", buscar el amor, un viaje por Europa para rememorar la vida de su abuela durante el Holocausto...