Cristina Cifuentes no será Presidenta de la Comunidad de Madrid hasta este miércoles, pero el pacto con Ciudadanos para asegurarse la investidura le ha asegurado su primer error en Telemadrid. El acuerdo cuenta con una serie de puntos en los que ambos partidos se han puesto de acuerdo, entre ellos una necesaria renovación de Telemadrid.

Esta idea es algo que muchos madrileños esperábamos desde hace tiempo. La autonómica pública lleva años hundida por culpa de los gobiernos anteriores del Partido Popular, con Esperanza Aguirre e Ignacio González al frente, y resulta extraño ver que es el mismo partido el que quiere despolitizarla.

Cristina Cifuentes se ha mostrado a favor de la despolitización de Telemadrid, y es algo para aplaudir

Sin embargo, Cristina Cifuentes se ha mostrado a favor de esta idea, y es algo para aplaudir. Los programas dejarán de ser partidistas en favor de los populares, al menos en el planteamiento sobre papel que han pactado Ciudadanos y la nueva Presidenta.

Pero en ese pacto hay un error de bulto que no deberían haber cometido: ponerse un objetivo inalcanzable de cara a los ciudadanos madrileños. El acuerdo presenta la intención de "establecimiento de una carta básica, a semejanza del modelo de gobernanza de la BBC, como guía a los principios objetivos que perseguirá el ente como servicio público, garantizado su pluralidad".

Nombrar a la BBC como ejemplo siempre es el primer paso para el fracaso

Como intención es buena, la mejor. Pero nombrar a la BBC como ejemplo siempre es el primer paso para el fracaso, ya que la cadena británica es el ejemplo de lo que deberían ser todas las públicas y ninguna termina consiguiéndolo.

Ojalá Cifuentes logre convertir Telemadrid en la BBC: en gobernabilidad, contenidos y principios. Pero la experiencia hace ver que en España nunca se ha conseguido tal cosa.

Este pacto hace que la lupa con la que se mire a partir de ahora Telemadrid sea mucho mayor, algo que debería ser siempre así en todas las públicas. Pero el PP de Madrid y Ciudadanos se han puesto un listón con el que continuamente se va a comparar, y probablemente sea para mal aunque las intenciones sean buenas.

La BBC es mucha BBC. Sus contenidos recorren las televisiones de todo el mundo y sirve como ejemplo de cómo debería gestionarse un ente de estas características. Tanto es así que los británicos pagan un canon anual por tener una cadena pública de este nivel, algo aceptado por la calidad que ofrece su programación.

Cifuentes tiene en su mano aniquilar la herencia recibida de sus compañeros de partido, y cualquier mejora será recibida con los brazos abiertos. Pero la comparativa con la BBC hará que el foco no sea solo de dónde viene Telemadrid sino adónde se prometió que iría en esta nueva etapa.