La consecución del Mundial de fútbol 2023 ha vuelto a poner de manifiesto el poder que tiene el deporte femenino en nuestro país. El triunfo de Aitana Bonmatí, Jenni Hermoso, Olga Carmona y compañía no sólo hay que valorarlo como un éxito deportivo como tal, sino que se trata de un paso más en la histórica lucha de las mujeres por la igualdad. Antes, estaba mal visto que las niñas jugaran al fútbol en el patio. Ahora, ganan Mundiales.

Cada vez son más las deportistas españolas que consiguen logros en competiciones internacionales. Las 'guerreras' de balonmano, la selección femenina de baloncesto, Carolina Marín en bádminton, la karateka Sandra Sánchez o la piragüista Maialen Chourraut son buenos ejemplos de los últimos años. Pero todavía queda mucho camino por recorrer.

Centrándonos en el fútbol, poco a poco vemos avances. Y aunque de forma ocasional las cadenas de televisión informen sobre la liga femenina, los titulares y las portadas se los siguen llevando los hombres. En este sentido, por cierto, es de justicia reconocer la labor de servicio público que viene haciendo Televisión Española por visibilizar el fútbol femenino.

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Uno de esos progresos que estamos viendo en pro del fútbol femenino lo encontramos en El chiringuito, la tertulia que presenta cada noche Josep Pedrerol en MEGA. Sí, en El Chiringuito. El presentador catalán se ha rodeado de mujeres para hablar del polémico beso que Luis Rubiales propinó a Jenni Hermoso en la ceremonia de entrega de trofeo en el Mundial.

Si por algo destaca Pedrerol, además de ser un animal televisivo que controla a la perfección los tiempos, es por entender muy bien el sentir de la sociedad. Y así lo ha reflejado en los últimos días en su programa, donde no ha tenido ningún pudor en reconocer que no vio la gravedad de lo sucedido con Rubiales, pero también por dar una mayor presencia a mujeres.

Mucho se la ha criticado a El chiringuito en los últimos años porque el equipo de la redacción está confeccionado mayoritariamente por hombres. Pedrerol ha acertado a la hora de dar voz a mujeres periodistas para hablar de un asunto que les concierne en una tertulia que casi siempre monopolizan Tomás Roncero, Cristóbal Soria, Lobo Carrasco, Petón o José Luis Sánchez. 

Más allá de Carme Barceló o Cristina Cubero (regresó a El chiringuito hace justo un año cinco años después de su desencuentro con Pedrerol) como tertulianas históricas, el papel de la mujer en el programa tan sólo residía en encargarse de leer los mensajes que los espectadores escribían en las redes sociales. Irene Junquera, Laura Gadea, Sandra Díaz se encargaron en el pasado, mientras que ahora, ese rol, lo tiene Ana Garcés. 

La lista de colaboradoras ha ido aumentando en los últimos tiempos. Las presentadoras de los deportes de Antena 3, Rocío Burgos y Angie Rigueiro pasaron a tener una silla de forma ocasional en el programa. Lo mismo ocurrió con Carmen Colino, del diario AS. Y en las últimas jornadas, también han acudido las periodistas de laSexta Andrea Segura y Elisa Lasso. 

Así pues, este mismo lunes, los espectadores de El chiringuito vieron un interesante debate sobre el asunto, en el que se expusieron discursos feministas. "¿Por qué muchas mujeres hemos tenido que soportar que nos tocaran el culo en la discoteca y no hemos podido decir nada? ¿Por qué hemos tenido que soportar que un superior te sobe la cintura?", se preguntaba Rigueiro.

Además, Carmen Colino opinó lo siguiente: "Como ciudadana y como mujer, el término agresión sexual en el concepto beso es muy fuerte. A lo mejor hay que poner otro calificativo, que está muy mal, que es punible, que es denunciable y que hay que juzgarlo, sí. Pero entendemos como agresión sexual otra cosa". "Te van a condenar según el delito que cometas. Lo que está suponiendo este caso es un ejemplo de lo que muchas mujeres tienen que pasar en su vida laboral y se está ejemplificando con este caso", aseguró Andrea Segura.

Y en la misma línea se mostró este martes Isa Romero, la periodista enviada a Motril. "Tristemente, las mujeres hemos normalizado tanto estas situaciones que cuando ocurren no eres consciente de lo grave que es", dijo mientras que Carme Barceló señaló que "gracias al caso Rubiales, muchas personas que han pasado por esto se sentirán más fuertes para decirlo".

Así las cosas, el reto que tiene Josep Pedrerol es si continuará dando voz a mujeres cuando el caso Rubiales caduque. Por el momento, el comunicador catalán ha dado voz a discursos y conceptos feministas que sirven para aplacar las actitudes más machistas y concienciar así a su audiencia, mayoritariamente compuesta por varones.