La entrega de este domingo del programa Salvados, de laSexta, volvió a estar dedicado al hundimiento del buque Prestige en las costas gallegas en el año 2002. Una tragedia que tiñó sus playas de chapapote, en lo que está considerado uno de los desastres ecológicos más graves de la historia de España.

Una de las cartas más potentes del espacio que conduce el periodista Gonzo fue el localizar en Grecia al capitán del navío, Apostolos Mangouras. Lo llamativo del caso es que muchos daban por muerto a este hombre, pues Daskalakis Themistoklis, presidente de la Asociación de Capitanes Jubilados griegos, le dijo a Gonzo que falleció hace dos años. Y a pesar de ello, defendió a Apostolos, asegurando que “los hundimientos pasas, pero lo que ocurrió después fue de las autoridades que no hicieron caso al capitán”.

Finalmente, el programa encontró a Mangouras y pudo hablar con él. El capitán explicó que las autoridades españolas no le trataron bien, pero sí la sociedad de nuestro país. “Quiero dar las gracias a todos los que me ayudaron”, dijo en ese sentido.

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Este domingo precisamente se cumplía el 20 años del hundimiento del Prestige, un buque monocasco liberiano, operado bajo bandera de las Bahamas, que se hundió frente a Galicia, con 70.000 toneladas de fuel en su bodega. El capitán pidió auxilio después de que una ola abriese una brecha en el lateral del barco.

Una tragedia que acaparó la atención de todos los medios de comunicación, incluida, por supuesto, la televisión, y entonces se señaló a Mangouras como posible culpable, al ser un capitán insubordinado. Cuando llegó a tierra, el capitán fue detenido por la Guardia Civil.

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En este sentido, cabe recordar cómo la tragedia del Prestige incluso caló en la nochevieja televisiva. Telecinco dio la bienvenida al año 2003 en una retransmisión desde la localidad de Muxía, uno de los pueblos más afectados por el vertido. Allí, doce barcas se iluminaron a la medianoche del 31 de diciembre en mitad el mar para que los espectadores se comiesen las doce uvas, acompañados de una retransmisión de Mercedes Milá, y que fue un gesto de solidaridad con todos los gallegos.