Este martes TVE celebraba un importante aniversario. La torre de telecomunicaciones Torrespaña, conocida popularmente como el Pirulí, cumplía 40 años, pues comenzó oficialmente a funcionar el 7 de junio de 1982. Una construcción que se erigió con el fin de ofrecer una buena señal del Mundial de Fútbol de España de aquel mismo año.

Con el paso del tiempo, Torrespaña amplió sus funciones, y permite llevar la señal a los principales puntos de difusión del país, y es centro emisor de Madrid. Allí se gestó la primera red de distribución de televisión en Europa, y fue el centro de las primeras emisiones de radio digital y de televisión digital terrestre.

Para conmemorar la fecha, Ana Blanco subió hasta lo más alto de Torrespaña para despedir el informativo de La 1, ofreciendo unas vistas de Madrid desde allá arriba. “Hoy despedimos el Telediario desde el Pirulí. 40 años han pasado desde que se inauguró, han cambiado muchas cosas. También el skyline de Madrid, que entonces no existía. Para terminar, queremos compartir una imagen, las espectaculares imágenes de Madrid que hay desde aquí. Hasta mañana”, dijo la periodista en el cierre del Telediario.

Hasta 15 personas trabajan en el Pirulí las 24 horas, aunque justamente los platós de RTVE no están allí, sino al lado, en los dos edificios que conforman el complejo de Torrespaña a los pies del mismo.

El Pirulí fue un proyecto del arquitecto Emilio Fernández Martínez de Velasco, que fue pionero en su construcción, pues no está anclado, sino que se sostiene por su propio peso. Una técnica conocida como “tentetieso”. El fuste de hormigón se erigió en un mes y medio, y en total, solo tardó un año en terminarse su construcción. En aquel entonces, el Pirulí se alzó como la novena torre de comunicación más alta del mundo, aunque en la actualidad en España hay dos más altas, tras la Torreta de Guardamar en Alicante y la Torre de Collserola en Barcelona. En Madrid fue el edificio más alto (220 metros, equivalente a una construcción de 64 plantas) hasta que se levantaron las Cuatro Torres de la Castellana.

Dentro del Pirulí hay ocho plantas, cuatro de las cuales están cerradas, y en ellas hay equipamiento técnico, servicios auxiliares y 400 antenas. Los trabajadores trabajan hasta los 150 metros, y a partir de ahí hay enlaces y antenas.

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