Carla Rivas en su pueblo Almuniente, en Huesca

Carla Rivas en su pueblo Almuniente, en Huesca E. E.

Huesca

Carla Rivas, la joven voz contra la despoblación en Aragón: "Es importante mostrar esta realidad desde el pueblo"

Esta joven procedente de Almuniente tiene más de 10.000 seguidores en sus redes sociales gracias a vídeos explicando la vida en el medio rural. 

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Atrás queda el tópico de que los jóvenes abandonan sus pueblos para prosperar. La arcaica idea de que los pequeños municipios cortan las alas para crecer dista de la realidad con cada vez más jóvenes volviendo a casa para apostar por sus pueblos y su crecimiento. Carla Rivas forma parte de ese grupo de jóvenes que dejan a un margen las grandes ciudades para ser feliz en su pueblo. 

Procedente de Almuniente, un pueblo de Huesca de no más de 150 habitantes, esta joven de 24 años decidió que quería darle voz a su municipio para mostrar la realidad que esconde el mundo rural con la despoblación, la escasez de servicios, pero también los beneficios de crecer y prosperar en ellos. Así, hace apenas un año se lanzó a la piscina, y después de analizarlo y pensarlo mucho, decidió crear contenido sobre su pueblo. Una idea, confiensa, que surgió a raíz de su Trabajo Fin de Grado de Economía y de vivir alejada de casa en la gran urbe de Madrid.

"Me hizo darme cuenta de todas las cosas que había en el pueblo que yo aquí no tenía como poder ir andando a los sitios todo el tiempo que tienes, que no necesitas ir corriendo a todas partes. Entonces ahí empecé a pensar en cómo podía volver a estar relacionada con el medio rural", explica Carla. Después de mucho estudiar e investigar vio que había gente joven "que estaba enseñando la realidad, pero no explicando asuntos más teóricos". 

De esta forma, mediante vídeos que comparte en sus redes sociales intenta "enseñar esas peculiaridades que tiene el medio rural" tanto a personas de su entorno como al medio urbano para "que se den cuenta de qué es lo que pasa ahí". Su instagram ya acumula más de 10 mil seguidores y sus vídeos miles de visualizaciones con vídeos más técnicos sobre la despoblación o el reto demográfico como también curiosidades de su pueblo y talleres que realizan. 

Sus inicios tuvieron una gran acogida. Sin embargo, el reto vino cuanto tenía que compaginar mostrar la realidad de su pueblo desde su casa en Madrid: "Para mí era importante intentar grabar desde el pueblo para mostrar esta realidad. No tiene sentido que hable de despoblación desde la Gran Vía", bromea esta joven. Así, su vuelta al pueblo se convirtió en una vorágine de grabar tres o cuatro vídeos un sábado para poder tener contenido "real" para publicar. 

Después de casi un año viviendo en la capital española y probar lo que es vivir en una gran ciudad. Carla confiesa que se vuelve al pueblo nada más acabar marzo: "Al final cada día estaba más desencantada en Madrid. Empecé a pensar hasta qué punto estás en Madrid porque todo el mundo se va a Madrid o porque tú quieres estar", reflexiona. 

Su fuerte vínculo con el pueblo, el querer crecer en las redes sociales y terminar el grado de Sociología que está cursando tuvo un fuerte peso. Admite que "no fue una decisión díficil": "Me hace ilusión volver para tener tiempo, poder investigar más y poder moverme por otros pueblos y contar otro tipo de problemas o realidades", explica. 

"Siempre hemos vivido la despoblación como algo que nosotros teníamos que hacer algo"

Orgullo de pueblo 

La gran repercusión que está consiguiendo con sus vídeos está trayendo sonrisas y alegrías al pueblo que se encuentran "orgullosos" de que esta joven reivindique la importancia de los pueblos del mundo rural. "A la gente le hace mucha ilusión. Todos me piden que tengo que pasearme por todo el pueblo para que se vean bien todas las casas", cuenta divertida. 

Ante la decisión de comenzar con los vídeos desde Almuniente reconoce que no supuso una sorpresa para ninguno de sus vecinos porque "siempre han sabido que a mí mi pueblo me encanta". Además, no solo los residentes del pueblo están felices con el proyecto sino que su propia familia paterna procedente del municipio está inmersa en él y aportan ideas de futuros vídeos y enfoques. "Para nosotros nuestro pueblo siempre ha sido muy importante. Entonces siempre hemos vivido la despoblación como algo que nosotros teníamos que hacer algo", matiza.

De esta forma, esta joven aboga por crear comunidad ya sea con talleres que ella misma organiza, el último uno de velas caseras: "Un pueblo tiene tanta vida como sus habitantes quieran dársela", concluye.