La madre de Silvia, Toñi Santiago, en el homenaje este pasado jueves.

La madre de Silvia, Toñi Santiago, en el homenaje este pasado jueves. Emilio J. Martínez Salazar

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Santa Pola no olvida a Silvia, la última niña asesinada por ETA hace 20 años

Su madre, Toni Santiago, reúne a centenares de vecinos para recordar a su niña: "Cuando subí a la ambulancia supe que mi hija moriría", rememora.

5 agosto, 2022 10:18
Alicante

"Hace 20 años ya", le dice un vecino de Santa Pola a su acompañante. "Cuánto dolor, como si fuera ayer", le contesta ella; "a mí no me pilló la explosión cerca porque no me tocaba esa día", interviene una tercera persona. El reloj se aproxima a las 8 de la tarde, hora en la que Toñi Santiago ha convocado, un año más, a los vecinos de la villa marinera para recordar a su hija Silvia, víctima del atentado de ETA de Santa Pola contra la casa cuartel, del que este jueves se conmemoraron 20 años. 

[La incansable lucha de la madre de Silvia, la última niña asesinada por ETA en Santa Pola]

En ese instante, una ambulancia con las sirenas puestas pasa por delante del acto en dirección al Hospital de Elche. La reminiscencia, para los presentes, se hace inevitable. Porque en 2002 era otra ambulancia la que trasladaba, aún con vida, a la menor de seis años, como recordaría su madre en el día de ayer. 

El acto comienza puntual con la petición del padre de Silvia, José Joaquín Martínez, de un minuto de silencio. Entre el público, emocionados, están familiares, amigos y allegados de la familia y gente que ha secundado la convocatoria que en redes sociales ha lanzado Toñi Santiago. Entre el público, también, se encuentra la alcaldesa popular Loreto Serrano y la secretaria general del PSOE de Santa Pola, diputada nacional y concejala, Yolanda Seva. 

Un momento del acto de este jueves.

Un momento del acto de este jueves. Emilio J. Martínez Salazar

Santiago había venido avisando en entrevistas como la concedida a este medio, que no quería ver a "políticos que vinieran a hacerse la foto". Por lo que exigió que, quien viniera, "fuera a título particular". Ella quería así dejar todo el protagonismo a Silvia, presenta a través de una pancarta colocada en la rotonda donde existe una placa y con el lema "20 años sin Silvia. 'Yo no soy moneda de cambio'". 

Aunque el protagonismo también es para los agentes del cuartel de la Guardia Civil que sufrieron aquel atentado, que dejó 52 heridos. Algunos de ellos desfilaron tras el minuto de silencio entre aplausos con coronas de rosas blancas al ritmo de la canción homenaje a los Caídos. 

Y es que la música estuvo presente en los 45 minutos que duró el homenaje. Primero con la canción que dedicó a Silvia la asociación de personas discapacitadas Cielo de Colores Santa Pola, también la cantante local Ana Sevilla al piano o al final la artista Laia Guirao, quien interpretó el single 'No te rindas' de Álex Ubago del que Toñi Santiago ha dicho en varias ocasiones que "me acompaña no sé por qué desde hace 20 años". 

"Mi hija se muere"

Entremedias, la madre de la menor asesinada volvió a hablar y volvió a emocionar a los presentes, como años atrás. "Este año, particularmente, a mí me faltan las fuerzas", avanzaba. "Voy a intentar senerarme", añadía entre los aplausos del público. 

Toñi Santiago y su familia, durante el homenaje.

Toñi Santiago y su familia, durante el homenaje. Emilio J. Martínez Salazar

"No traigo nada escrito porque voy a retroceder 20 años atrás", proseguía. Es cuando comienza un relato estremecedor de aquel día en el que Silvia, dijo, "había aprendido a tirarse de la piscina". "Papá, ya no tengo miedo", rememora sus palabras. "En un momento, todo se volvió gris, no escuchábamos absolutamente nada, no veíamos. Cuando fui capaz de abrir los ojos solo vi un agujero a través de la pared y noté cómo la sangre corría por mi nariz. En ese momento escuché a mi niña llamarme. Me decía 'mamá, mamá', pero no era capaz de encontrar a mi pequeña". 

Al final la encontró, y comenzó a quitar los escombros que la cubrían. "Nos quedamos solas las dos y yo le decía a la virgen del Pilar, a la que ella adoraba, 'no te la lleves, llévame a mí y si se tiene que ir ella, llévanos a las dos'. Nunca entendí por qué se tuvo que ir ella y yo no, jamás", sentenciaba entre lágrimas. 

"Cuando suben dos compañeros para avisarnos de que tenemos que salir del cuartel, que hay otra bomba, les pide que se vayan ellos, que yo no me voy que mi hija se muere y que yo me muero con ella. Me la quitan y la bajan y yo bajo tras ella notando cómo se me incrustaban los cristales en los pies y diciendo '¡hijos de puta, habéis matado a mi hija!". 

Una niña deja un peluche en la placa en recuerdo de Silvia Martínez.

Una niña deja un peluche en la placa en recuerdo de Silvia Martínez. Emilio J. Martínez Salazar

En la ambulancia, recuerda cómo el médico que atendía a la menor decía al conductor que acelerara, "que iba a entrar en parada cardiorrespiratoria". Una vez en el hospital, "yo sabía que mi hija no iba a salir con vida. Y simplemente con la vista, me miró mi marido y lo miré y le dije que nos habíamos quedado con lo más sagrado que pueden tener unos padres, que son sus hijos", añadía. "Esto es lo que pasó el 4 de agosto de 2022 en Santa Pola, en mi casa".

Contra Sánchez

En la segunda parte de su discurso, Toñi Santiago tuvo duras palabras contra el PSOE de Pedro Sánchez. "Pasados estos 20 años de pelear para que nadie utilice la memoria que merece mi hija y todas y cada una de las víctimas que han sido asesinada de manera cruel por una banda de asesinos...", comenzaba su intervención. A continuación, tuvo recuerdo para Diego Salvá y Carlos Sáenz de Tejada, dos guardias civiles asesinados con bomba lapa hace 13 años, a los pidió un aplauso "porque el gobierno socialista de Mallorca se ha negado a que estos dos héroes sean homenajeados". 

"Y ahora me voy a dirigir a un traidor, canalla, cobarde que está utilizando la sangre de nuestros muertos como moneda de cambio en un proceso de rendición", añadía en alusión a Pedro Sánchez y a la política de reinserción de los presos etarras. "Señor presidente, bajo ningún concepto voy a tolerar que mi hija Silvia Martínez Santiago sea moneda de cambio en ningún proceso de negociación con los terroristas que la asesinaron", añadía.

Con estas reflexiones acababa un homenaje en la que la placa en recuerdo a Silvia se llenó de flores y peluches de sus vecinos que fueron testigos hace 20 años de su muerte, junto con la de Cecilio Gallego, un hombre de Torrevieja que esperaba en la parada del bus para volver a su ciudad tras pasar el día en la playa.